El aceite de pescado ha sido elogiado por su efecto positivo en varios componentes de enfermedades cardiovasculares, como la presión arterial y la reducción de lípidos. También hay evidencia de que puede mejorar los síntomas de los trastornos del estado de ánimo, como la depresión y el trastorno bipolar.
Sin embargo, menos conocido es que el aceite de pescado en realidad puede ayudar a regular los patrones de sueño y aumentar la calidad del sueño. Las razones detrás de tales afirmaciones involucran la relación de los ácidos grasos en la producción de varias hormonas y neurotransmisores.
Consecuencias del insomnio
Son muchas las personas que duermen menos de seis horas por la noche, algo que puede afectar a su salud. Si bien hay varias razones para el insomnio que van desde el dolor y el estrés hasta trastornos como el insomnio, la apnea del sueño y la narcolepsia, pueden tener muchas consecuencias adversas, además de no poder funcionar a pleno rendimiento durante todo el día.
La privación del sueño se asocia con numerosas implicaciones negativas para la salud, como las enfermedades cardíacas, la diabetes, la depresión y la obesidad a lo largo del tiempo, ya que la falta de sueño a menudo conduce a la falta de ejercicio y una alimentación saludable.
Deficiencia de ácidos grasos
Una dieta baja en los tipos de ácidos grasos que se obtienen fácilmente a través del aceite de pescado puede interferir con la producción de sustancias químicas fisiológicas normales. El aceite de pescado tiene un alto contenido de ácidos grasos omega-3 ácido eicosapentaenoico - EPA - y ácido docosahexaenoico - DHA - y se puede obtener directamente de pescado graso o de suplementos.
Una dieta deficiente en ácidos grasos omega-3 disminuye el ritmo de la melatonina, debilita el funcionamiento del reloj circadiano y participa en trastornos del sueño nocturnos.
Cómo puede ayudar el aceite de pescado
El aceite de pescado desempeña un papel en la mejora de la secreción de melatonina. La melatonina es una hormona que ayuda a regular los ciclos de sueño y vigilia y se usa a menudo para tratar el insomnio y el jet lag.
Los componentes de aceite de pescado EPA y DHA también han demostrado disminuir los niveles de norepinefrina. La norepinefrina es una hormona del estrés asociada con la respuesta de lucha o huida y trabaja para aumentar la frecuencia cardíaca, entre otras cosas.
También es uno de los principales neurotransmisores asociados con el sueño, el otro es la serotonina. La norepinefrina es un componente necesario del ciclo del sueño, ya que es responsable del Movimiento Rápido de los Ojos o la etapa REM. Un desequilibrio de norepinefrina puede afectar negativamente los patrones de sueño y provocar somnolencia durante el día.
Según la Organización Mundial de la Salud, las personas deben consumir de 0'3 a 0'5 gramos de EPA y DHA diarios. Esto equivale a al menos dos porciones por semana de pescado graso como el salmón, el fletán, el atún en conserva, el pez azul, el arenque, el abadejo y el bagre. El promedio de 1.000 miligramos de cápsula de aceite de pescado contiene una proporción de 180 miligramos de EPA y 120 miligramos de DHA, por lo tanto, una o dos cápsulas por día es la cantidad recomendada.
Como ves, el pescado además de ser bueno para tu salud es necesario para tu descanso. El descanso es primordial para tener un buen sueño nocturno y todo está influido para potenciar tu bienestar físico y mental. El pescado es necesario que lo incorpores en tu dieta porque te aportará los nutrientes necesarios para poder mantener tu organismo en un buen funcionamiento durante el día y un buen descanso por la noche. Si no sabes cómo incluir el pescado en tu dieta, habla con un nutricionista para que te ayude a encontrar tu dieta perfecta.