El juego puede parecer algo inofensivo pero si no se tiene cuidado, puede convertirse en un problema emocional o mental bastante importante puesto que podría convertirse en una peligrosa adicción. Hay tres tipos de jugador: el jugador profesional, el social y el que tiene un problema de adicción. Es importante tener en cuenta que el que tiene un problema, a menudo piensa que es un jugador social o profesional.
Los jugadores profesionales suelen apostar y dependen de sus habilidades en el juego (además de la suerte) para ganar dinero, aunque lo hacen de la forma más responsable posible. Tienen control total sobre el tiempo, el dinero y la energía que gastan en los juegos de azar. Los jugadores sociales consideran que el juego es una forma válida de actividad recreativa y mantiene el control total sobre el tiempo, el dinero y la energía que gastan en el juego. Consideran que el costo del juego es el pago por entretenimiento.
Problemas con la adicción al juego
El problema del juego implica la participación continua en las actividades de juego, a pesar de las consecuencias negativas. L os jugadores pueden tener un problema sin estar totalmente fuera de control.
El problema del juego es cualquier comportamiento de juego que perturba tu vida. Si te preocupa el juego, piensas mucho tiempo en el juego, gastas mucho tiempo, dinero y energía en él o juegas a pesar de las graves consecuencias, entonces es probable que tengas una adicción al juego.
Señales de adicción
Si bien no hay síntomas obvios ni signos físicos de adicción al juego como en otros tipos de adicciones, como en las drogas y el alcohol, hay algunas señales de alerta que señalan un problema:
- Sientes la necesidad de jugar todo el tiempo
- Te sientes emocionado con las grandes apuestas
- Eres excesivamente optimista pensando en que puedes ganar grandes sumas de dinero y no piensas que lo puedes perder
- Usas el juego como una manera de escapar de tu rutina diaria
- Apuestas incluso cuando no tienes dinero disponible y acumulas deudas
- Tienes amigos y familiares que se preocupan por cómo juegas
- Sigues apostando dinero en el juego a pesar de las consecuencias
- Tienes otro trastorno de ánimo asociado como depresión
Causas
A menudo, muchas cosas contribuyen a una adicción al juego, incluido el factor biológico, genético y ambiental. Los jugadores adictos pueden darse cuenta de que se sienten desesperados por obtener dinero, sentirse emocionados o sobre excitados por el juego, quieren buscar el estatus social de un jugador exitoso y también pueden tener otros trastornos del estado de ánimo y comportamientos que contribuyen o resultan de su adicción al juego.
¿Se puede tratar?
Al igual que otras adicciones, romper el ciclo de una adicción al juego puede ser muy difícil. Sentir que puedes recuperar el dinero que perdiste puede alimentar el problema. Si bien dejar de jugar no es fácil, se puede conseguir. Existen tres métodos principales para ayudar a los pacientes a superar la adicción al juego. Estos métodos incluyen:
- Psicoterapia, incluida la terapia cognitivo-conductual, que se centra en enseñar habilidades para cambiar los pensamientos y conductas que conducen al juego.
- Los medicamentos como los antidepresivos y los estabilizadores del estado de ánimo pueden ser útiles para los pacientes que tienen otros trastornos psiquiátricos que acompañan su problema de apuestas como la depresión, el trastorno obsesivo-compulsivo o el TDAH. Además, ciertos medicamentos conocidos como antagonistas narcóticos que se han encontrado útiles para tratar el abuso de sustancias también pueden ser útiles para tratar a algunos pacientes con adicción al juego.
- Grupos de autoayuda. Pueden ser una parte muy útil del tratamiento y prevenir una recaída.
Si crees que tienes un problema con el juego o las apuestas, el primer paso es aceptarlo y buscar ayuda en tu médico. Él te indicará los pasos que debes seguir para proteger tu salud mental.