La alcohorexia es un trastorno alimentario menos conocido que la anorexia o la bulimia pero igual de peligroso para la salud. La persona que sufre dicho trastorno evita ingerir alimentos con grandes cantidades de calorías para excederse en el consumo de bebidas alcohólicas. Cada vez son más los adolescentes los que sufren este tipo de trastorno y que no ven el peligro que tiene el alcohol para la salud. En el siguiente artículo te hablamos un poco más de este tipo de trastorno alimentario y qué hacer para evitarlo.
La alcohorexia entre las adolescentes
La alcohorexia es un trastorno que se suele dar entre las adolescentes, concretamente entre jóvenes de 18 a 24 años. El trastorno en sí comprende tres elementos bien diferenciados: un consumo excesivo de alcohol, una dieta desequilibrada y la práctica de ejercicio físico.
Las jóvenes suelen dejar de comer los días antes a la ingesta excesiva de alcohol y después de ello, practican ejercicio físico para eliminar las calorías presentes en el alcohol. Todo ello supone una serie de daños para la salud bastante evidentes:
- Falta de nutrientes provocado por una dieta totalmente desequilibrada.
- Ingesta de calorías vacías a causa de un consumo desmedido del alcohol.
- Serios daños a nivel emocional y cambios importantes en la conducta.
Cómo detectar un problema de alcohorexia
En estos casos el papel de los padres y del entorno más cercano a la joven, es clave a la hora de poder tratar un problema como es la alcohorexia. Hay una serie de signos o señales bastante evidentes, que pueden indicar que la adolescente sufre esta clase de trastorno alimentario:
- Son chicas que están obsesionadas con las calorías de los diferentes alimentos. Las cuentas a todas horas para evitar ingerir más de la cuenta y no coger unos kilos de más
- Suelen seguir algún tipo de dieta ya que no quieren engordar más de la cuenta. La imagen corporal es lo más importante en su vida diaria.
- Muestran mucho temor ante el hecho de coger unos kilos de más y engordar.
- Están obsesionadas con el ejercicio físico ya que es una forma efectiva de perder esas calorías ingeridas.
El alcohol y los jóvenes
Los datos indican que los adolescentes se suelen iniciar en el mundo del alcohol a partir de los 13 años de edad. Por desgracia, el alcohol está presente en muchas de las concentraciones de jóvenes y es muy raro aquel adolescente que no bebe cuando sale con los amigos.
Los datos son bastante reveladores a la vez que tristes y es que casi un 80% de los adolescentes ha llegado a tomar alcohol alguna vez en su vida. El número de chicas que consumen alcohol es mucho mayor que en el caso de los chicos. Además de esto, los datos señalan que 6 de cada 10 jóvenes afirman que se han emborrachado alguna vez.
El problema del alcohol es mucho mayor en el caso de los adolescentes, ya que su cerebro no está formado del todo y existen más probabilidades de que puedan terminar desarrollando un trastorno mental a medio o largo plazo. Por si esto no fuera poco, al comenzar a probar el alcohol desde que son bastante jóvenes tienen un riesgo mayor de ser alcohólicos.
En definitiva, la alcohorexia es un trastorno alimentario que en los últimos ha ido cogiendo fuerza sobre todo entre las jóvenes. La obsesión por el físico unido a la ingesta excesiva de alcohol, hace que este trastorno sea bastante peligroso para la salud. Es labor de los padres y de familiares el estar pendiente en todo momento de la vida de dichos jóvenes y evitar que puedan llegar a sufrir este tipo de trastorno que afecta a la comida.