No siempre los conocidos como morados o hematomas salen a causa de un fuerte golpe. En muchas ocasiones tales morados aparecen en diversas zonas del cuerpo a causa de la circulación, la ingesta de ciertos medicamentos o por ciertos problemas en los vasos sanguíneos. Acto seguido te hablo de una manera más detallada de por qué se producen ciertos hematomas sin que hay ningún tipo de golpe por medio.
Causas de la aparición de morados sin golpe
Qué hacer ante la aparición de morados y hematomas
Si has notado que tienes diversos morados por zonas de tu cuerpo es bueno que acudas al médico para que pueda observarlos y tratarlos de la mejor manera posible. Aunque en la mayoría de los casos la aparición de dichos hematomas o morados se suele deber a aspectos que apenas son importantes, en otras ocasiones la formación de dichos morados se puede deber a algo mucho más grave.
Si dicho hematoma se ha formado de repente y es bastante grande es importante el acudir de manera urgente al médico. En tales casos pueden indicar que algo no marcha bien como puede ser el padecer una leucemia.
Cómo evitar dichos morados
En muchos casos una mala circulación suele estar detrás de la aparición de los morados. Es por ello que se aconseja en otras cosas el practicar algo de deporte, evitar los kilos de más, no tomar el sol de una manera excesiva o llevar dentro de lo posible una vida lo más sana posible.
En el caso de que los hematomas o morados se hayan formado, no hay que preocuparse en exceso ya que en un par de semanas suelen desaparecer. Además, se aconseja el tratarlos con cremas o pomadas que ayuden a mejorar la circulación. El aplicar un poco de hielo durante los primeros días es bueno para que el hematoma desaparezca antes. Ponerse compresas tibias en las zonas de los morados es recomendable para activar la circulación de la sangre y rebajar la inflamación propia de los hematomas o morados.
En resumen, la aparición de hematomas en el cuerpo sin que haya habido un golpe no suele ser para nada preocupante y siguiendo una serie consejos o pautas desparecen en el plazo de una semana y media como mucho.