¿Las personas a media que envejecemos no tenemos el mismo sueño? Existe el mito de que las personas mayores necesitan menos horas de sueño. Esto no es cierto aunque haya muchas personas en nuestra sociedad que aún crean que sí es cierto. Todos los adultos necesitan entre siete y nueve horas de sueño cada noche. A medida que envejecemos, se vuelve más difícil dormir bien por la noche pero esto no significa que no se necesiten las mismas horas para tener un descanso reparador. Uno de los desafíos para un envejecimiento saludable es la solución de problemas de sueño para garantizar que estamos descansando lo suficiente para tener una buena salud.
El cambio de sueño en las personas mayores
Son muchas las razones por las que las personas mayores comienzan a tener problemas de sueño y también les cuesta quedarse dormidas. Esto puede ser que les cuesta más conciliares sueño, tienen menos sueño profundo, se despiertan más veces por la noche, se levantan para ir al baño, el sueño no es tan satisfactorio y pueden dormirse antes por la noche por lo que podrían levantarse antes por la mañana.
Por qué los adultos mayores duermen menos
A medida que las personas envejecen el cuerpo cambia. Estos cambios afectan la duración y la calidad del sueño. Dependiendo de la situación, uno de estos factores puede ocurrir:
Hormonas
A medida que el cuerpo envejece se crean menos hormonas del sueño importantes: la melatonina y la hormona del crecimiento.
La melatonina es importante porque los cambios en el nivel de esta hormona controlan el ciclo de sueño . Con menos melatonina en el cuerpo, muchos adultos mayores se sienten somnolientos al anochecer y se despiertan temprano en la mañana. También pueden tener más problemas para conciliar el sueño.
La hormona del crecimiento es lo que hace que los niños duerman tan profundamente. A medida que se envejece, el cuerpo secreta menos de esta hormona y el sueño profundo se vuelve más difícil.
La menopausia
La menopausia causa muchos cambios hormonales en las mujeres, a veces resulta en sudores nocturnos y otros síntomas que interfieren con el sueño.
Condiciones de salud
Las condiciones de salud pueden interferir con el sueño. Cuando una persona comienza envejecer se tienen más probabilidades de desarrollar una enfermedad crónica. Estas enfermedades producen cambios en el cuerpo que interfieren con el sueño normal. Si se controlan estas enfermedades no habrían tantos problemas para conciliar el sueño. Algunas de estas condiciones que afectan al suelo son: diabetes, problemas en la próstata, enfermedades cardíacas, hipertensión, problemas cardiovasculares, la enfermedad de Parkinson, la enfermedad de Alzheimer y las enfermedades mentales que pueden causar ansiedad que interfiere con el sueño.
Cambios en el estilo de vida
A medida que se envejece las rutinas diarias también cambian y esto puede cambiar los hábitos saludables del sueño. Al aumentar el ejercicio y el tiempo al aire libre (el sol ayuda a producir melatotina) y disminuir la siesta (si duermes siesta por la noche será más difícil dormir), mejorará tanto la duración como la calidad de su sueño.
Medicamentos
A medida que las personas envejecen pueden tomar medicamentos para mejorar sus condiciones de salud, pero hay medicamentos que pueden interferir en la calidad del sueño. Tendrás que hablar con tu médico si hay medicamentos que te hagan dormir peor. Algunos medicamentos comunes que interfieren con el sueño incluyen algunos medicamentos para la presión arterial alta , antidepresivos, esteroides, algunos descongestionantes y broncodilatadores.
Si tienes una mala calidadx del sueño tendrás que encontrar qué es lo que causa este problema y encontrar la mejor solución dependiendo de tu caso en particular. Si tu sueño no mejora quizá tengas un trastorno del suelo y necesitarás hablar con tu médico para tratar esta condición. Recuerda que aunque envejezcas es muy importante tener una buena higiene del sueño para garantizar que tienes una buena salud. ¡El sueño reparador es imprescindible a cualquier edad!