Los bebés pueden desarrollar riñones agrandados, una condición conocida como hidronefrosis, mientras están en el útero o después del nacimiento. Esta condición es el problema descubierto con mayor frecuencia revelado por los exámenes de ultrasonido de los bebés en el útero.
Los riñones, un par de órganos en forma de alubia, producen orina a partir del exceso de agua y productos de desecho que filtran de la sangre. La orina pasa a través del tracto urinario hacia el exterior del cuerpo. Pueden ocurrir defectos estructurales durante el desarrollo del tracto urinario, y estos defectos pueden bloquear el flujo de orina y causar un riñón agrandado en los bebés.
Bulto en el uréter
Los uréteres, el par de tubos que se extienden entre los riñones y la vejiga, pueden desarrollar una anormalidad que provoca el bloqueo del flujo de orina. El extremo inferior del uréter puede desarrollar una protuberancia llamada ureterocele que sobresale hacia la parte interna de la vejiga.
Esta parte prolapsada del uréter puede impedir el flujo de orina y hacer que se acumule en el uréter y el riñón, y esto puede causar un riñón agrandado. Una intervención quirúrgica puede reparar el uréter con problemas.
Obstrucciones en el uréter
Los bebés pueden desarrollar un riñón agrandado debido a una obstrucción congénita en el uréter conocida como unión ureteropélvica congénita u obstrucción. En los bebés con una obstrucción en la unión ureteropélvica, el uréter se estrecha en el lugar donde se conecta con el riñón. Esto reduce el flujo de orina entre el riñón y la vejiga, y la orina se acumula dentro del riñón, causando agrandamiento.
La obstrucción de la unión ureteropélvica puede desarrollarse lentamente y puede provocar un bloqueo parcial del flujo de orina. En tales casos, el riñón no sufre ningún efecto permanente, pero en casos de obstrucción más grave, la afección puede provocar daño renal.
Obstrucciones en la uretra
Puede ocurrir una obstrucción congénita en la abertura de la vejiga o a lo largo de la uretra. El término médico para esta afección es obstrucción de la salida de la vejiga y puede causar riñones agrandados en niños de ambos sexos. Una forma de obstrucción de la salida de la vejiga, que ocurre solo en niños, involucra crecimientos uretrales anormales conocidos como válvula uretral posterior. Esta condición puede causar obstrucción total del flujo de orina en algunos casos, lo que resulta en daño renal severo.
Reflujo
La orina fluye a través de los uréteres hasta la vejiga, y la unión donde ocurre esto funciona como una válvula para evitar que la orina regrese a los uréteres. Un defecto en esta área puede causar un mal funcionamiento de la válvula, lo que permite que la orina retroceda o refluya hacia los uréteres y los riñones.
Esta afección, conocida como reflujo vesicoureteral, puede causar agrandamiento de uno o ambos uréteres y riñones. En casos de reflujo severo, el desarrollo de los riñones puede verse obstaculizado y los niños con la afección pueden seguir siendo vulnerables a otras infecciones a medida que crecen.
Si crees que tu bebé puede tener algún tipo de problema con los riñones no esperes a que se le pase solo porque lo más probable es que la condición empeore con el tiempo. Este tipo de afecciones pueden generar problemas de salud bastante serios por lo que es muy importante que el medico de tu bebé o pediatra le haga una evaluación médica desde el primer momento. Aunque cuando tu bebé aun no haya nacido y esté en tuitero el médico ya le habrá valorado el estado de sus riñones. Aunque puede nacer con ellos sanos y que después aparezca la afección.