Es bastante normal que el ser humano tenga cierto temor tanto a la enfermedad como a la muerte. A día de hoy el cáncer es sin lugar la enfermedad que se encuentra más en boga de todos debido a la gravedad de la misma y a las muertes que provoca al año en todo el mundo. De ahí que mucha gente muestre un gran miedo cada vez que escucha la palabra cáncer.
Ello es algo normal y comprensible, el problema aparece cuando dicho miedo se vuelve obsesivo y afecta negativamente al día a día de la persona. Es lo que se conoce con el nombre de cancerofobia o miedo a padecer cáncer. Se trata de un tipo de fobia que si no se trata llega a minar a la personas tanto a nivel físico como mental y emocional.
El miedo a padecer cáncer
El miedo a padecer o sufrir cáncer se conoce con el nombre de cancerofobia. Se trata de un miedo totalmente irracional que afecta a la persona en la vida cotidiana. Es tan fuerte dicho miedo que la persona puede llegar a evitar el tomar el sol porque piensa que puede llegar a sufrir melanoma o cáncer de piel. La cancerofobia provoca que la persona tenga unos altos niveles de ansiedad y vea constantemente peligros y riesgos donde no los hay. Se trata de una fobia que se puede llegar a comparar con la famosa hipocondría.
Las personas que padecen tal tipo de fobia optan por tomar dos caminos. En el primero de ellos se evita aquellas cosas o situaciones que pueden llegar a provocar cáncer. Se tiene por tanto un especial cuidado con la alimentación o con la higiene. El segundo camino consiste en evitar en todo momento el ir a visitar al médico. No quieren escuchar la palabra cáncer por parte de un profesional y prefieren vivir con una continua duda y con la ansiedad que ello le provoca.
A parte de tomar estos dos caminos de evitación, los que padecen cancerofobia tienen un miedo obsesivo frente a la enfermedad del cáncer. En este caso, en vez de evitar el tema se obsesionan con el mismo recabando toda la información posible sobre tal enfermedad. Ante cualquier molestia o dolor en su cuerpo, acuden rápidamente al médico para descartar que puedan sufrir cáncer. Ello va a provocar en el paciente unos altos niveles de ansiedad que repercuten de una manera en la vida cotidiana ya sea en el trabajo o con la familia. Es tal el miedo obsesivo que sufren, que si el médico no encuentra nada reseñable en su cuerpo, pueden llegar a pensar que el profesional se ha equivocado acudiendo a otro diferente.
Lo que hay de cierto y de falso en el cáncer
A partir de la base de que el cáncer es la enfermedad de este siglo y que ha aumentado con el paso de los años. Al parecer un gran número de expertos señalan que dicho aumento se debe sobre todo a que dicha enfermedad se detecta más precozmente. A pesar de dicho incremento, la prevención sigue siendo la forma más eficaz a la hora de evitar el padecer algún tipo de cáncer. El llevar en todo momento un estilo de vida lo más saludable posible a base de una buena alimentación y de la práctica de ejercicio a diario hace que el riesgo de sufrir cáncer sea mucho menor.
En el caso de sufrir este tipo de fobia de nombre cancerofobia, lo mejor es el acudir a un psicólogo que te ayude a tratar tal problema. Si no se trata como se debe, la persona puede llegar a sufrir graves consecuencias tanto a nivel físico como a nivel mental.