Existen algunos malos hábitos que son bastante comunes en las personas. Se piensa que es demasiado complicado el poder acabar con ellos, pero con las estrategias adecuadas no tiene que ser difícil conseguir. Eso sí, también es importante que al mismo tiempo, se tenga fuerza de voluntad.
Dormirse por las mañanas
A todos los gusta dormir, nos sentimos muy bien por las mañanas arropados entre las sábanas. Es posible que cuando te despiertas antes te sientas más atontado. Es normal, tiene que ver con tu cerebro y con los ciclos del sueño.
Tu cerebro duerme en ventanas de 60 a 90 minutos. Cuando te despiertas para apagar la alarma, le estás diciendo a tu cerebro que estás listo para comenzar el día. Pero si lo haces y vuelves a dormirte, despertándote 20 minutos después, en realidad estarás despertándote en mitad de otro ciclo de sueño, por lo que te sentirás aún más atontado que la primera vez que despertaste.
Lo mejor es que cuando te tengas que levantar, simplemente lo hagas. Así, tendrás más tiempo para hacer ejercicio, leer, pasar tiempo en pareja o no llegar tarde al trabajo. También sentirás mucho mejor mejor. Para reemplazar el hábito de presionar el botón de repetición en el despertador y volver a dormirte, debes cambiar el hábito en el sueño. Primero, no te acuestes con tu teléfono o alarma al lado de tu cama.
Coloca el teléfono o la alarma en algún lugar donde tengas que levantarte para poder apagarlo. Una vez que estés despierto será más difícil que te vuelvas a dormir. El próximo paso es tener un plan para tu mañana. Necesitas una razón para levantarte en lugar de dormir hasta el último minuto; esto podría ser leer un libro, hacer ejercicio o llevar a tu perro a dar un largo paseo. Al levantarte físicamente y tener un plan para el día, podrás dejar el hábito de presionar el botón de repetición en tu alarma.
Si duermes y presionas la repetición, estás comenzando el día de forma reactiva en lugar de proactivamente. Al ignorar su alarma, es más probable que se sienta mareado, estresado y apresurado cuando se pone a trabajar. Esto podría llevar a un rendimiento deficiente al tratar con un cliente o compañero de trabajo a primera hora de la mañana. Una vez que te comprometas con el hábito de despertarte temprano, comenzarás el día renovado y con energía para el trabajo.
La televisión pudre tu cerebro
Existen estudios que afirman que las personas ven la televisión unas 5 horas al día. Esto hace que en un año las personas vean la televisión nada menos que 77 días. Para reemplazar el mal hábito de ver la televisión para no pensar, es necesario que tengas fuerza de voluntad.
El primer paso es tener libros en la casa. Luego, coloca los libros de la tablet o el libro físico al lado del mando de la televisión. Después, en lugar de ver la televisión coge el libro. No tieneS que dejar de ver la televisión por completo, simplemente comprométete contigo mismo a leer de 30 a 60 minutos antes de ver la televisión.
Esto te dará la costumbre de aprender algo nuevo y reemplazar tu antiguo hábito de coger el mando de la televisión. Si no te gusta leer libros, experimenta con otros métodos de aprendizaje como videos de YouTube, podcasts o cursos en Internet. Encuentra algo estimulante para tu mente que no sea otra serie de Netflix.
Al intercambiar lecturas en lugar de ver constantemente Netflix, es probable que te vuelvas más creativo en tu vida personal y en el trabajo. Un libro relacionado con aprendizajes, puede ayudarte a alcanzar el éxito.
Estos son los dos malos hábitos más extendidos en personas de todas las edades, pro eso es necesario saber cómo acabar con ellos y tener una vida más saludable. ¡Aumenta la calidad de vida!