Para muchas de nosotras adelgazar es sinónimo de pasar hambre y hacer deporte todos los días, sacrificando así nuestro bienestar diario. Aunque si seguimos estas dos pautas adelgazaremos de forma rápida, este no es el mejor remedio para mantenernos sanas y adelgazar de forma segura, ya que nadie es capaz de llevar una dieta estricta durante mucho tiempo.
Aprender a comer sano y acostumbrar a nuestro cuerpo a hacerlo bien, es una de los mejores hábitos que podemos tomar en la vida, ya que no es necesario pasar hambre para estar delgada. De este modo, podremos comer de todo, evitando que nos den ataques de ansiedad que nos hacen ir al frigorífico o a la despensa a comer lo primero que pillemos y estaremos saciadas todo el día.
Consejos para adelgazar sin pasar hambre
Hay algunos trucos que podemos llevar a cabo en nuestra vida diaria que nos ayudarán a adelgazar de forma sana y saludable y conseguirán también que nos mantengamos sin hambre durante todo el día.
Lo primero que tenemos que hacer antes que nada es establecer un horario y una rutina. Cuando tienes un horario fijado para el desayuno, almuerzo, merienda y cena, tu cuerpo se acostumbra a ello y no te demanda que lo alimentes fuera de estos horarios por lo que así evitarás el picoteo entre horas y comer cosas que no debes. Por otro lado, elegir un día de la semana para organizar tu menú semanal puede ser muy bueno a la hora de adelgazar, ya que sabrás en todo momento lo que tienes que comer y así no recurrirás a atracones innecesarios.
Hacer cinco comidas al día es esencial cuando queremos adelgazar. Esto por un lado nos ayudará a mantener nuestros niveles de glucógeno estables, por lo que no tendremos picos de insulita altos en nuestro cuerpo. Esto también nos ayuda a que nuestro cuerpo esté haciendo de forma constante la digestión, lo cual conlleva un gasto calórico bastante elevado. Realizar cinco ingestas, pequeñas y con alimentos saludables, puede conseguir que quememos más calorías de las que consumimos debido al gasto calórico que supone hacer la digestión. Por último, este pequeño truco nos mantendrá todo el día sin hambre, ya que nuestro estómago estará siempre saciado.
Comer despacio y saboreando la comida. El organismo necesita aproximadamente unos 20 minutos para reaccionar y tener consciencia de que está comiendo. Esto es debido a que es el tiempo que la información tarda en llegar al cerebro, por lo que comer lento ayudará a que nuestro cerebro sea más consciente de que estamos comiendo y así se sacie antes. Aparte de esto, comer de manera más lenta nos ayudará a saboreas más y mejor la comida, disfrutando de su sabor, por lo que llegaremos a la siguiente comida con más sensación de saciedad.
Por otro lado, centrarnos en nuestra comida mientras comemos sin distraernos con nada también ayudará a mantenernos concentrados y así nuestro cerebro no tendrá distracciones que pueden conseguir que al final acabemos comiendo más de la cuenta o cosas que no debemos. Evitar mirar la tele o el móvil mientras comemos va a ser esencial.
Busca alternativas saludables a las versiones de comidas más grasientas y calóricas. A todos nos gusta de vez en cuando comer una pizza o una hamburguesa pero ¿Quién dice que esto no sea posible mientras nos encontramos en una situación de querer adelgazar? Sustituir los ingredientes más calóricos por otros más saludables es la clave para poder comer de todo. Haz tu propia pizza o tu propia hamburguesa en casa. Utiliza para ello harinas integrales, carnes magras como la de pollo y pavo. Saca tu imaginación y tu creatividad a la hora de cocinar y adapta tus comidas favoritas a las versiones más light. Esto te permitirá comer de todo, no pasar nada de hambre y disfrutar de una alimentación rica y sana mientras adelgazas sin darte apenas cuenta.