Las personas que tienen éxito en la vida parece que la confianza en sí mismos les sale por los poros de la piel. Ellos creen en sí mismos y también en las cosas que hacen cada día. Pero no es el éxito que tiene los que les hace confiar, es la confianza que tenía antes lo que les ha hecho triunfar.
La duda genera dudas
La duda genera dudas. ¿Por qué alguien puede creer en ti si tú eres el primero en dudar en tus habilidades? No tiene sentido. Se necesita confianza en uno mismo para alcanzar nuevos retos. Las personas que tienen miedo o inseguridad tienden a permanecer dentro de sus zonas de confort. Pero las zonas de confort raramente se expanden por sí solas... Es por eso que las personas que carecen de confianza se quedan atrapados en puestos de trabajo sin salida y permiten que las buenas oportunidades pasen por delante de sus narices como si nada.
Las personas que no confían en sí mismos a menudo se sienten a merced de las circunstancias externas. Las personas exitosas no son disuadidas por los obstáculos y saben que con persistencia y tesón, las adversidades siempre son temporales. Nadie te está impidiendo lo que quieres lograr... Solo lo haces tú mismo cuando dudas de ti o de tus habilidades.
La confianza es un elemento fundamental para tener una vida exitosa. Con la orientación apropiada y un trabajo interno bastante duro, cualquier persona puede llegar a ser más confidente en sí mismo. Una vez que pases un cierto punto, podrás sentir esa confianza desde lo más profundo de tu corazón... Y no tendrás quien te pare.
Estrategias para aumentar la confianza en ti ganar en salud emocional
Mira en tu interior
Hay una diferencia entre presunción y confianza. La presunción es presumir de ti mismo. Confianza significa que crees que puedes lograrlo. En otras palabras, la confianza se obtiene a través del trabajo duro y las personas confiadas son conscientes de sí mismas. Cuando tu confianza excede a tus habilidades, entonces habrás cruzado la línea de la arrogancia. Es una gran diferencia.
Para aumentar tu confianza, es importante hacer una auto-evaluación honesta y precisa de tus habilidades. Si hay puntos débiles en tu conjunto de habilidades deberás hacer planes para fortalecerlas y encontrar maneras de minimizar el impacto negativo en tu vida. Es necesario que no hagas caso omiso de tus debilidades y que además comprendas cuáles son tus fortalezas. Así podrás trabajar en tu mejora personal ganando confianza.
Aprende a decir 'no'
Las investigaciones realizadas en la Universidad de California en San Francisco mostraron que cuanto más difícil es para ti decir que 'no', más probable es que experimentes estrés, agotamiento e incluso depresión, todo lo cual erosiona la confianza.
La gente que confía en sí mismo sabe que decir no es sano y tienen la confianza suficiente para decirlo sin reparos. Cuando es hora de decir que no, las personas confiadas evitan frases como: 'no creo', 'no estoy seguro'. Dicen que no con confianza porque saben que decir no a un nuevo compromiso honra sus compromisos existentes y les honra por su sinceridad.
Busca tus pequeñas victorias
Las personas confiadas tienden a desafiarse y competir con ellas mismas, incluso cuando sus esfuerzos producen pequeñas victorias. Pequeñas victorias construyen nuevos receptores de andrógenos en las áreas del cerebro responsables de la recompensa y la motivación...
Por lo que valorar las pequeñas victorias siempre será un beneficio para las personas con confianza en sí mismas, además que sabrán que son gracias a sus propias habilidades y no a factores externos. Este aumento en los receptores de andrógenos aumenta la influencia de la testosterona, lo que aumenta aún más tu confianza y tu afán de enfrentar los desafíos futuros.
La agresividad no es confianza
Agresividad no es confianza: es intimidación. Cuando se es una persona insegura es fácil acabar cayendo en la agresividad sin la intención de serlo realmente. Es importante que practiques en afirmarte sin agresividad, así mejorarás la confianza en ti mismo.