Todos sabemos que llevar una dieta sana y variada nos ayuda a sentirnos mejor con nuestro cuerpo, pero el efecto que tiene sobre nuestra salud es igual de importante. Si además sufrimos algún tipo de enfermedad o condición sabremos que una alimentación adaptada a nosotros será esencial para que nuestro estado mejore, o al menos, no empeore.
Un 10% de la población mundial sufre algún problema con la tiroides. Si este es tu caso y estás diagnosticada con hipo o hipertiroidismo la dieta que sigas te ayudará en gran manera a controlar tu condición.
¿Cuáles son los mejores alimentos para la tiroides?
Estos son los alimentos que más benefician a aquellas personas con trastornos de tiroides.
Yogur
Un elemento necesario para que la tiroides funcione correctamente es el yodo, ya que de lo contrario no se produce la cantidad adecuada de tiroxina. Aunque la sal ya contiene yodo muchas veces no tomamos la suficiente o no nos gusta salar los alimentos. Una buena alternativa es tomar yogur porque a los productos lácteos, con yodo ya de por sí, se le añade un poco más durante su fabricación. De la misma manera sería también muy beneficioso un vaso de leche entera.
Pollo y vaca
En lo que respecta a las carnes, la mejor opción para reforzar la tiroides es la carne de pollo y de vaca, ya que son ricas en zinc. El zinc también es otro nutriente clave en la alimentación si queremos que la tiroides funcione como debe, y cuando se tiene hipotiroidismo sus niveles en nuestro cuerpo pueden ser bajos porque se absorbe rápidamente. Por sus nutrientes y poca grasa la carne de pollo y de vaca es la mejor opción, siempre que se prepare de la manera más natural posible.
Nueces
Las nueces son un sano tentempié que aportarán selenio a nuestro organismo, otro componente que ayuda al buen funcionamiento de la tiroides. Pueden comerse solas o añadiéndolas a otro plato y además son muy fáciles de llevar si nos coge hambre estando fuera de casa. También hay donde elegir: nueces de Brasil, de macadamia, avellanas... Sólo recuerda que ingerir demasiado selenio puede ser peligroso para la salud, así que es mejor ceñirse a los 400 microgramos máximos por día.
Pescado
Las propiedades positivas que nos aporta comer pescado son muchas, pero en este caso nos centraremos en dos: el yodo y los ácidos grasos omega 3. Como hemos indicado anteriormente, el yodo es necesario para fabricar la tiroxina y si, en el caso del hipotiroidismo nos falta, el yodo que encontramos en el pescado nos ayudará a que se produzca. Por otro lado, el ácido omega 3 que contiene la sardina, el salmón o el atún disminuirá el colesterol malo y por consiguiente los problemas de corazón que puedan haber, más probable si no tenemos una tiroides controlada.
Algas
Pero si hay algún alimento que sea rico en yodo es con diferencia las algas, muy recomendadas para casos de tiroides. Se pueden consumir es sopas, ensaladas u otros platos como el sushi y además contienen otros nutrientes muy beneficiosos como las vitaminas A, B, C, E y K, fibra o calcio. Tal y como ocurre con el selenio, ingerir demasiado yodo también puede provocar el efecto contrario : una ensalada de algas al día es más que suficiente.
Fresas
Las fresas o cualquier tipo de baya, como pueden ser también el fresón, las moras o los arándanos, se han descubierto muy favorables para la tiroides por sus valores antioxidantes. Está comprobado que las personas con problemas de tiroides tienen niveles más elevados de radicales libres dañinos, y por lo tanto se produce mayor envejecimiento en las células. Por ello, los antioxidantes que se encuentran en las bayas pueden ayudar a frenar este proceso.
¿Qué alimentos es mejor evitar?
Así como encontramos nutrientes que nos ayudarán a reforzar la labor de la tiroides para que produzca el nivel de tiroxina adecuado, encontramos alimentos que propiciarán lo contrario. El gluten es uno de los primeros elementos que se aconseja por lo menos minimizar si se tienen problemas de tiroides. Al ser una proteína que se encuentra en alimentos cuando son procesados puede irritar el intestino y frenar la absorción del tratamiento para la tiroides que estemos tomando. Por ello, lo ideal es tomar la medicación horas antes o después de haber comido gluten. De la misma manera actúa el café; se recomiendo tomarlo 30 minutos después de haber tomado el medicamento con agua.
Las comidas procesadas, refinadas o con muchas grasas son perjudiciales en este y en muchos otros casos. Los problemas de tiroides pueden hacer que el metabolismo vaya más lento y es posible engordar si no está bien tratado. Si además ingerimos este tipo de alimentos estaremos nutriendo nuestro cuerpo con elementos nocivos.
Por último, la soja ha sido polémica por su efecto en la tiroides, debido a que los estrógenos pueden interferir en la producción de tiroxina y la soja está cargada de fito estrógenos vegetales. Ante la duda, es mejor disminuir su uso.