Una pregunta recurrente en las mujeres es cómo mantener sus genitales limpios y cuidados de una forma correcta y sin dañarse, aunque pueda parecer una respuesta sencilla en realidad tiene más miga de lo que parece. Los restos de orina, sudor y menstruación unido a la poca ventilación a la que está expuesta la zona hacen que nuestros genitales sean propensos a tener infecciones. Hay que tener en cuenta que los genitales femeninos son especialmente delicados y debemos tomar siempre la máxima precaución para evitar daños o infecciones, sin embargo, a veces nos preocupamos tanto por la higiene íntima que lejos de ayudar, lo que hacemos es aumentar el problema. El uso de jabones o limpiadores inadecuados puede favorecer la proliferación de bacterias, aumentando así el riesgo de infección. A continuación te contamos como.
Nuestra vagina contiene un pH distinto según en la fase de ovulación en la que nos encontremos. Así, durante nuestra etapa más fértil el pH es ligeramente más ácido, en torno a un 4 y 5, mientras que durante la prepubertad y más adelante en la menopausia sube a un nivel neutro, a 7. ¿Por qué es más ácido cuando somos fértiles? Cuando estamos ovulando es muy importante que la vagina esté protegida frente a bacterias y otros indeseables microorganismos, en este sentido, la acidez de las paredes y flujo vaginal permite arrastrar células muertas y matar a las bacterias que pudiesen atacarnos.
El flujo debe ser líquido y sin olor, aumentando su concentración al excitarnos sexualmente.
Por otro lado, el uso de jabones no adecuados van a modificar el pH de nuestra vagina de forma que puede producirnos irritaciones, picores y que las paredes vaginales no cumplan adecuadamente su función de generación del flujo, llegando a ser contraproducente. Tampoco es mejor limpiar "demasiado", porque incluso usando solo agua un exceso de limpieza provoca sequedad de la zona porque estaremos arrastrando al exterior la flora vaginal beneficiosa que nos protege frente a los microorganismos patógenos.
Propiedades que debe tener un jabón íntimo
El pH hace referencia al grado de alcalinidad de una sustancia, considerándose valores bajos como 1-2-3... las sustancias ácidas, por ejemplo el zumo de un limón, mientras que las sustancias alcalinas comprender valores a partir del 8 hasta el 14, el 7 es un valor neutro. En el caso de la vagina, el pH depende del ciclo en el que se encuentra la mujer. Las chicas prepúberes y las mujeres con menopausia tienen un pH neutro de 7, sin embargo, durante los periodos de ovulación el pH desciende desde 4 a 5 aproximadamente. El problema es que si nosotros incluimos en nuestra higiene un jabón con un pH superior podemos descompensar el pH vaginal y nuestro cuerpo reaccionará inflamándose, irritándose o con la aparición de picores.
Un jabón íntimo tiene que tener un pH parecido al de la vagina, entre 3,5 y 4,5, huye de los jabones corporales de uso diario, tienen una alcalinidad en torno a 11 y 12. Por otro lado, los jabones neutros (al igual que el agua rondan los 7) pueden sacarnos del apuro pero tampoco es recomendable su uso frecuente, solo puntual en caso de no tener un jabón íntimo específico. Un uso prolongado podría destruirse la flora vaginal. Otros datos a tener en cuenta a la hora de escoger el jabón íntimo son:
- El jabón íntimo no debe de contenter sustancias irritantes ni agresivas, parabenos o alérgenos.
- Uno que no tenga perfume ni otras sustancias que alteren el pH.
- Uno que tenga agua termal. Aunque no es necesario si es recomendable porque te puede ayudar a regenerar las células de la zona.
- Que tenga propiedades antibacterianas y ácido láctico. El motivo es que en algunas etapas de la vida la mujer es más vulnerables a infecciones, por ejemplo durante el embarazo o durante el periodo menstrual (la sangre es un medio de cultivo para las bacterias).
- Que tenga propiedades calmantes e hidratantes.
- Que puedas usar de forma diaria e incluso varias veces al día en verano.
¿Realmente es necesario un jabón íntimo?
Hay debate sobre esto y las opiniones pueden ser diferentes incluso entre los profesionales. Un jabón íntimo no es obligatorio, puedes perfectamente mantener una buena higiene vaginal sin usarlo, sin embargo, puede ayudar a evitar infecciones, sobre todo si te encuentras en tu periodo, has estado haciendo actividad deportiva o es verano. Eso si, debe de tener ácido láctico y un pH adecuado.
Pautas a seguir para cuidar tu salud vaginal
1- No realices duchas vaginales, solo arrastrarás la flora vaginal beneficiosa.
2- La zona perianal tienes que lavarla de adelante hacia atrás para que los gérmenes que pueda haber en el ano no pasen a la vagina. Es importante enseñar a las niñas desde pequeñas a seguir este mismo orden.
3- No laves tus genitales con una esponja. Usa la mano y un poco de jabón íntimo en la zona externa que es la que está en contacto con el sudor, orina, etc. Nunca por dentro. Así evitaremos picores e irritaciones. Después enjuaga con suficiente agua hasta que desaparezca toda la espuma.
4- Antes de tener relaciones sexuales con una persona lávate las manos y la zona genital, después de ellas orina y vuelve a lavar la zona con un poco de jabón íntimo y abundante agua, pero solo la zona exterior. Por último, seca la zona con una toalla y sin restregar.
5-Durante la menstruación cámbiate las compresas o tampones al menos cada 4 horas durante el día. Además es preferible que no uses tampones a la hora de dormir.
6- Elige ropa interior de algodón y no telas sintéticas, son transpirables y reducen el mal olor. A la hora de lavarla usa un jabón suave y no demasiado perfumado. Y por supuesto, debes cambiarte todos los días de ropa interior. También es recomendable el uso de prendas holgadas, evitando las que son demasiado ajustadas.
7- Evita el uso de productos como desodorantes íntimos porque pueden contener irritantes y además en el caso de haber una infección pueden estar enmascarándola y pasar desapercibida hasta que sea tarde. Otros con los que debes de tener cuidado son: espermicidas, salva-slips perfumados y en ocasiones el látex.
8- Las toallas de uso íntimo no deben compartirse en ningún caso.
9- Acude al ginecólogo regularmente.