La bulimia, también conocida como bulimia nerviosa, es un trastorno de la conducta alimenticia, en el cual, la persona que lo padece percibe de manera distorsionada su cuerpo y es incapaz de controlar la necesidad que tiene de alimento.
Como respuesta a esta percepción errónea de la realidad, la persona bulímica se provoca el vómito, toma laxantes o realiza excesivo deporte tras un atracón, es decir, tras haber ingerido una gran cantidad de alimentos de elevado nivel calórico en poco tiempo, para evitar que su cuerpo absorba las calorías de estos y engorde.
Se trata de una enfermedad mental muy grave y perjudicial, con alto índice de mortalidad en comparación con otras enfermedades mentales, para su correcta recuperación suele ser necesaria la ayuda de un médico especialista.
¿Qué tipos de bulimia existen?
La bulimia puede ser de dos tipos, de tipo purgativo, cuando la persona recurre al vomito o toma laxantes tras el atracón, y de tipo no purgativo, cuando compensa el exceso de calorías con una practica excesiva de ejercicio físico.
Diferencias entre bulimia y anorexia de tipo purgativo
En muchas ocasiones la gente confunde la bulimia con la anorexia de tipo purgativo. La diferencia entre ambas radica en que la persona anoréxica no se da atracones de forma continua, si no de manera puntual y de bajo nivel calórico, mientras que la persona bulímica, alterna épocas en las que ingiere poca cantidad de alimento, con épocas en las cuales se da atracones a menudo y de muy alto nivel calórico.
Como consecuencia a estos cambios en la alimentación tan frecuentes, la persona que padece bulimia cambia con mucha facilidad de peso, engordando en los momentos de atracón y adelgazando en los de poca ingesta o ayunas.
La bulimia se puede considerar un círculo vicioso, en el que la persona al ver que ha engordado deja de comer, hasta que su cuerpo le pide nutrientes que ingiere en forma de atracones, estos le hacen subir de peso y vuelta a empezar.
¿Quién puede padecer bulimia?
Las personas bulímicas suelen ser adolescentes, mayoritariamente mujeres, aunque también se puede dar dicha enfermedad en cualquier rango de edad y en ambos sexos. Por norma general son personas con un peso normal que no destacan por un físico demasiado delgado ni con sobrepeso.
¿Qué señales pueden ayudarnos a saber si alguien padece bulimia?
La bulimia es muy difícil de reconocer en comparación otros trastornos de la alimentación, por el hecho de que la persona miente y oculta todas las señales muy delicadamente; por ello es de vital importancia conocerlas y estar pendiente de ellas si se sospecha que alguien puede padecer la enfermedad:
- Atracones, vómitos o laxantes : La persona bulímica, como bien hemos dicho antes, sufre episodios en los que se da atracones de manera compulsiva, tras los cuales, se siente culpable, incapaz de controlar la situación y recurre al vomito o a la toma de laxantes. Para ocultarlo se suele ir al baño tras las comidas, encender el grifo para tapar el sonido del vomito, poner música, cerrar la puerta, etc.
- Cambios en los hábitos en cuanto a la alimentación : La persona alterna episodios de ayuno con episodios de atracones compulsivos; estos cambios pueden ocasionar que no se mantenga en un peso constante, si no que aumente o disminuya a menudo.
- Comportamiento obsesivo con la alimentación : La persona bulímica suele hablar muy a menudo de comida, leer sobre ella, buscar dietas o ejercicios quema grasas, preguntar a los demás que les parece su físico, etc.
- En los episodios de ayuno suele poner excusas para no comer, pedir que se le hagan comidas con bajo nivel calórico, evitar los hidratos de carbono, los dulces, los alimentos grasos e ingerir muy poca cantidad de comida al día.
- Durante los episodios de atracones, la persona suele esconderse para llevarlos a cabo o hacerlo en momentos en los que se encuentra a solas y sabe que va a poder realizar sin problema la purga de estos alimentos. Se esconde porque se siente avergonzada, con miedo de que la pillen, etc; suelen darse por la noche cuando las demás personas duermen o cuando se encuentra sola en casa.
- Cambios en los hábitos deportivos: Haciendo un uso abusivo de ellos con el fin de quemar las grasas y las calorías ingeridas en los atracones.
- Aislamiento social : La persona bulímica suele distanciarse poco a poco de sus seres queridos y evita situaciones sociales que le hagan mostrar su peso, su talla, etc; como por ejemplo: ir a al piscina, dejarse coger, ponerse ropa ajustada, etc.
¿Cuáles son los síntomas de la bulimia?
La bulimia puede llegar a causar síntomas tanto físicos como psicológicos, estos pueden variar dependiendo de la persona, de la gravedad de la enfermedad, del tipo de bulimia que se padece, etc. Algunos de los síntomas físicos que puede llegar a mostrar una persona bulímica son:
- Oscilaciones bruscas de peso como consecuencia de la alternación de atracones con episodios de ayunas.
- Alteraciones en el ciclo normal de la menstruación en las mujeres, llegando incluso a su perdida (amenorrea).
- Perdida del equilibrio, mareos e incluso desmayos: como consecuencia de la falta de nutrientes provocada por el vómito.
- Problemas dentales: El ácido del vomito puede ocasionar la perdida de esmalte y la aparición de caries en los dientes.
- Uñas quebradizas y agrietadas por el contacto con el ácido del vomito.
- Agotamiento y cansancio físico, dificultad para conciliar el sueño y disminución de la cantidad y calidad de este, llegando a padecer trastornos del sueño.
- Dolores de estómago y de cabeza provocados por la acción de vomitar, la presión que esto conlleva o el uso excesivo de laxantes.
- Heridas, rojeces o tonos amarillentos en los nudillos por recurrir al vómito.
- Estreñimiento por falta de líquidos, los cuales se expulsan al vomitar o con el uso de laxantes.
- Perdida del cabello por falta de nutrientes.
- En los peores casos puede provocar problemas cardiacos, tales como: arritmias, baja presión arterial, fallos en el correcto funcionamiento del corazón, o incluso la muerte.
- Una perdida muy acusada de peso puede ocasionar la perdida de calcio en los huesos y provocar osteoporosis.
- Ulceras en el estomago, en la boca o en el esófago por culpa del ácido del vomito.
Algunos de los síntomas psicológicos que puede llegar a mostrar una persona bulímica son:
- Miedo a comer en público.
- Irritabilidad.
- Problemas a la hora de concentrarse.
- Agotamiento y cansancio psicológico.
- Trastornos del sueño, como pueden ser el insomnio y la hipersomnia.
- Apatía y perdida del interés por mantener relaciones sociales o realizar actividades cotidianas y que causaban algún tipo de placer.
- Sentimientos de culpa y vergüenza respecto a su físico.
- Baja autoestima y perdida de la seguridad en sí mismo.
- Ansiedad o estrés frente la comida o las situaciones que conlleven comida.
- Perdida del control en el tema alimenticio.
- Pánico por engordar.