Lo más probable es que todos sepamos que la salud es lo más importante. Si gozamos de buena salud, seguramente podamos tener las fuerzas necesarias para conseguir aquello que tengamos en mente y nos propongamos. Sin embargo, cuando pensamos en la salud, usualmente suele ser la física y no tenemos tan presente la salud mental. Ésta es igual de importante que la física, puesto que si no contamos con una buena salud mental no podremos hacer frente a todo aquello que se nos ponga por delante.
Existen enfermedades mentales que podemos detectar con más o menos facilidad que otras. No obstante, la distimia sea quizás alguna de ellas que no conozcas todavía. Aunque no es tan popular es mucho más común de lo que podríamos pensar, por lo que es importante conocerla para saber si la estamos padeciendo o si alguien muy cercano a nosotros necesita de nuestra ayuda para poder sentirse mejor.
Descubre qué es la distimia y cómo identificarla para poder ayudarte a ti mismo o para hacer que la vida de la persona que conoces de la padece pueda mejorar de forma notable.
Este trastorno psicológico es muy parecido a la depresiónQué es la distimia
Este trastorno psicológico es muy parecido a la depresión, pero se diferencia de ella porque las personas que la padecen suelen tener este estado triste, apático y melancólico de manera crónica, por lo que no pasan por diferentes etapas en las que se encuentran más contentos y activos que en otras, por las cuales se muestran de un modo completamente contrario.
La distimia suele ser más común entre las mujeres que los hombres, pero afectándolos a ambos del mismo modo. Una vez se ha detectado la enfermedad por un médico psiquiatra es probable que le recete un tratamiento a base de pastillas. Éstas le ayudarán a sentirse con más ánimos para hacer frente a su día a día y sentirse mejor. Sin embargo, la persona que padece distimia probablemente tenga que tomar estas pastillas de manera crónica, puesto que la distimia si no es tratada adecuadamente puede convertirse en una depresión mayor, lo que necesitará más atención por parte de los médicos y de las personas que le quieren.
Cómo identificar la distimia
Existen diversos síntomas que se muestran en las personas que padecen esta dolencia. Como se cree que es crónica, nos podemos basar en los familiares de la persona afectada sabiendo si también han padecido distimia o depresión en el pasado. No obstante, este no tiene por qué ser un factor del todo determinante, puesto que existen muchos otros a tener en cuenta.
El que padece distimia es normal que se muestre apático, sin ganas de hacer cosas ni de emprender nuevos proyectos. Mostrará siempre una visión negativa de las cosas, sobre todo fomentada por su falta de autoestima. El hecho de que se quiera y se respete tan poco a sí mismo hará que no se socialice adecuadamente y que las relaciones con los demás le parezcan complicadas.
Aquellos que padecen distimia sentirán la necesidad de estar solos y creerán que no son lo suficientemente bueno para los demás o para cualquier situación a la que se enfrenten. Además, pueden tener trastornos alimentarios (comer en exceso o nada en absoluto), del sueño (durmiendo días enteros o con insomnio) o bien la incapacidad para concentrarse en la escuela o en el trabajo, haciendo que no pueda memorizar todo aquello que debía hacer con antelación.
Aquellos que padecen distimia sentirán la necesidad de estar solosEsta preocupación constante que persigue a las personas con distemia debe ser identificada y tratada lo antes posible, si no queremos que derive en una depresión mayor y necesite mucho más apoyo por parte de los profesionales de la salud para superarla.
Todos tenemos días malos, pero si conoces a alguien que muestre siempre estos síntomas es importante que le des a la salud mental la importancia que se merece y le animes a visitar a un psicólogo, quien después podrá derivarlo a un psiquiatra si es necesario. Este segundo podrá receptarle la medicación que necesita para aprender a vivir con la distemia o bien aconsejarle el mejor tratamiento para poder mejorar así su calidad de vida como se merece.
