A veces nos aparecen unas pequeñas rugosidades o ampollas rojas en la piel de cualquier parte del cuerpo o en la boca.
Si es un caso aislado podemos pensar que nos ha picado algún bicho, que nos hemos rascado con algo o que algún alimento nos ha dado una pequeña reacción alérgica.Sin embargo, la aparición de esta rojez y sus síntomas en nuestro cuerpo puede ser debida a otra causa más específica, con el diagnóstico de el liquen plano.
En Bekia te contamos qué es el liquen plano, cuáles son sus síntomas y su diagnóstico para que seas capaz de identificarlo y tratarlo adecuadamente.
Qué es y qué síntomas presenta el liquen plano
El liquen plano es una enfermedad inflamatoria que se presenta a modo de pequeñas marcas rojas en la piel, mucosas, cuero capilar o en las uñas.Se desconocen las causas por las cuales aparecen estas manchas, pero algunos estudios estiman que son las células del sistema inmunitario que atacan aquellas células de la epidermis (la piel) dejando estas manchas rojas con un pequeño relieve. Son llamadas liquen plano porque las marcas que aparecen en nuestra piel se parecen mucho a las que dejan los líquenes en los árboles, aunque la enfermedad no tenga nada que ver con los mismos.
Otro posible causante de esta enfermedad es el estrés. Las personas que se encuentran en una situación en la cual los nervios estén presentes constantemente, tienden a desarrollar liquen plano. Se ha demostrado que cuando este periodo termina y están más tranquilos desaparecen las manchas.
Si nos aparecen este tipo de manchas en la piel, uñas, cuero cabelludo o mucosas (boca u órganos genitales) debemos acudir al médico lo antes posible, ya que el liquen plano en el interior de la boca si no está controlado debidamente podría llegar a causar enfermedades mucho más graves.
Cómo tratar el liquen plano
El médico determinará si tenemos liquen plano una vez haya examinado las manchas que nos han aparecido en cualquier parte de nuestro cuerpo. Una vez realizado el examen, seguramente te preguntará si te duelen o pican. En el caso del liquen plano no deberían hacerlo. Solamente son vistosas y pueden tener malos efectos para la salud si no se tratan, pero a parte de esto no causan malestar repentino ni extremadamente molesto.
Una vez detectada la mancha lo más probable es que pida hacer una biopsia para estudiar el tejido y reafirmar el diagnóstico, aunque los dermatólogos suelen saber cuándo se trata de un caso de liquen plano con sólo ver y palpar la mancha. Si la biopsia ha dado positivo seguramente se pida un análisis de sangre para comprobar si el paciente podría estar sufriendo alguna enfermedad que causase estas mismas reacciones en la piel, como la hepatitis C o medicamentos que no le sean adecuados.
Cuando el liquen plano se encuentra sobre nuestro cuero cabelludo es normal que perdamos cabello y si no nos ponemos en tratamiento lo antes posible, quizás no lo volvamos a recuperar. Algo parecido sucede con las uñas afectadas. El liquen plano se sitúa sobre el nacimiento de la misma y si no se trata a tiempo podría no volver a regenerarse la uña para acabar perdiéndola totalmente.
Así pues, es muy importante seguir el tratamiento médico. Dependiendo de lo extendida que esté la enfermedad y de cada caso en concreto, el dermatólogo nos dará un tratamiento u otro. Los más comunes son la aplicación de cremas con corticoides sobre las manchas rojas, pero en los casos en los cuales producen escozor o picor se recomienda también tomar antihistamínicos orales. Los corticoides se tomarán oralmente siempre que el tratamiento tópico no haya solucionado los problemas en la piel y las molestias persistan. En los casos más graves se pide también tomar vitamina A, cubrir las manchas con compresas, inyecciones de corticoides, sesiones de rayos solares para fortalecer la piel y medicamentos para calmar el sistema inmunitario en los casos más complicados.
El proceso de cura de esta enfermedad es relativamente largo, pero no debemos dejar de tomar las medicinas ni acudir a nuestro médico, ya que si no lo tratamos a tiempo puede tener consecuencias muy negativas para nuestro organismo. Asimismo, es una enfermedad crónica por lo que una vez curada puede volver a reaparecer. Simplemente debemos tener paciencia y seguir los consejos de nuestro dermatólogo para poder llevar una vida normal y feliz.