La parotiditis (paperas) es una infección vírica que se contagia fácilmente y que causa un agrandamiento con dolor de las glándulas salivales. Las paperas son una infección viral que no responde a ningún tratamiento antiviral específico. La infección generalmente mejora por sí sola, aunque, a veces, pueden ocurrir complicaciones y se requiere atención médica inmediata.
Durante el tiempo que dura la infección se pueden usar diferentes tratamientos médicos para disminuir los síntomas de las paperas y que no se sufra tanto (en el caso de paperas leves). Si se tiene una infección grave de paperas o si existen complicaciones, es probable que se necesite un tratamiento médico.
Remedios caseros
Si tienes paperas (o un niño las tiene) no es necesario que te mantengan hospitalizado. La recuperación se realiza en el hogar y no suele haber más complicaciones. Durante la enfermedad y la recuperación hay que. Tener algunas cosas en cuenta para sentir mayor comodidad durante el transcurso de la infección. Lo más importante es:
La infección puede hacer que quien la padezca se sienta cansado y agotado- Descansar. La infección puede hacer que quien la padezca se sienta cansado y agotado. Es mejor descansar durante el tiempo de la infección.
- Líquidos. Las paperas pueden deshidratarte por eso deberás comer y beber aunque no tengas ganas de hacerlo. Si no quieres comer puedes ingerir pocos alimentos, pero es importante que tomes líquidos aunque sean en pequeñas cantidades y con frecuencia. Así te mantendrás hidratado sin tener que beber grandes cantidades de agua en una sentada.
- Comodidad en la cara y en el cuelo. Cuando las glándulas están inflamadas, es posible que sientas algo de dolor o molestia en la parte inferior de la cara y el cuello. Aplicar mantas suaves y evitar la presión en las áreas hinchadas puede ayudar a mantener tu comodidad.
- Compresas frías para el dolor. Si sientes alivio de dolores musculares o glándulas inflamadas al aplicar algo frío en el área, puedes considerar adquirir una compresa fría y aplicarla en las áreas doloridas y sensibles alrededor de los músculos o alrededor de las glándulas inflamadas.
- Mantas tibias. Si el frío no funciona para ti puedes probar mantas o compresas calientes o tibias. Cuando se tiene una infección de paperas puedes sentir frío o más comodidad si mantienes tu cuerpo cálido.
- Cuidado con el contagio. Debes tener cuidado para no contagiar a los demás. Puede ser contagioso incluso antes de que aparezcan los primeros síntomas. Pero si sabes que tienes la infección, tendrás que evitar el contacto cercano con otras personas. No compartas utensilios o artículos que puedan transmitir el virus. Esto es especialmente importante si estás cerca de bebés o niños pequeños (sobretodo si no están vacunados) o si estás cerca de personas que tienen un sistema inmunológico débil, aunque haya sido vacunada.
Algunos medicamentos pueden irte bien
La mayoría de los síntomas de las paperas se pueden controlar con medicamentos de venta libre para el dolor y la fiebre.
La mayoría de los síntomas de las paperas se pueden controlar con medicamentos de venta libre para el dolor y la fiebre- Para la fiebre: existen varios medicamentos de venta libre no esteroideos que pueden reducir la fiebre, incluidos el paracetamol, el naproxeno y el ibuprofeno. Habla con tu médico para saber cuál de ellos puede irte mejor o sigue las instrucciones correctamente.
- Para el dolor: varios de los medicamentos que reducen la fiebre también son efectivos para reducir el dolor. Puedes usar analgésicos de venta libre si tienes dolor muscular o dolor de las glándulas parótidas inflamadas.
Si existen complicaciones el médico deberá valorar cómo actuar convenientemente en cada caso concreto.
No hay medicamentos específicos para las paperas, pero sí hay vacuna
No hay medicamentos recetados que puedan tratar específicamente las paperas cuando se enferma con la infección. Sin embargo, la infección de las paperas se puede prevenir con una vacuna.
La vacuna administrada para las paperas es una vacuna de virus vivo, lo que significa que estimula la inmunidad cuando el virus debilitado se inyecta en el cuerpo. El programa estándar recomendado para la vacuna contra las paperas es dos veces durante los primeros años de vida, la primera vez entre los 12 y los 15 meses y la segunda entre los 4 y los 6 años.
La vacuna contra las paperas generalmente se administra como parte de la vacuna que incluye el sarampión, las paperas y la rubéola. Proporciona entre el 88 y el 93% de inmunidad en niños sanos.
