Son muchas las formas que se conocen para mantenerse saludable, es posible que tú sepas lo más básico: evitar el contacto con los virus. Pero también existen otras formas prácticas de evitar infecciones que no solo se reducen a vacunarse o tomar antibióticos.
Quizá te hayas vuelto algo aprehensivo a causa de las noticias de personas que contraen infecciones de forma fácil. Solo tendrás que hacer algunos cambios en tu comportamiento diario para prevenir fácilmente la propagación de muchas enfermedades infecciosas. A partir de ahora sabrás cómo reducir el riesgo de infecciones.
Lávate las manos
Las manos son portadoras de multitud de gérmenes y bacterias que pueden infectarte. Los microbios pueden vivir en superficies inertes desde unos pocos minutos hasta varios meses. Hay enfermedades que se propagan tocando objetos que otra persona infectada tocó anteriormente.
La gran mayoría de las personas no conocen la mejor manera de lavarse las manos de manera efectiva. Para que el lavado de manos sea correcto, tendrás que lavarte de forma minuciosa con agua y jabón durante 20 segundos como mínimo. Después tendrás que secarte las manos con una toalla de papel. Si no hay agua y jabón puedes limpiar us manos con gel desinfectante o una toallita a base de alcohol.
No compartas objetos personales
Está prohibido que compartas cosas como: cepillos de dietas, toallas, cuchillas de afeitar, pañuelos o cortaúñas porque pueden ser fuentes de propagación de infecciones a causa de que pueden tener bacterias, virus y hongos.
Tapa tu boca cuando tosas o estornudes
Una buena higiene personal incluye que cuando tosas te tapes la boca, y también lo hagas cuando estornudas. En la mayoría de infecciones, el microbio que causa la enfermedad crece y se divide mucho antes de que tengas síntomas por lo que se contagia antes de que sepas que estás enfermo.
La tos o los estornudos pueden diseminar estos gérmenes a través de gotas microscópicas en el aire. La recomendación actual es cubrirse la boca con el brazo, la manga o el pliegue del codo, en lugar de usar las manos.
Las vacunas tenlas en orden
Tu sistema inmune tiene memoria de las infecciones que has tenido previamente. Cuando tu cuerpo se encuentra con un microbio que previamente causó una infección, mejora su producción de glóbulos blancos y anticuerpos para prevenir infecciones por segunda vez.
Sin embargo, al vacunarse, "engañas" a tu cuerpo para que piense que ha sido infectado por un microbio en particular, por lo tanto, mejora sus propias defensas contra infecciones posteriores. Obtener las inmunizaciones que necesitas te protegerá tanto a ti como a las personas que te rodean.
Mantén sexo seguro
Las enfermedades de transmisión sexual son las enfermedades infecciosas que más fácilmente se pueden evitar si se es consciente de ellas. Es necesario que seas inteligentes y mantengas sexo seguro utilizando preservativos para evitar que te contagias de bacterias infecciosas o virus de una persona a otra. También evitarás embarazos no deseados.
No te metas los dedos en la nariz
Meterse los dedos en la nariz está feo, pero es que además puedes propagar infecciones de esta manera. Son muchos los microbios que disfrutan de la vida dentro del ambiente húmedo y cálido de la nariz. Si no tocas tu nariz evitarás propagar infecciones a otros.
Si tienes una sistema inmune debilitado
Para las personas que reciben quimioterapia o tienen un sistema inmune débil, necesitan protegerse aún más de las amenazas microscópicas. Las bacterias que no causan infecciones en personas con sistemas inmunológicos sanos pueden convertirse en un problema (infecciones oportunistas) y estas personas también pueden volverse mucho más enfermas cuando se exponen a infecciones. Por eso, estas personas deberán extremar las precauciones y la higiene propia y con los demás para evitar enfermar y que la infección complique su estado de salud o incluso, ponga en peligro su vida.