No todas las personas que consiguen superar el Covid, se recuperan por completo, ya que siguen teniendo una serie de secuelas o síntomas que pueden llegar a ser invalidantes. Es lo que se conoce como Covid persistente y hace referencia a una serie de síntomas leves que pueden afectar de una manera negativa a la calidad de vida de la persona.
Estos síntomas pueden ser muy variados y consistir en dolor de cabeza, falta de energía o la pérdida del olfato. Una característica típica de este tipo de Covid es que suele fluctuar, es decir que la persona puede estar perfectamente unos días y al siguiente sentirme mal debido a las secuelas que ha arrastrado por el Covid. En el siguiente artículo te hablamos un poco más de ese desconocido que es el Covid persistente y que se puede hacer al respecto.
Factores de riesgo del Covid persistente
Se ha podido constatar a través de diversos estudios, que hay una serie de factores de riesgo que pueden causar que una persona que ha superado la enfermedad, pueda llegar a padecer el llamado Covid persistente:
- Ser joven y mujer.
- Tener una edad superior a los 70 años.
- Sufrir patologías respiratorias anteriores al contagio como es el caso del asma.
- Tener más kilos de más y padecer sobrepeso.
- Padecer varios síntomas mientras se está contagiado por Covid.
Todos estos son factores que influyen de una manera directa a la hora de poder contraer una enfermedad como el Covid persistente.
Cuándo se considera que la persona sufre Covid persistente
En la gran mayoría de los casos de Covid persistente, la enfermedad inicial se presenta como una gripe y la persona contagiada sufre síntomas como es la fiebre alta, dolores musculares o cansancio. Si se supera el Covid pero los síntomas continúan durante más de seis meses, se considera que la persona sufre Covid persistente. Hay casos en las que tales secuelas se pueden prolongar en el tiempo, pero terminan por desaparecer antes de los seis meses de rigor.
¿Se puede tratar el Covid persistente?
Hay que indicar que por desgracia a día de hoy, no existe un tratamiento que ponga fin a este problema y terminar con tales secuelas. Si los síntomas son leves, se aconseja tomar analgésicos para mejorar tales síntomas pero los mismos no desaparecen. Ayudan a la persona a sentirse mejor pero al cabo de los días, suelen manifestarse de nuevo. Para los primeros días, no existen tratamientos antivirales que puedan frenar tal enfermedad.
Ello como es de esperar, termina por afectar a la calidad de vida de la propia persona. Síntomas como dolores de cabeza o la pérdida de olfato pueden llegar a ser invalidantes para la persona que los padece. Ante la falta de información y de resultados, los afectados por el Covid persistente han creado una plataforma para expresar sus dudas y problemas. A día de hoy se sigue investigando para dar con un buen tratamiento que evite que las secuelas prosigan y terminen por desaparecer para siempre.
En definitiva, no es nada fácil el tener que soportar una serie de síntomas en el día a día, sobre todo tras haber superado el Covid. Como ya te hemos dicho antes, en la gran mayoría de los casos, tales síntomas no son graves y no ponen en riesgo la vida de la paciente. Sin embargo y aunque son leves, pueden llegar a ser invalidantes para la persona que los padece.
El sentirse falto de energía o cansado todo el día o sufrir continuos dolores de cabeza hace que la persona no rinda como quisiera en el trabajo o repercuta de manera negativa en el ámbito familiar. A pesar de ser una afección desconocida para gran parte de la sociedad, son muchas las personas las que la sufren, esperando la llegada del ansiado tratamiento.