Las medicinas nos ayudan a recuperarnos de posibles dolencias ante alguna enfermedad, pero es de vital importancia que hagamos un uso correcto y estemos pendientes de posibles alergias o efectos secundarios. Asimismo, automedicarse puede acarrear serias consecuencias como tomar un medicamento el cual nos produzca una alergia y agravar la enfermedad. No obstante, el hecho de tomar cualquier medicamento sin prescripción médica puede ser un grave riesgo para nuestra salud, por consiguiente debemos ser responsables con este tipo de cosas.
¿Qué es una alergia a los medicamentos?
Cuando tomamos un fármaco y nuestro organismo no tiene una respuesta correcta se produce una reacción inmunológica que no nos esperamos y por lo tanto se vuelve peligroso para nuestra salud y nuestro propio organismo. Hay que tener en cuenta que para llamarlo alergia debe ser mediante mecanismos inmunológicos. Si es debido a otro tipo de mecanismo no se llama alergia como tal independientemente de que los síntomas sean los mismos.
Debido a los componentes de algunas medicinas unas son más propensas a dar alergia que otras. Dentro del grupo de los medicamentos más comunes que dan alergia podemos encontrar: la penicilina, la insulina, las sulfamidas, los anticonvulsivos, antibióticos de cualquier tipo, los medios de contraste utilizados en rayos X. Es recomendable siempre leer las instrucciones del prospecto para saber cuales pueden ser los efectos secundarios y cómo actuar.
diferentes: leve, moderada o grave
Tipos de alergias
Cuando sufrimos algún tipo de alergia las podemos catalogar en tres grupos diferentes: leve, moderada o grave. Algunos de los síntomas leves son la urticaria en la piel o algún tipo de ronchas. Si desaparece una vez que abandonamos el medicamento pertenece a este grupo, pero si no es así se puede decir que es un efecto secundario moderado. El picazón es otro de los síntomas leves que podemos sentir una vez el medicamento nos da alergia. Puede ser en cualquier parte del cuerpo y en la zona de los ojos. También nos pueden molestar ciertas erupciones cutáneas.
Si el medicamento nos ha hecho más daño del que creíamos en el organismo pertenece a los síntomas moderados entre los que se encuentran; las sibilancias, periodos de fiebre, diarrea, confusión, hinchazón en la zona de los labios, lengua y en la zona del rostro. Siempre que hay fiebre indica que algo no está del todo correcto por lo que debemos prestar atención y acudir a un especialista para que nos haga un chequeo y poner una solución lo más pronto posible.
Si sentimos un dolor fuerte en la zona del abdomen, nos encontramos en un estado de confusión y desmayo, fiebre, dificultades para poder respirar bien, mareos, palpitaciones o pulso rapido estamos sufriendo una fuerte reacción alergica al medicamento que estamos tomando. De sentir cualquier de estos síntomas, de inmediato debemos acudir al hospital o centro de salud más cercano.
No obstante hay que tener en cuenta cual es el tipo de reacción alérgica más grave que sería la anafilaxia. Cuando esto ocurre notamos una sensación de calor intenso, picor en el cuerpo, enrojecimiento, aparición de ronchas, inflamación de la garganta, asma, bajada de la presión arterial incluso la pérdida de la conciencia. Es fundamental que cada vez que vayamos al medico y nos recete un medicamento estar atentos por si hemos sufrido alergias anteriormente así podemos evitar cualquier tipo de susto.
Las reacciones alérgicas no siempre afectan a la piel, aunque este tipo de afección son las más fáciles de reconocer a simple vista. Un medicamento puede dar alergia a cualquier edad, incluso puede aparecer en cualquier momento, es bastante impredecible. No hay una relación clara en cuanto a porque unos medicamentos dan más alergia que otros. Los antibióticos betalactámicos, la alergia se debe a su estructura química y las modificaciones que tiene que hacer nuestro organismo para que el medicamento haga efecto.
En ocasiones es complicado dar con un diagnostico claro debido a la falta de técnicas diagnósticas que ayuden a corroborar que es una reacción alérgica. Gracias al historial médico se pueden llegar a conclusiones de una manera más optima y rápida. Gracias a un análisis de sangre podemos llegar al origen de todo. Si el resultado da negativo todo estará bien y si es positivo es que la persona has sufrido una reacción alérgica. Los síntomas en cada persona puede variar, incluso aunque no aparezcan marcas cutáneas se puede estar sufriendo una reacción alérgica a dicho medicamento.
Otras curiosidades
Algunas de las preguntas que ya han sido resueltas es la de si la alergia a los medicamentos puede ser hereditaria. La respuesta es negativa, siendo posible heredar algún tipo de alergia más general, pero no con los medicamentos. Otra de las dudas cuando se toma un medicamento es si la alergia puede aparecer desde la primera ingesta. Esto no es posible hasta que hayamos tomado el medicamento en más ocasiones. Es diferente a cuando se padece algún tipo de intolerancia, que en tal caso aparence de inmediato.