Si se presenta la osteoporosis en tu vida es probable que empieces a notar que tienes los huesos frágiles o delgados, puesto que esta es una condición de esta enfermedad. Tener los huesos de esta manera aumenta las probabilidades de que se produzca una factura de hueso o una ruptura. Además, se considera una enfermedad silenciosa porque no hay síntomas reveladores hasta que el hueso se rompe.
Hay personas con osteoporosis que empiezan a perder altura, cambian su postura al caminar y suelen tener dolores de espaldas fuertes y repentinos. A continuación conoce algunos de los síntomas que destacan para saber que existe osteoporosis.
A pesar de que los huesos son por lo general fuertes, se componen de tejido vivo que continuamente se descompone y se reconstruyeLa osteoporosis
A pesar de que los huesos son por lo general fuertes, se componen de tejido vivo que continuamente se descompone y se reconstruye. A medida que se envejece, es posible que el hueso viejo se descomponga más rápido que la construcción del hueso nuevo. Esto puede hacer que los huesos tengan pequeños poros o agujeros y que se vuelvan más frágiles.
En las etapas más avanzadas de la enfermedad se pueden presentar más síntomas. El tratamiento de la osteoporosis en sus primeras etapas es la mejor manera de prevenir algunas de las consecuencias más graves, como la pérdida de altura del hueso o las roturas. Es importante conocer los síntomas y los factores de riesgo para que puedas tomar las medidas adecuadas y mantener unos huesos fuertes.
A pesar de que los huesos son por lo general muy fuerte, que se componen de tejido vivo que continuamente descompone y reconstruye. A medida que envejece, es posible que el hueso viejo se descomponga más rápido que la construcción de hueso nuevo. Esto hace que sus huesos tienen madrigueras y se vuelven más frágiles.
Los síntomas tempranos de la osteoporosis
Existen algunos síntomas detectables de pérdida ósea pero que pueden ser raros por ser poco comunes pero que es necesario tener en cuenta. Las personas en muchas ocasiones no saben que tienen los huesos débiles hasta que no se rompen alguno de ellos, como la cadera, la columna vertebral o la muñeca. Algunas de las señales y síntomas que pueden hacerte saber que quizá estás padeciendo osteoporosis o una pérdida ósea:
- Retracción de las encías. Las encías pueden retroceder si tu mandíbula está perdiendo hueso. Puedes preguntar al dentista por la detección de pérdida ósea en la mandíbula.
- Tienes menos fuerza. Existen estudios de mujeres que pierden fuerza en las manos y de agarre.
- Uñas quebradizas y débiles. La fuerza de las uñas también puede ser una señal de salud ósea. También se deberán tener en cuenta otros factores externos como si se realiza natación, jardinería u otros ejercicios.
Además de los cambios en la densidad ósea, la osteoporosis no suele causar muchos daños en los síntomas iniciales. Es necesario detectarlo en las primeras etapas y acudir al médico, sobre todo si tienes antecedentes familiares.
Las personas en muchas ocasiones no saben que tienen los huesos débiles hasta que no se rompen alguno de ellosSíntomas de osteoporosis en fases más avanzadas
Cuando el hueso se ha deteriorado significativamente, las personas pueden comenzar a experimentar síntomas más evidentes, como por ejemplo:
- La pérdida de altura. Las fracturas en la columna vertebral pueden causar pérdida de altura, es uno de los síntomas más notables.
- Fracturas de hueso por caídas simples. Una fractura es una de las señales más comunes de la fragilidad de los huesos. Las fracturas pueden ocurrir con una caída o movimiento menor, como por ejemplo pisar un bordillo. Algunas de las fracturas de la osteoporosis pueden ser provocadas incluso por un estornudo fuerte.
- Dolores de espalda o cuello. La osteoporosis puede causar fracturas por comprensión de la columna vertebral. Estas fracturas pueden ser muy dolorosas. Los síntomas de dolor pueden variar de leves a debilitantes.
- Postura encorvada. La compresión de las vértebras también puede causar una ligera curvatura de la parte superior de la espalda. Una espalda encorvada se conoce como cifosis, o más comúnmente: la joroba. La cifosis puede causar dolor de espalda y cuello e incluso afectar la respiración debido a la presión adicional en las vías respiratorias y la limitada expansión de los pulmones.
