La piel atópica es un tipo de piel mucho más delicada y sensible que la normal y que requiere una serie de cuidados específicos para mantenerla en perfecto estado. Los agentes externos influyen mucho en la piel atópica por lo que en los meses de verano, hay que extremar tales cuidados. En el siguiente artículo te contamos como debes cuidar una piel atópica durante el verano, para que las altas temperaturas no la empeoren.
Elementos del verano que perjudican la piel atópica
Es verdad que la piel atópica sufre más en los meses de invierno que en los de verano, sin embargo hay una serie de factores o elementos propios del calor que pueden hacer empeorar a la piel atópica:
- Un exceso en el uso del aire acondicionado puede provocar que la piel atópica se reseque más de la cuenta. En tal caso, es bueno y aconsejable el mantener un ambiente húmedo.
- El sudor propio de las altas temperaturas es otro de los factores que influyen de una manera negativa en el buen estado de la piel atópica. Se aconseja el evitar salir a la calle durante las horas de más calor del día y llevar una ropa que ayude a que la piel transpire sin problema alguno.
- El cloro que está presente en el agua de las piscinas es otro factor bastante perjudicial para las pieles atópicas. Dicha sustancia provoca que la piel se reseque más de la cuenta y además se irrite en exceso. En el caso de bañarse en la piscina, es aconsejable el quitarse todo el cloro posible gracias a una buena ducha.
- Si la persona en cuestión sufre de piel atópica es importante que no use en exceso productos cosméticos, en especial durante el verano. Es recomendable el optar por productos que hayan sido elaborados de una manera específica para pieles atópicas.
Cómo cuidar la piel atópica durante el verano
A la hora de cuidar la piel atópica en los meses de verano se aconseja el seguir las siguientes pautas:
- Es importante el seguir una buena higiene que permita cuidar la piel atópica. Para ello es importante el usar limpiadores sin nada de jabón y que contengan sustancias relajantes para la propia piel.
- Después de la ducha es aconsejable el usar cremas hidratantes específicas para las pieles atópicas. Con ello se intenta combatir el hecho de que la piel esté demasiado reseca.
- Si la piel atópica está muy irritada, lo mejor que puedes hacer es aplicar cremas que ayuden a calmar y a reparar la misma. En el caso de que la piel te pique en exceso, se puede aplicar un poco de agua termal que ayude a aliviar los citados picores.
Otros consejos para cuidar las pieles atópicas
Además de los meses de verano, es bueno el cuidar durante el resto del año este tipo de pieles:
- A la hora de la ducha hay que evitar el uso de las esponjas ya que de lo contrario, es posible que se irrite más de la cuenta.
- Es mucho mejor el darse una ducha que el bañarse.
- La temperatura ideal del agua debe ser de unos 33 grados más o menos.
- Es aconsejable el no frotar la piel. Lo ideal es secarse de una manera suave con la ayuda de una toalla.
- No hay que olvidar el hidratar la piel después de darse una ducha.
- En muchas ocasiones, la piel sufre una infección a raíz de rascarse. En tal caso es importante el tener unas uñas cortas y perfectamente limpias.
En definitiva, la piel atópica requiere mucho más cuidados que la piel normal. Con la llegada del verano y del calor es importante el extremar la precaución y evitar que el estado de la misma empeore notablemente.