Existen algunas cosas que debes comentarle a tu médico sobre el sexo que aunque te dé vergüenza debes hacerlo. En ocasiones, hay cosas que te suceden que pueden ser causadas por afecciones más graves que necesitan tratamiento y por eso, tu médico debe estar al tanto de ello. En general, tu médico debería saber cualquier cosa fuera de lo normal que te ocurra en tu salud, pero en cuanto al sexo, hay algunas cosas importantes que no debes guardarte para ti. Algunas de estas cosas que debes decirle en cuanto al sexo son las que leerás a continuación.
Tienes una infección de transmisión sexual en el pasado
Si tuviste en el pasado una infección de transmisión sexual (ITS) o una enfermedad de transmisión sexual (ETS) en el pasado, aunque fuese tratada exitosamente con antibióticos, quizá pienses que no es importante que lo sepa tu médico. Pero sí que lo es, sobre todo si quieres quedarte embarazada.
Aunque es cierto que los antibióticos pueden tratar una infección, las ITS o ETS a menudo pueden causar cicatrización en los órganos reproductivos. Los antibióticos no eliminan ni curan las adherencias que quedan. Las trompas de Falopio bloqueadas pueden causar infertilidad. Es posible que no experimentes síntomas además de no poder concebir, pero no asumas que la falta de síntomas o la falta de molestias en la zona pélvica significa que todo esté bien.
Tienes un olor vaginal extraño
Tanto si practicas sexo como si no lo practicas, si tienes un olor vaginal inusual es porque algo no marcha bien. Los olores corporales se atribuyen generalmente a una mala higiene. Existen jabones y desodorantes para estos problemas, pero si notas que tienes un olor vaginal demasiado extraño o fuerte, no lo cubras con desodorantes femeninos.
El olor vaginal anormal puede indicar una infección. La vaginosis bacteriana puede conducir a malos olores vaginales. Durante el embarazo, la vaginosis bacteriana puede aumentar tu riesgo de parto prematuro. La vaginosis bacteriana también puede hacerte más susceptible a contraer una infección de transmisión sexual. La vaginosis bacteriana no tratada está asociada con la enfermedad inflamatoria pélvica, que puede causar infertilidad. Estos motivos son más que suficientes para que le expliques a tu ginecólogo qué es lo que te ocurre con el olor vaginal.
Además, es mejor que nunca hagas duchas vaginales porque pueden causar irritaciones e infecciones. Las duchas vaginales elimina el moco vaginal sano que naturalmente mantiene la vagina limpia y libre de bacterias malas. La vagina se limpia sola, no es necesario limpiarla de ningún modo. En cualquier caso, si tienes olores anormales en la vagina , debes acudir a tu médico y consultarle lo que te ocurre.
No tienes ganas de sexo
Si no tienes ganas de tener relaciones sexuales parece que sea algo que debes comentarle a tu psicólogo y no tanto a tu ginecólogo. La falta de deseo sexual puede ser una señal de un problema médico. El deseo sexual está arraigado en la bioquímica del cuerpo. Cuando te acercas a la ovulación, es tu momento más fértil, aumentan las hormonas relacionadas con el deseo sexual.
Esta es la forma en que la naturaleza se asegura de que los humanos tengan relaciones sexuales en el mejor momento para hacer bebés . Si no estás experimentando este aumento en el deseo sexual, podría indicar un desequilibrio hormonal. Por eso, se lo tendrás que decir a tu médico.
Mantienes relaciones sexuales inseguras
Puede parecer una confesión el hecho de decirle a tu médico que estás practicando sexo inseguro, pero en realidad no es algo bueno para ti y tu médico no te va a juzgar. Tu médico está a tu lado para ayudarte.
Tu médico debe saber si tienes relaciones sexuales son protección, sobre todo si no estás en una relación monógama. Las infecciones de transmisión sexual pueden ocurrirte con tan solo una vez que tengas sexo inseguro. Cualquier persona puede contraer una ITS o ETS.
El sexo inseguro también es una causa común de infertilidad prevenible. Cuanto más tiempo permanezcas. sin tratamiento, más daño pueden causar a tu sistema reproductivo. Algunas ITS o ETS puede que no tengan síntomas y que las estés padeciendo. Si has tenido relaciones sexuales sin protección y te preocupa que tu pareja haya tenido otras relaciones sexuales sin protección, tendrás que realizarte una prueba de detección de ETS. No hace falta que le cuentes tu vida, simplemente solicitar las pruebas.