Cuando nos referimos a la dermatoscopia digital hablamos de una prueba que forma parte del día a día de cualquier dermatólogo. Consiste en una prueba que amplía la superficie cutánea de tal manera que el médico especialista puede verla perfectamente y, así, analizar las posibles lesiones. A través de esta prueba se pueden apreciar de una manera mucho más clara y cercana las zonas que se quieren analizar. Además, no supone ninguna molestia para la persona que se somete a la prueba.
Un aspecto importante a tener en cuenta antes de ir al dermatólogo y que nos haga una dermatoscopia digital de la mejor manera, es que nos va a pedir que nos desnudemos por completo. Con esto buscará tener acceso a todas aquellas zonas donde pueda haber una parte de la piel que se quiera analizar. No habrá que tener pudor, ya que solo se trata de una forma de facilitar el trabajo al médico y que no quede nada sin analizar.
La dermatoscopia digital se utiliza para examinar lunares, entre otras cosasPasos previos a una dermatoscopia digital
Antes de acudir al dermatólogo y pedir que nos haga una dermatoscopia digital, deberemos esperar a que él decida que es la prueba que tiene que hacer y, además, saber en qué situaciones se lleva a cabo. Depende lo que el médico especialista quiera analizarnos, bastará con una dermatoscopia manual o será necesario recurrir a la digital. Todo dependerá, por ejemplo del número de lunares que tengamos en nuestro cuerpo, ya que se buscará aligerar la prueba.
Se suele recurrir a esta prueba cuando el paciente cumple unas determinadas características. En primer lugar, como ya hemos dicho, cuando la presencia de lunares en su cuerpo es notable. Los antecedentes de melanoma tanto en la familia como en la propia persona también hacen al dermatólogo tomar la decisión de llevar a cabo esta prueba. Los efectos del sol también pueden determinar si se lleva a cabo o no la dermatoscopia digital. Las pieles más sensibles o aquellas que han sufrido lesiones solares deberán ser analizadas a través de esta técnica.
Una vez que ya tenemos claro en qué casos se realiza esta prueba, hay que saber cómo prepararse para ella. En este caso, no requiere de ninguna preparación previa. No será necesario comunicar al médico especialista que se siguiendo alguna medicación concreta o si se está o no en ayunas. Bastará con ir al médico con una ropa lo suficientemente cómoda para poder quitárnosla a la hora de ponernos en posición para que nos examinen los lunares.
Cómo se realiza una dermatoscopia digital
Antes de la prueba en sí, el médico te hará una serie de preguntas para tener en cuenta en qué situación se encuentra tu piel. En este momento tendrás que explicar si hay algún tipo de antecedente de melanoma en tu familia o tu propio caso o si, en algún momento, has tenido algún tipo de quemadura solar que sea necesario destacar por su relevancia.
El dermatólogo usará esta técnica para examinarnos si tenemos una lesión solarUna vez que el dermatólogo ya tiene los datos, tocará pasar a examinarte. En primer lugar, el médico especialista mirará a ver cómo eres y establecerá tu fototipo. A continuación, tocará examinar tu piel, para ello, te pedirá que te desvistas para comprobar dónde tienes lunares para, después, dejarte cubrir aquellas zonas donde ha visto que no tienes y que te gustaría cubrir. Normalmente, suele hacerlo cuando no hay ningún lunar en los genitales. Hecho esto, tocará hacer fotos de todo el cuerpo para tener controlados los lunares y ver si ha aparecido o desaparecido alguno. Estas imágenes son confidenciales y el paciente podrá solicitar que se destruyan cuando quiera.
Por último, acerando la cámara a cada lunar, se tomará una imagen digital de cada uno de ellos. Mientras el dermatólogo va haciendo las fotos, puede ir viendo si hay algún tipo de melanoma presente en la piel del paciente. Además, en el caso de que no sea la primera vez que éste acude a su consulta, podrá ver cómo estaba ese lunar en otras ocasiones para poder comparar.
Con esto, la prueba ya estaría terminada y, en caso de que haya que tomar alguna decisión porque se ha visto algo destacado, será el dermatólogo el que lo diga en ese mismo momento o cuando haya analizado correctamente las fotos. Es una prueba muy sencilla y completamente indolora que puede proporcionar gran información sobre nuestros lunares y, así, prevenir posibles melanomas o pillarlos a tiempo.
