¿Por qué se produce el desgarro muscular?

En la actualidad, son muchas las personas que sufren o alguna vez han sufrido un desgarro muscular. Este se refiere a la distensión o rotura de algún músculo del cuerpo o tendón. El motivo principal por el cual tiene lugar este desgarro es por un exagerado y repetitivo estiramiento o contracción del músculo o tendón. Por lo tanto, se puede afirmar que suele darse con mayor frecuencia en quienes suelen estar sometidos a esfuerzos o actividades físicas de manera constante. Por ejemplo, quienes van al gimnasio y soportan mucho peso en los ejercicios que realizan.

Aun así, son más las causas por las que pueden producirse y estas serán vistas posteriormente ya que antes es importante conocer los tipos de desgarro muscular que pueden darse y saber que en caso de sufrir uno, habrá que aplazar la práctica de ejercicio por un tiempo y tratar de forma adecuada este desgarro con el fin de que lleve a cabo una correcta curación y no se agrave en el tiempo. De igual manera, es fundamental recurrir a un especialista que pueda ayudar a la pronta recuperación de cualquier persona y de su tejido, que ha sido dañado.

Son muchas las personas que sufren o alguna vez han sufrido un desgarro muscular

Como se ha comentado previamente, existen varios tipos de desgarros que pueden diferenciarse según el nivel de gravedad de los mismos:

1. Primera grado: Lesiones de menor nivel en algunas fibras musculares
2. Segundo grado: Desgarro parcial de los tejidos musculares
3. Tercer grado: En este caso, el desgarro que se produce es total.

Por otro lado, es importante tener en cuenta que el desgarro muscular puede producirse en distintas zonas del cuerpo y por lo general, se da en aquellas que más se ejercitan. Estas podrían ser la zona de las pantorrillas, de los muslos o del pecho, ya que suelen ser las que más se trabajan en la actividad física y más peso soportan. Aun así, otros lugares del cuerpo también son hoy en día foco de multitud de desgarros musculares.

Síntomas y causas del desgarro

Antes de explicar los motivos más frecuentes que hacen que las personas sufran desgarros de sus fibras musculares es importante aclarar las dos razones principales que dan lugar al mismo:

• En primer lugar, puede ser por el exceso de tensión acumulada en la zona que tal y como se ha comentado anteriormente tiene lugar cuando el músculo se estira y contrae rápidamente. Esto sería una consecuencia derivada de otra acción.
• En segundo lugar, cuando la zona sufre un tipo de daño o golpe que le hace desgarrarse o romperse.

Finalmente, se puede aclarar que las principales causas que dan lugar al desgarro muscular son:

• Exceso de peso en el cuerpo: Aunque hacer ejercicio es fundamental y saludable, son muchas las personas que deciden trabajar con pesos excesivos y que su musculatura es incapaz de soportar en determinados momentos debido a que estos conllevan un exceso estiramiento y contracción muscular. Por lo tanto, no sólo es importante tener en cuenta el peso y no sobrecargarse sino también tener un descanso entre un entrenamiento y otro para permitir que los músculos se recuperen y vuelvan a estar listos para afrontar un nuevo entrenamiento. Ahí uno de los motivos por los que los deportistas que acuden al gimnasio a entrenar van variando día a día su entrenamiento y alternando la zona superior del cuerpo (brazo) y la inferior (pierna), buscando no sobrecargar ningún músculo.
• Sedentarismo: Aquellas personas que no practican ejercicio físico son muy tendentes a sufrir un desgarro muscular. Y es que, es fundamental entrenar y ejercitar los músculos para fortalecerlos y evitar situaciones de este tipo. Además, a nivel de salud, es más que evidente la importancia que tiene el deporte y la actividad física.
Se recomienda realizar previamente un poco de cardio
• Edad: Aquellas personas que tienen una edad más avanzada, suelen tener más posibilidades de sufrir un desgarro muscular ya que el paso de los años se nota y los músculos ya no están tan fortalecidos y la posibilidad de rasgarse o dañarse es más evidente.
• Alimentación: Este aspecto es más importante de lo que muchas personas creen ya que es a través de la comida como el cuerpo consigue la energía necesaria para su funcionamiento por lo que si no están los nutrientes presentes en la dieta, las células se ven menos fortalecidas y los músculos más débiles y con posibilidad de sufrir un desgarro muscular de cualquier grado.
• Estiramiento y calentamiento: No solo por otro tipo de lesiones que puedan aparecer sino también por el desgarro muscular es fundamental estirar y calentar el cuerpo antes de cada entrenamiento. El motivo es que el músculo necesita una pequeña estimulación previa que le ponga en situación y haga que los músculos estén más flexibles y calientes a la hora de soportar peso . Si se hace sin un calentamiento previo, estos estarán más fríos y la posibilidad de desgarro será mayor. Por este motivo también se recomienda realizar previamente un poco de cardio, con el fin de activar el organismo y ponerlo a punto para comenzar a entrenar.