La diabetes insípida, también conocida como diabetes insípida central o diabetes insípida neurogénica, es un trastorno común que causa un desequilibrio del agua en el cuerpo, el cual produce la excreción de grandes cantidades de orina y una sed intensa, incluso después de tomar líquidos. Por lo tanto, es una enfermedad distinta a la diabetes, aunque ambas comparten síntomas comunes como la micción y la sed excesivas. No existe cura para la diabetes insípida, pero sí que hay tratamientos para aliviar la sed y normalizar la producción de orina.
Causas
Normalmente, los riñones expulsan el exceso de líquidos corporales del torrente sanguíneo, que se almacena de manera temporal en tu vejiga en forma de orina, antes de que orines. La diabetes insípida ocurre cuando el cuerpo no puede regular la forma en que controla los líquidos y los riñones no pueden prevenir la eliminación del agua. Y es que esta enfermedad aparece cuando el cuerpo tiene una cantidad más baja de lo normal de hormona antidiurética, o también conocida como vasopresina, que tiene lugar en una parte del cerebro que se denomina hipotálamo. Después, se almacena y se secreta desde la hipófisis, una pequeña glándula en la base del cerebro.
Por lo tanto, la hormona antidiurética es la que controla la cantidad de agua excretada en la orina y, sin ella, los riñones no funcionan adecuadamente para tener suficiente agua en el cuerpo. El resultado es una pérdida rápida de agua del cuerpo en forma de orina diluida, es decir, hay una necesidad de beber mucha agua y de orinar mucho en compensación a todo el agua ingerida. Y es que se pierde de 10 a 15 litros por día.
El nivel reducido de hormona antidiurética puede ser que esté producido por daño al hipotálamo o la hipófisis, ya sea por una infección, una cirugía, una inflamación, un tumor o un traumatismo craneal. Muy raro tiene que ser que esto sea provocado por problemas de genética. Aun así, en algunos casos de diabetes insípida, los médicos nunca determinan la causa.
Síntomas
Es cierto que los síntomas y signos más frecuentes que aparecen cuando padeces esta enfermedad son la excreción de una cantidad excesiva de orina diluida y una sed extrema, pero no los únicos. Otros signos pueden ser la necesidad de levantarte en medio de la noche a orinar y mojar la cama o la confusión y cambios en la lucidez mental debido a la deshidratación y a un nivel de sodio más alto de lo normal en el cuerpo, si la persona es incapaz de beber.
Depende de la gravedad, la orina que produces puede llegar a ser hasta de 15 litros por día si ingieres mucho líquido, pues normalmente, una persona adulta sana orina una media de casi 3 litros por día.
Por otro lado, si esta enfermedad se produce en los bebés y niños pequeños, los síntomas y signos que pueden tener son: agitación sin motivo aparente o llanto imposible de controlar, fiebre, trastornos del sueño, vómitos, diarrea, adelgazamiento o retraso en el crecimiento.
Tratamiento
El tratamiento de la diabetes insípida depende de qué forma de la enfermedad padezcas. Lo primero de todo es saber que hay que tratar la causa de la afección subyacente. La vasopresina se administra de varias formas, ya sea como aerosol nasal, pastillas o inyecciones. Esta hormona controla la producción de orina y el equilibro de los líquidos, al igual que previene la deshidratación.
Si se trata de un caso leve, lo más seguro es que lo único necesario sea beber más agua. Si el control de la sed en tu cuerpo no está funcionando bien, por ejemplo si el hipotálamo está dañado, se puede necesitar una receta una cantidad de ingesta de agua para asegurar la hidratación apropiada.
Por otro lado, es cierto que esta enfermedad no se puede producir en muchos de los casos, pero el tratamiento adecuado de las infecciones, lesiones y tumores puede disminuir el riesgo.
Lo mejor es que uses un brazalete de alerta médica o lleves una tarjeta de alerta médica en tu billetera. Si tienes una emergencia médica, un profesional de la salud sabrá de manera inmediata tu necesidad de tratamiento especial.
Factores de riesgo y complicaciones
La diabetes insípida nefrogénica que aparece al momento del nacimiento o poco después de este es causada genéticamente y altera para siempre la capacidad del riñón para concentrar orina. Suele producirse en los hombres, aunque las mujeres pueden transmitir el gen a sus hijos.
En cuanto a complicaciones, puede darse una deshidratación. Y es que, excepto la polidipsia primaria, que provoca la retención de mucho líquido, la diabetes insípida puede provocar que tu cuerpo no conserve el líquido suficiente para funcionar de manera correcta y que te deshidrates. Esto puede provocar: boca seca, cambios en la elasticidad de la piel, presión arterial baja, fiebre, dolor de cabeza, frecuencia cardíaca acelerada, adelgazamiento y una alta concentración de sodio en la sangre.
Otra complicación puede ser que se dé un desequilibrio electrolítico, es decir, minerales que se encuentran en la sangre como el potasio y el sodio y que mantienen el equilibrio de líquidos en el cuerpo. Este desequilibrio de electrolitos puede provocar síntomas como: nauseas, fatiga, pérdida de apetito, confusión y calambres musculares.
Consultar al médico en caso de...
Es fundamental que se consulte al médico de forma inmediata si se perciben más de los dos signos comunes de la diabetes insípida, es decir, la sed extrema y la micción excesiva. Lo más normal es que lo primero que hagas sea consultarlo con tu médico de atención primaria. Sin embargo, en algunos casos, es probable que cuando llames para pedir una consulta, te pasen inmediatamente a un endocrinólogo.
Lo más normal es que el médico te pregunte sobre tu historia clínica y los síntomas. A partir de esto, te puede ordenar que lleves a cabo algún examen médico como: un análisis de orina, una prueba de provocación con desmopresina, una prueba de osmolaridad y sodio en la sangre, una resonancia magnética de la cabeza, una concentración de la orina o un enuresis.
El pronóstico dependerá de la causa de tu enfermedad. De normal, cuando recibes tratamiento, esta enfermedad no es causa de problemas grandes ni provoca la muerte precoz.
Recuerda siempre que antes de asistir a tu cita con el médico que tienes que tener en cuenta las restricciones que debes cumplir antes de asistir a la consulta, anotar los síntomas que experimentes, hacer una lista con tu información médica importante, anotar todas tus dudas para que te las resulta el médico y llevar contigo a un familiar o amigo.