Un tumor cerebral se puede diagnosticar mediante pruebas de imagen que ven las estructuras del cerebro, así como con una biopsia que evalúa la muestra de un tumor cerebral sospechoso bajo un microscopio. Antes de ordenar estas pruebas se realiza un examen físico del paciente para saber si hay cambios neurológicos que pudieran dar señales de que existe un tumor cerebral. Al final del diagnóstico de un tumor cerebral, puede incluir también otras pruebas como una resonancia magnética, tomografía computarizada, análisis de sangre, punción lumbar y biopsia.
Existen varios tipos de tumores cerebrales, y algunos son cáncer, que crece rápidamente y puede invadir el tejido cercano, mientras que otros no. Estas pruebas de diagnóstico pueden ayudar al médico a determinar si una persona tiene un tumor cerebral y, si está presente, qué tipo de tumor cerebral es.
Autocomprobaciones
Un tumor cerebral que se encuentra dentro del cráneo no suele presentar cambios que puedas apreciar en tu vida diaria. Aunque hay algunas señales de tumores cerebrales que sí puedes tener en cuenta, sobre todo porque aunque empiecen siendo sutiles pueden ir progresando lentamente. Si notas cualquiera de estos aspectos tendrás que hablar con tu médico:
- Dolores de cabeza persistentes
- Cambios en tu campo de visión
- Problemas en la coordinación motora gruesa o fina
- Vómitos inexplicables
- Debilidad
- Entumecimiento u hormigueo en brazos y piernas
- Dificultad para hablar o entender el habla de otros
- Convulsiones
Examen físicos
El examen físico de tu médicos es muy importante para determinar si tienes o no un tumor cerebral. Las anomalías neurológicas que corresponden a una sección del cerebro se asocian con tumores cerebrales, mientras que las que corresponden a una arteria en el cerebro son causadas por un accidente cerebrovascular. Estas sutiles diferencias pueden ayudar a un neurólogo o neurocirujano a evaluar de manera eficiente el diagnóstico para que puedas obtener el diagnóstico correcto y un tratamiento adecuado a tus características.
Las señales de un tumor cerebral necesitan un examen físico y el médico puede preguntarte si notas debilidad, temblores, problemas de coordinación en el cuerpo o movimientos bruscos en los ojos. Si tienes hinchazón en los nervios ópticos también puede ser un síntoma ya que puede ser causado por la presión en el cerebro a causa del tumor cerebral.
Imágenes del cerebro
Las imágenes pueden evaluar el tamaño de un tumor y su ubicación dentro del cerebro, así como las características que ayudan a diferenciar un tipo de tumor de otro. Las pruebas de imagen más comunes para los tumores cerebrales son la resonancia magnética y la tomografía computarizada (TAC). Estas pruebas generalmente se realizan con material de contraste inyectado, que es fluido que rodea áreas sólidas, como tumores cerebrales, para definir mejor los bordes.
Otras pruebas que se usan a menudo con fines de investigación y, a veces, la planificación quirúrgica incluyen la espectroscopia de resonancia magnética que detectan diferencias en la actividad metabólica que puede ocurrir con un tumor cerebral. Una prueba de emisión de positrones. es similar a una tomografía computarizada y puede detectar cambios microscópicos en el flujo sanguíneo y el consumo de oxígeno, lo que puede ocurrir con algunos tumores cerebrales.
Es posible que estos tipos de pruebas de imagen no estén disponibles en todos los hospitales, pero las pruebas que sí se realicen son necesarias porque detectan cambios sutiles que los científicos usan para aprender más sobre la enfermedad cerebral. Aunque hay más tipos de pruebas estas son las más conocidas.
Análisis de sangre
Un análisis de sangre también ayuda a evaluar algunos tipos de tumores cerebrales (hay mas de 30 diferentes) y una punción lumbar puede ayudar a diagnosticar tumores metastásicos (propagación agresiva) en el cerebro. Una biopsia es un procedimiento importante, y es la prueba más definitiva para el diagnóstico de tumores cerebrales.