A la hora de hacer ejercicio pueden surgir problemas una vez terminado, como el dolor en las articulaciones. Las razones pueden ser varias y van desde la poca costumbre a realizar deporte, forzar demasiado, no calentar previamente o que éstas no se encuentren en un buen estado como para la práctica deportiva. El dolor en las articulaciones puede provenir de la inflamación del interior de ésta o de las estructuras adyacentes la misma.
En estos casos, el problema es que la persona que ha estado haciendo ejercicio sufre un dolor en estas que puede suponer una molestia para el día a día. Aunque no suele estar presente durante un largo periodo de tiempo, sí que resultan tan molestas que parece que no se van a ir. Por ello, aquí te vamos a explicar cuáles son las razones y algunas soluciones para intentar prevenir esta sensación de dolor y rigidez en nuestras articulaciones.
Causas del dolor
Las causas del dolor en las articulaciones pueden ser varias. Aquí te vamos a dejar algunas de las más comunes, pero, en caso de que el dolor persista más tiempo del estipulado como normal o no baje su intensidad será necesario acudir a un especialista porque es posible que tengamos algo más grave.
- Falta de ejercicio. Una de las principales razones es que la persona que sufre dolores en las articulaciones después de hacer deporte es porque no lo realiza habitualmente. Cuando éstas no están acostumbras al ejercicio es posible que se vean más resentidas y acaben por inflamarse.
- Exceso de esfuerzo. Tiene algo de relación con la falta de ejercicio, aunque depende de lo que hagamos. Hay veces en las que no tenemos en cuenta que si no estamos preparados no podemos hacer un esfuerzo muy grande o durante más tiempo del recomendable. También esto puede tener que ver con el tipo de actividad que se realiza, ya que si es la primera vez y no estamos familiarizados, es posible que después notemos dolor.
- No calentar. Aunque a veces es inevitable que nos duelan las articulaciones después de hacer ejercicio, calentar previamente puede ayudar a que el dolor no sea tan intenso. Con él se prepara a las articulaciones para que no se encuentren tan frías y tensas antes de hacer deporte evitando, además del dolor posterior, posibles lesiones. Por otra parte, será necesario estirar después de haber realizado el ejercicio.
- Problemas de nutrición. Para poder hacer deporte sin problemas, es importante que nuestras articulaciones reciban el número de nutrientes necesario. Para ello, se recomienda tener una dieta equilibrada que ayude a que nuestro cuerpo se encuentre en el mejor estado de forma posible para hacer ejercicio.
¿Cómo aliviar el dolor en las articulaciones?
El dolor en las articulaciones después de hacer ejercicio suele ser molesto para las acciones cotidianas del día a día. Por ello, aquí te vamos a dejar distintas formas de aliviarlo. Aun así, será necesario que tengas en cuenta las causas que pueden provocarlo para que para otra vez no llegues a tener esas molestias.
- Baño tibio. Una vez que has terminado de hacer deporte y buscando relajar el cuerpo es bueno darse un baño con el agua tibia. En caso de que no sea posible, también podría valer una ducha. No repares a la hora de aplicar el agua por los distintos rincones de tu cuerpo ya que ésta ayudará a que las articulaciones no estén tan tensas como lo estaban mientras hacías ejercicio y, por lo tanto, se podrá reducir el dolor.
- Hielo. Como hemos dicho, el dolor en las articulaciones se debe a la inflamación de éstas. Por ello, y con el fin de bajarla, es recomendable aplicar hielo en la zona de las articulaciones que tengamos más resentida. Para ello, se pondrá en una bolsa y se colocará en la zona con cuidado de no quemar la piel. De todos modos, en el caso de que la hinchazón de las articulaciones se produzca siempre después de hacer ejercicio, sería recomendable comprar una bolsa térmica para este cometido.
- Masaje relajante. En este caso, para realizar el masaje se pueden utilizar pomadas, cremas o aceites que ayuden a que la articulación vaya relajándose. Para escoger el que más nos conviene deberemos pensar en qué es lo que más nos alivia. En el mercado puedes encontrarte distintos tipos de productos que pueden hacernos sentir frío o calor. Una vez que nos decidamos por el que queramos usar, tocará masajear la zona inflamada con cuidado.
- Acupuntura. Una vez que una persona descubre que le duelen las articulaciones después de hacer ejercicio, puede optar por esta técnica asiática para ayudar a reducir las molestias. La acupuntura ayuda a que el dolor de las articulaciones disminuya paulatinamente, pero para ello deberemos acudir a un centro o a un especialista que de verdad sea un experto en ella para que sea efectiva.