El uso de esteroides afecta no solo al cuerpo sino también a la mente. Los efectos mentales del uso de los esteroides pueden ser igual de peligrosos e incluso más graves que los efectos secundarios físicos. Se hace mucho énfasis en los cambios físicos asociados con el uso de esteroides, y los aspectos mentales del uso de éstos a menudo se pasan por alto. No te pierdas los efectos secundarios mentales de los esteroides que te comentamos a continuación. Si estás pensando en tomarlos, entonces esta información debes saberla cuanto antes.
Psicosis
La psicosis es una ruptura con la realidad. La persona que se administra esteroides en su organismo no se siente conectado con el mundo real y, en cambio, vive y piensa en su propio mundo. En esta realidad, él es todopoderoso, invencible y capaz de cualquier cosa.
Es en el estado de psicosis donde entra en juego la violencia asociada con la "rabia de roid". Cuando se desafía el poder o la fuerza del usuario de esteroides, hará lo que pueda para defender su honor. Es posible que el usuario de esteroides ni siquiera entienda o sepa lo que está haciendo.
Depresión
La depresión es un efecto secundario común y puede ser tan grave que incluso conduce al suicidio. Los usuarios de esteroides a menudo los usan para combatir los muchos efectos secundarios que acompañan el uso de esteroides, como la depresión.
El insomnio es un efecto secundario común, por lo que el usuario de esteroides puede abusar de las pastillas para dormir. Saber que está abusando de una droga puede conducir a la depresión, lo que puede profundizar el ciclo de abuso de los esteroides.
Manía
Tener manía es una sensación de euforia completa similar a la psicosis. Durante un estado maníaco, el usuario puede sentir que está drogado. También puede ser propenso a la violencia y a las decisiones impulsivas e imprudentes. Esto puede afectar negativamente la vida social del abusador de esteroides, lo que puede conducir nuevamente a la depresión y al abuso de otras drogas.
En la etapa maníaca, el usuario de esteroides puede volverse extremadamente paranoico sobre cualquier cosa y todo. Puede sentirse desafiado cuando no hay desafío presente. Esto puede conducir a la violencia y la pérdida de las relaciones sociales.
Cualquiera de estos efectos secundarios pueden poner en riesgo tu vida o en peligro la de los demás que estén cerca de ti, sobre todo, en episodios de violencia. Habla con tu médico antes de que las circunstancias empeoren.