Un fibroma plantar es una masa de tejido fibroso que se desarrolla en el arco del pie. El crecimiento a menudo causa dolor y malestar a pesar de que es benigno. Los fibromas plantares afecta más a los hombres que a las mujeres y suele ocurrir en personas de mediana edad o en personas mayores. Con menos frecuenta, las personas puede desarrollar varios fibromas al mismo tiempo en el pie, esta condición es conocida también como fibromatosis plantar.
Es necesario conocer esta condición así como los síntomas que tienen para poder tratarlo correctamente y mejorar la calidad de vida de las personas que lo padecen. Esta condición puede ser muy molesta y requerirá asesoramiento médico lo antes posible.
Síntomas del fibroma plantar
Cuando se padece fibroma planta se reconoce porque aparece un bulto en el crecimiento del arco del pie, es el fibroma. Normalmente es un bulto pequeño pero suele ser bastante molesto, aunque también hay personas que no sienten ningún tipo de incomodidad. Pero con el tiempo, el fibroma se puede agradar o aparecer otros nuevos en la misma zona. Los bultos más grandes son los que generalmente duelen más.
El dolor puede empeorar cuando se aplica presión en el bultoEl dolor puede empeorar cuando se aplica presión en el bulto, cuando se usan zapatos apretados, cuando se camina descalzo o se camina durante largos periodos de tiempo.
Posibles causas del fibroma plantar
Las causas exactas de la aparición del fibroma plantar no se conoce. Algunas investigaciones apuntan que la genética puede ser un factor desencadenante. Los fibromas plantares suelen ser más comunes en personas que tienen herencia del norte de Europa y ascendencia asiática.
Otra causa puede ser el tener algún trauma físico en el pie. Las lesiones repetitivas en el pie pueden provocar un desgarro de la fascia en el arco, lo que estimula el crecimiento de fibromas.
Otra causa que podría contribuir a que aparezcan los fibromas plantares es el estilo de vida y algunas concisiones como por ejemplo:
-Enfermedad del hígado
-Epilepsia
-Alcoholismo
-Toma de medicamentos como: anticonvulsivos, medicamentos para la hipertensión, vitamina C en grandes dosis, etc.
Diagnostico y tratamiento del fibroma plantar
Para saber si tienes o no un fibroma plantar deberás acudir a tu médico para que te examine el pie, aunque también puede pedirte algunas pruebas adicionales pueden ser necesarias en algunos casos en concreto. En el examen físico, el médico presionará sobre el fibroma y el área circundante. Controlará el dolor y evaluará la capacidad que tienes para ponerte de pie y caminar.
Quizá te pida que te hagas rayos x o resonancia magnética para descartar otras afecciones del pie como los quistes, alguna infección, tendones hinchados, tumores, etc. Solo se pedirá una biopsia si en las exploraciones pueden indicar que el tumor puede ser canceroso.
En en cuanto a tratamiento, el objetivo es aliviar el dolor y reducir el tamaño del bulto. Los fibromas plantares pequeños que no causan síntomas pueden no requerir ningún tratamiento. Las opciones de tratamiento para fibromas más grandes o dolorosos incluyen:
Obtener una inyección de esteroides en la masa puede reducir el dolor-Cremas. Un gel tópico o crema trata el fibroma plantar al detener el crecimiento del tejido fibroso. Algunos geles afirman que pueden aliviar el dolor a los pocos meses de uso. La evidencia de su efectividad es limitada.
-Corticosteroides. Obtener una inyección de esteroides en la masa puede reducir el dolor y la inflamación también puede ser viable. Una inyección de corticosteroides a menudo se considera una solución temporal porque no detiene el crecimiento del fibroma.
-Plantillas ortopédicas. El dolor causado por un fibroma se puede aliviar usando una plantilla o almohadilla para el calzado.
-Terapia física. Los ejercicios de estiramiento y fortalecimiento también ayudan a reducir la inflamación, mejorando la circulación o fomentando el crecimiento de nuevas células.
-Cirugía. La cirugía puede ser necesaria en algunos casos, especialmente si una masa fibrosa continúa creciendo de tamaño o causa un aumento del dolor y la incomodidad.
