El flujo vaginal es un líquido viscoso que segregan el cuello del útero y las paredes de la vagina. Es diferente en cada mujer, así cada una sabe cómo es su flujo normal y cuándo éste presenta un aspecto diferente. Tiende a ser transparente o blanquecino, dependiendo de la persona, su consistencia puede ir desde muy líquido a muy pastoso, y generalmente no presenta mal olor. Estas variaciones no se dan sólo de una mujer a otra, sino que durante el ciclo menstrual suele ir cambiando. Así, durante los días de ovulación, a mitad del ciclo, es más abundante y transparente, mientras que en los días previos y posteriores a la menstruación es más espeso y escaso.
El flujo vaginal tiene varias funciones, además de ser un mecanismo para humedecer y lubricar la zona, también la ayuda a mantenerse limpia. Otra de sus funciones importantes consiste en mantener la flora bacteriana de la vagina equilibrada, evitando la aparición de infecciones.
Flujo vaginal marrón
Pese a las ligeras variaciones que pueda sufrir el flujo vaginal a lo largo del ciclo menstrual, o incluso de la vida, hay ocasiones en las que podemos notar que su color, olor o consistencia no es normal. Una de ellas es cuando nos aparecen manchas de color marrón o café, se trata de ligeras manchas de sangre no debidas a la menstruación. Debemos estar atentas cuando ocurra, pero generalmente no se debe a ninguna patología. Por otro lado, sabemos que no se trata de una infección porque en esos casos su color tiende a ser más amarillento o verdoso.
Causas más comunes del flujo vaginal marrón
En muchas ocasiones el flujo vaginal marrón se descarga unos días después del fin de la menstruación. Esto se debe a que durante esa fase el útero no expulsó toda la sangre vieja que tenía y lo hace con cierto retraso.
Si tiene lugar en medio del ciclo menstrual, generalmente se debe a cierto desequilibrio hormonal, especialmente si se están utilizando anticonceptivos hormonales, como la píldora, el anillo, etc. Esto ocurre a un 10% de las mujeres que siguen este tipo de métodos contra el embarazo, pero en las que no lo hacen también es posible que ocurra sin ningún tipo de causa preocupante, especialmente si no va acompañado de otros síntomas y si no persiste en el tiempo.
Otra causa común es el embarazo. Un 20% de las mujeres pueden presentar flujo marrón durante los 3 primeros meses de gestación, el cual puede generar algunas confusiones: por un lado, la mujer puede pensar que es la menstruación y que en realidad no está embarazada y, por otro, puede creer que se trata de un aborto. Sin embargo, no es ninguna de estas dos causas, además, el flujo marrón es muy poco abundante. La causa del flujo marrón durante el embarazo es el desprendimiento del cigoto de la pared del útero, fenómeno que va acompañado de una ligera descarga de sangre.
Por último, hay enfermedades no relacionadas con el aparato reproductor que pueden afectar a nuestro funcionamiento fisiológico y hormonal y, por tanto, a nuestra menstruación, como los desórdenes alimenticios, o el propio estrés.
Otras causas del flujo marrón
Cuando estos ligeros sangrados o flujo vaginal marrón se mantiene a lo largo de varios ciclos menstruales, o si va acompañado de dolor abdominal o de otro tipo, deberemos consultar al médico. Hay algunas afecciones más graves que pueden estar generando este flujo marrón como síntoma, y para asegurarnos de lo que es, deberemos acudir a nuestro centro de salud.
Unos de los desencadenantes del flujo vaginal marrón pueden ser los quistes ováricos, que son inflamaciones que se producen en los ovarios. Estas inflamaciones adquieren forma de saco y se encuentran llenos de líquido. En muchas ocasiones estos quistes son inofensivos y desaparecen espontáneamente, pero cuando merecen nuestra preocupación es cuando este flujo marrón se acompaña de dolor abdominal.
Las hemorragias intermenstruales también nos pueden estar alertando de una endometriosis, que es la presencia de endometrio, una de las capas del útero, fuera del mismo. Sin embargo, al igual que en otras afecciones, esta descarga marrón suele ir acompañada de otros síntomas, como alteraciones menstruales, dolor en la parte baja del abdomen, o dolor durante las relaciones sexuales.
¿Cuándo debo preocuparme por el flujo vaginal marrón?
En conclusión a todo lo expuesto, deberemos consultar con un médico la presencia de descargas marrones o flujo vaginal marrón cuando se de de manera recurrente y/o si se ve acompañado de otros síntomas que nos provocan malestar: cualquier tipo de dolor, debilidad, fiebre, alteraciones de la menstruación, etc.
Generalmente, se debe a causas benignas y temporales. Deberemos tener en cuenta en qué momento del ciclo menstrual tiene lugar, para ayudar a nuestro médico a encontrar la causa.