La Navidad es una época festiva, donde las celebraciones, eventos y reuniones con amigos y familiares, suelen celebrarse alrededor de una mesa. Aunque no debería ser así, la realidad es que durante la Navidad se cometen grandes excesos que, más pronto que tarde terminan por pasar factura. Estos son algunos de los hábitos navideños que más perjudican la salud.
Comer demasiados dulces con exceso de azúcar, productos con muchas grasas y demasiado sodio, beber más alcohol de la cuenta o fumar, son algunos de los malos hábitos que se acentúan durante la Navidad. E irremediablemente, terminan por afectar negativamente a la salud en diversos sentidos.
1. Comer de más
Las comilonas, esas mesas llenas a rebosar de mariscos, carnes con salsas, dulces típicos de la fecha, alcohol de todo tipo etc. Además de las cenas y comidas especiales de las fechas señaladas durante la Navidad, el mes está repleto de comidas con amigos, con compañeros de trabajo o de visitas a amigos y familiares.
Y todas esas celebraciones, giran en torno a una mesa llena de comida y bebida poco saludable en lo general. Además de comer demasiadas cosas poco saludables, se suele comer grandes cantidades de todos esos alimentos, como si fuese necesario llenar el cuerpo de grasas saturadas y alcohol. De los hábitos navideños, este es de los más perjudiciales.
Aunque es difícil renunciar a probar todas esas cosas deliciosas en cada una de las mesas navideñas, es esencial saber controlar el ansia. Es decir, no te dejes llevar por la rica apariencia de todos los alimentos. Haz un importante ejercicio de autocontrol y toma pequeñas cantidades de las cosas que más te apetezca probar. Aquellos alimentos que no consumes habitualmente, que son los que debes disfrutar durante estas comidas navideñas, pero siempre con moderación.
Comer en exceso puede producir efectos negativos en tu salud, además de sufrir indigestiones que sin duda estropearán una noche de diversión.
2. El exceso de alcohol
De sobra es conocido el efecto negativo del alcohol para la salud, lógicamente cuando este se convierte en un hábito y no en una excepción. Consumir demasiado alcohol en las fiestas navideñas, no te ayudará a pasártelo mejor, ni disfrutarás de unas fiestas más divertidas. Al contrario, lo más probable es que sufras como mínimo una importante resaca que te impedirá disfrutar de las fiestas del día siguiente.
Sin contar con los riesgos que el exceso de alcohol puede producirte en niveles más graves, una intoxicación etílica, problemas renales, estomacales etc. No te la juegues y evita consumir más alcohol de la cuenta. Una copa de vino en la cena o una copa de cava para brindar con tus familiares y amigos, es más que suficiente para disfrutar de una bonita noche navideña.
Elimina el alcohol de tus hábitos navideños y disfruta de una Navidad más saludable.
3. El estrés de los preparativos navideños
Para muchas personas, los preparativos previos a las fiestas navideñas suponen un importante estrés que puede llegar a generar episodios de ansiedad. Si nunca has sufrido este tipo de situaciones, quizá te parezca algo excesivo o exagerado, pero la realidad es que organizar, planificar y cocinar un banquete para muchos invitados, supone un importante trabajo que todo el mundo no puede soportar.
Si es tu caso, este año evita cargarte con todo ese trabajo extra, ya que, aunque te encante ser anfitrión o anfitriona y desees agasajar a tus invitados, no debes olvidarte de que la Navidad es para disfrutarla al igual que los demás. Si te encargas tu sola de todas las cosas, lo más probable es que todos disfruten mucho, pero tu pasarás 15 días de locura planificando y preparando unas fiestas ideales para todo el mundo, menos para ti.
Delega y encarga trabajo a tus invitados, en lugar de encargarte tú de todas las cosas, reúnete con tus familiares y planifica el menú navideño junto a ellos. De esta forma, cada uno podrá aportar sus ideas y conseguiréis un menú más adecuado para todos los gustos. Además, cada uno podrá preparar un plato diferente y así tú no te cargarás con todo el trabajo de la cocina.
4. El gasto económico
Durante la época navideña se realiza un importante gasto económico, que afecta muy negativamente a la salud económica de las familias, además de afectar a la salud emocional de los cabezas de familia. Todo el mundo quiere darle lo mejor a los suyos, los mejores banquetes en las cenas y comidas de Navidad, los mejores regalos a las personas más importantes y un árbol de Navidad lleno de juguetes y regalos para los niños.
Pero todo esto, supone un importante gasto económico que puede complicarte de muchas maneras la vida a corto y a largo plazo. Por una parte, nunca debes gastar más de lo que tienes en las fiestas, es decir, no pidas créditos para la Navidad porque pasarás todo el año pagando esa deuda con grandes comisiones, cuando la realidad es que no es necesario.
Los regalos no lo son todo en Navidad, los niños no deben crecer con ese pensamiento y esa costumbre. Un regalo hecho con cariño, pensado con tiempo y dedicación, es mucho más valioso que una montaña de regalos que los niños no sabrán valorar. No te compliques la vida económicamente hablando y evita gastar más de la cuenta.
5. Las reuniones familiares
Pasar tiempo con la familia, puede perjudicar seriamente la salud. Quieres mucho a todos tus familiares, eso nadie lo duda, pero pasar tantas horas juntos te estresa, te crea ansiedad y un estado de nerviosismo que mitigas con comida y con copas de más. ¿Te sientes identificado o identificada? No te sientas culpable, ese es un sentimiento compartido por muchas y muchos.
Especialmente cuando llevas mucho tiempo viviendo fuera de casa, es difícil pasar mucho tiempo con algunas personas. No es porque sientas menos afecto, simplemente es que no es fácil adaptarse al cambio de rutinas o soportar preguntas quizá indiscretas que no te apetece contestar.
Evitar sufrir graves perjuicios en tu salud a causa de los hábitos navideños es posible, solo tienes que recordar estas fechas son para disfrutarlas cada uno a su manera. Algunas personas disfrutan juntándose con muchos amigos o derrochando dinero y felicidad, pero si esta no es tu forma de ser, no intentes convertirte en lo que no eres. Tu salud es lo primero y la Navidad termina en pocos días.