Para unos padres puede ser fácil identificar cuándo deben llevar a su hijo al pediatra, como por ejemplo cuando tiene fiebre o se queja de dolores o ardores al orinar. Si tu hijo orina con mucha frecuencia, ¿podría haber un problema? Una micción frecuente se conoce como orinar ocho o más veces durante las horas de vigila para un niño de 5 años o más.
Aunque no siempre es un problema grave, tampoco es normal, por lo que incluso sin otros síntomas, los niños que orinan con frecuencia deben visitar al pediatra para ver cuál es la causa subyacente que está originando que le ocurra que orine tantas veces durante el día.
Micción frecuente
Es necesario hacer un diario de micción de tu hijo para saber cuáles son las horas habituales en las que orina. Las preguntas del pediatra pueden ser las siguientes:
- ¿Orina muchas veces al día?
- ¿Orina mucha cantidad?
- ¿Se despierta por las noches para orinar? ¿Cuántas veces?
- ¿Tu hijo suele tener accidentes y se orina encima?
- ¿Tu hijo tiene la sensación de orinar con frecuencia pero en realidad cuando va a hacer pis no orina apenas nada?
Además de tener en cuenta los hábitos de micción de tu hijo, el pediatra también puede realizar un examen físico y un análisis de orina para descartar ciertas causas de micción frecuente como una infección o diabetes.
Si el pediatra no puede saber las causas que está originando la micción, necesitará una evaluación más exhaustiva por parte del especialista y probablemente le derivará a un urólogo pediátrico o un nefrólogo pediátrico.
Causas comunes en niños
Hay varias razones por las cuales tu hijo puede estar orinando mucho. Algunos son más obvios que otros, como si tu hijo está orinando mucho porque está bebiendo cantidades voluminosas de líquidos, aunque no tenga sed, más por costumbre que por necesidad. Además, el estreñimiento también puede estar relacionado con la micción frecuente. Existen algunas causas que pueden hacer que tu hijo esté orinando mucho.
- Disfunción de evacuación. Los niños no vacían la vejiga porque tienen demasiada prisa para volver a jugar y les causa incontinencia. Si ocurre esto tendrás que animar a tu hijo para que haga todo el pipí y recuérdale que orine cada dos o tres horas.
- Vulvovaginitis o Balanitis. Otra consideración es la inflamación alrededor del área vaginal en las niñas (llamada vulvovaginitis). Esto puede ser causado por no limpiar correctamente la zona o tomar baños de burbujas. Además, la balanitis , o inflamación del meato o abertura del pene, puede ocurrir en los niños.
- Diabetes mellitus. La diabetes juvenil o la diabetes tipo I están entre las condiciones médicas que muchos padres tienen en mente cuando llevan a su hijo al médico con la micción frecuente. Las pruebas de diabetes probablemente incluirán un análisis de orina que mostrará azúcar, glucosa y / o cetonas .
- Infección del tracto urinario. Los niños con infecciones del tracto urinario a menudo orinan con más frecuencia, pero también suelen tener otros síntomas, como dolor y ardor al orinar, orina con sangre, dolor de espalda o fiebre. Un análisis de orina será necesario para saber si tiene infección.
- Estrés emocional. En ocasiones los niños cuando sienten estrés emocional o hay algún factor que les desestabiliza emocionalmente, pueden comenzar a orinar con más frecuencia. Si no hay ninguna causa subyacente médica que haga que miccione con más frecuencia, se deberá tratar el problema emocional que le causa este problema.
Es importante que si notas que tu hijo comienza a hacer más orina de la cuenta, le lleves al pediatra para valorar su estado de salud y en caso de que se encuentre la causa subyacente y sea necesario, buscar el tratamiento que mejor se adecue a tu hijo. Es importante que pueda tener un buen control de esfínteres para que su calidad de vida no se vea perjudicada.