Las malas digestiones son consecuencia entre otras cosas de la ingesta de una gran cantidad de comida y de comer demasiado rápido. Es por ello que mucha gente se sienta muy pesada e hinchada después de comer. A la hora de tratar dichos problemas de estómago, hay una serie de infusiones que pueden llegar a ser bastante eficaces. En el siguiente artículo te hablamos de los mejores infusiones para tomar después de comer y evitar de esta manera las malas digestiones.
Infusión de genciana
Las sustancias presentes en la genciana ayudan a que el organismo produzca una gran cantidad de jugos gástricos y se procesen mucho mejor los alimentos ingeridos en las comidas. Este tipo de infusión está especialmente indicada para combatir digestiones lentas y pesadas. Para preparar tal infusión se debe cocer una cucharada rasa de genciana por vaso de agua. Dejar reposar unos 10 minutos y colar.
Infusión de melisa
Otra de las mejores infusiones que pueden tomar después de comer es la de melisa. Las hojas de esta planta ayuda a mejorar los síntomas propios de las digestiones lentas e indigestiones. Es desaconsejable tomarla en el caso de estar embarazada, durante la lactancia o si sufre problemas con la tiroides.
Infusión de hinojo
La infusión de hinojo está especialmente indicada para aquellas personas que sufren gases. Aparte de ello es también una buena infusión a la hora de aliviar los cólicos y mejorar la digestión. Al igual que ocurre con la infusión de melisa, la de hinojo es desaconsejable para aquellas mujeres que se encuentran embarazadas o están en pleno período de lactancia.
Infusión de alcachofera
Esta infusión es ideal para tratar aquellas digestiones lentas que provocan mucha pesadez y flatulencias. Es un tipo de infusión que está desaconsejada para aquellas personas que sufren de piedras en el riñón, para mujeres embarazadas o que están en pleno período de lactancia.
Infusión de manzanilla
La manzanilla es una de las plantas más digestivas que hay. Este tipo de infusión es perfecta para tratar la pesadez de estómago y para evitar la acumulación de gases estomacales. Aparte de ello es una infusión que ayuda a calmar los nervios y a conciliar el sueño.
Infusión de jengibre
El jengibre es una planta que ayuda a combatir el reflujo gástrico. Aparte de ello también se trata de un antiinflamatorio natural y trata las nauseas. En el caso de sufrir gastritis no es aconsejable su consumo ya que podría agravar los síntomas.
Infusión de hierba luisa
Otra de las mejores infusiones que puedes tomar después de comer es la de hierba luisa. Es perfecta a la hora de aliviar los síntomas propios de las digestiones lentas y pesadas. Gracias a sus propiedades, la infusión de hierba luisa está indicada a la hora de tratar ciertos dolores estomacales. Aparte de todo esto, la infusión de hierba luisa ayuda a combatir altos niveles de ansiedad y de estrés.
Los probióticos también ayudan a tratar las malas digestiones
Aparte de las infusiones arriba vistas, los probióticos también son eficaces a la hora de tratar los problemas digestivos. Los probióticos son perfectos para equilibrar la flora intestinal y evitar de esta manera la aparición de ciertas bacterias que causantes del hinchazón abdominal o del mal aliento. Estos probióticos se pueden encontrar en alimentos como el yogur aunque también se puede comprar en forma de polvos o en cápsulas.
En definitiva, no es bueno ni aconsejable las comidas copiosas ya que en muchos casos son las causantes de problemas digestivos como la hinchazón abdominal, los gases o la pesadez de estómago. En el caso de sufrir malas digestiones después de comer no dudes en tomar algunas de las infusiones vistas más arriba.