Comer saludable es una obligación para todos si queremos vivir más tiempo. Además de cuidar algunos malos hábitos como dejar de fumar o no beber alcohol, lo que ingerimos es muy importante para tener una vida más larga y saludable. Por este motivo, no a continuación vamos a explicarte algunos intercambios de alimentos que puedes tener en cuenta para que tu alimentación sea mucho más saludable.
A veces, cambiar un alimento por otro, es una buena idea para mejorar la salud pero sobre todo, para que podamos comer de una forma más equilibrada sin tener que renunciar al buen sabor. ¿Quieres algunos ejemplos para tus postres y también para una alimentación más inteligente? ¡No pierdas detalle!?
Para postres saludables
Mango como azúcar moreno
A menudo, cuando se trata de adobos, el azúcar (como el azúcar moreno o la miel) es a menudo una parte clave de la receta. Si bien la mayoría de las recetas requieren aproximadamente un vaso de azúcar, puedes reducir la cantidad necesaria a la mitad o más añadiendo mango fresco en su lugar.
Una vaso de azúcar moreno tiene aproximadamente 550 calorías y 140 gramos de azúcar, mientras que una taza de mango picado tiene alrededor de 100 calorías y 24 gramos de azúcar natural. ¡Merece la pena el cambio!
Helado de plátano como helado tradicional
El plátano se puede incorporar a cualquier dieta que estés siguiendo, incluso si eres vegano o vegetariano y no añades lácteos. Los plátanos son un buen recurso para un postre saludable. Gracias a su textura naturalmente dulce y suave, los plátanos son ideales para los hacer de helados.
Para hacerlo, simplemente mezcla los plátanos maduros congelados hasta que logre una textura espesa y parecida a las natillas. El resto depende de ti. Disfrútalo solo o añade tus ingredientes favoritos: chips de chocolate, fruta fresca, coco seco o lo que consideres que irá bien a la combinación. El helado de plátano hecho de esta manera tiene aproximadamente nueve gramos menos de azúcar por taza en comparación con el helado regular.
Mermelada de chía como cualquier otra mermelada
Si bien las mermeladas y las conservas tienen un delicioso dulzor y aportan un gran sabor a la mayoría de los productos horneados, a menudo se cargan con azúcar añadida en exceso. En lugar de esto, intenta este intercambio saludable.
Fruta: las frambuesas congeladas funcionan bien, con semillas de chía, un toque de edulcorante y la acidez de un limón. Cocina a fuego medio hasta que esté espeso y colócalo en la nevera durante la noche para espesar aún más (por las semillas de chia).
Intercambios saludables
Además de lo mencionado más arriba, también puedes tener en cuenta algunos intercambios saludables de alimentos que una vez que los descubras no dejarás de pensar en los y los incorporarás a tus menús semanales.
Yogur griego como crema agria
El yogur griego tiene la textura espesa y cremosa y el sabor agrio que buscas en la crema agria pero con tres veces la proteína que necesitas en tu organismo. Tanto el yogur griego como la crema agria están disponibles en opciones sin grasa, con bajo contenido de grasa y sin grasa. Puedes utilizarlo para tomar con patatas o con las recetas que quieras hacer que tengan crema agria.
Crema de aguacate como mayonesa
Este intercambio no solo es saludable para el corazón, sino que también es vegano y paleo-amigable. El aguacate triturado le dará esa textura cremosa y satisfactoria que estás buscando sin la grasa saturada que tiene la mayonesa. Intenta sustituir la mayonesa por el aguacate en un sándwich o una hamburguesa, o cuando prepares una ensalada de huevo o atún.
Zumo de limón como sal
Cortar la sal y agitar un limón en su lugar es lo que necesitas para mejor tu hipertensión. Puedes reducir la cantidad de sal utilizada hasta en un 75% con solo añadir zumo de limón y ralladuras. La clave es añadir la ralladura de limón antes y durante la cocción, y guardar el zumo de limón para después de cocinar. Esto añadirá más sabor, mantendrá los vegetales verdes coloridos y preservará la textura de la carne.