Hay una serie de enfermedades que todo padre y madre no quiere oír ni escuchar en la vida como es el caso del sarampión, las paperas o la varicela. Es mucha la preocupación de los padres ante el temor de que su hijo padezca algunas de las enfermedades anteriormente citadas ya que son excesivamente molestas y los bebés suelen pasarlo bastante mal.
En el caso de la varicela, no hay que preocuparse en exceso ya que con una serie de cuidados y consejos, los bebés se recuperan totalmente y sin ningún tipo de problemas. Acto seguido te aclararé todas tus dudas sobre esta enfermedad que suele afectar a un tanto por ciento muy alto de la población infantil y qué consejos seguir para tratarla de la mejor manera posible.
¿En qué consiste la varicela?
El virus que ocasiona la enfermedad de la varicela se llama varicela-zóster y es el causante de que los más pequeños sufran la aparición de numerosas ampollas en toda la piel que provocan un gran picor y escozor en todo el cuerpo. Según los datos, casi dos niños de cada 10 padecen la varicela durante su infancia.
Se trata de una enfermedad que las suelen sufrir los más pequeños aunque en un tanto por ciento bajo la pueden llegar a padecer personas en la edad adulta. Es realmente deseable pasar la varicela de pequeño, ya que de mayor se puede llegar a complicar en exceso provocando graves problemas de salud.
Síntomas más comunes de la varicela
Antes de que la varicela haga acto de presencia, suele haber un período de incubación de la misma que suele durar unas dos semanas de tiempo. Durante esos días, los bebés puede presentar síntomas tales como un poco de fiebre y malestar general. Acto seguido, los bebés suele presentar numerosas ampollas por todo el cuerpo pudiendo llegar a las 500. Pasados unos días dichas ampollas se van secando formando cientos de costras en la propia piel.
Lo más molesto de la varicela es que dichas ampollas suelen picar en exceso, lo que provoca una gran molestia en el cuerpo de los bebés. Durante la varicela, el pequeño suele presentar síntomas tales como la fiebre alta, malestar general y falta de apetito.
Posibles complicaciones de la varicela
Si se sigue el tratamiento y una serie de consejos no debe haber problemas y el bebé se recuperará sin ningún problema con el paso de los días. En el caso de que la enfermedad se complique, puede llegar a producir neumonía en el cuerpo del bebé afectando sobretodo a los pulmones y problemas graves tanto a nivel cerebral como en todo el sistema nervioso.
Vacunación de la varicela
Es muy importante vacunar a los pequeños para evitar que puedan contraer la varicela durante los primeros años de su vida. La vacuna suele aplicarse entre los 12 y los 15 meses de vida del bebé. En el caso de que el bebé no pase la varicela y cumpla los 12 años, es esencial vacunarle para evitar que pueda padecerla en la edad adulta. Este hecho es realmente importante ya que de adulto, la varicela puede provocar graves problemas de salud llegando incluso a provocar la muerte de la persona.
Espero haberte aclarado algunas de las dudas sobre esta enfermedad tan popular que suelen padecer muchos pequeños. Si sigues todos estos consejos a la hora de su tratamiento no tienes porque preocuparte más allá de lo normal. Se trata de una enfermedad muy molesta para el bebé que le ocasionará mucho malestar y picores en todo el cuerpo por lo que tus cuidados son esenciales a la hora de su pronta recuperación.