La carne de pollo es, hoy en día, una de las carnes más consumidas por los humanos debido a sus propiedades nutricionales y a que son muy bajas en grasas, por lo que es muy compatible para aquellas personas que quieran mantenerse sanas.
Seguramente te has fijado, y si no lo has hecho ya te lo decimos nosotros, en las líneas blancas que tiene la carne del pollo cuando está cruda. Normalmente lo que solemos hacer a la hora de comprar carne de pollo es elegir aquella que menos líneas blancas tiene y esto, aunque pueda parecer una tontería no lo es, ya que las líneas blancas del pollo no son tan buenas como pueden parecer.
¿Qué nos dicen las líneas blancas en la carne del pollo?
Desde hace varios meses ha saltado la alerta de que la carne de pollo que compramos en el supermercado muestra cada vez más líneas blancas en su composición, lo cual ha provocado que se realicen varios estudios. Tras el análisis de muchas muestras de carne se ha llegado a la conclusión que la carne de pollo cada vez tiene más líneas de grasas, por lo que estamos poniendo en peligro nuestra salud.
Esto es debido a que en las granjas se crían cada vez a más pollos, y cada vez lo hacen más rápido, para ello los alimentan de manera indebida, a base de piensos con muchas grasas, para que estos crezcan de manera rápida y puedan sacrificarlos pronto para poder venderlos.
Otro aspecto negativo que podemos resaltar del aumento de las líneas blancas en la carne de pollo es que también afecta a la calidad de la carne, ya que esta será mucho menos tierna que cuando los pollos se criaban de manera natural en una granja, sin presión y con una alimentación saludable.
Las líneas blancas del pollo nos transmiten que este, mientras estaba siendo criado en una granja, esta estaba superpoblada por más pollos, que tenía una vida muy sedentaria, ya que las líneas blancas nos avisan de un exceso de grasa y, por último, que estos tenían una alimentación basada en un pienso que le ayudaba a engordar y a crecer de manera rápida, por lo que se le ha alimentado con un exceso de hormonas.
Según los expertos en nutrición y en salud, nos recomiendan que no compremos la carne de pollo que contenga líneas blancas ya que, aunque en principio no es malo para la salud del ser humano, si que hará que nuestro organismo reciba todos esos excesos que el pollo recibió mientras crecía en la granja.
Lo ideal es que si vemos que donde normalmente compramos la carne, posee carne de pollo con un exceso de líneas de grasa, es cambiar de establecimiento y lugar para comprar el pollo. Elegir para ello lugares que tengan el certificado de calidad y que se dediquen exclusivamente a ello es la mejor manera de comprar carne de pollo de calidad y que no afecte de manera negativa a nuestra salud.
En la actualidad, la mayoría de la carne de aves que compramos para cocinar tienen estas líneas blancas, pero esto es debido al método que utiliza la industria para alimentarlas y poder rentabilizar de mejor manera su crianza. Por otro lado, esto no significa que nuestra salud corra riesgo por ello, ya que el organismo humano no ha presentado ninguna reacción ante estas líneas blancas.
Por último, la gran diferencia entre el pollo industrial y el pollo de granja es su color. Mientras que el que ha sido criado en granjas tiene un color más amarillento, debido al pienso de maíz que este come, el que se cría en criaderos tiene un color más rosado, así como un sabor menos intenso, por lo que se convierte en un pollo bastante insípido.