Cuando vamos a emprender un nuevo viaje, ya sea por unos días o por unos meses, en lo último que pensamos es en acabar enfermos o tener que tomar medicinas, pero aunque no nos guste es algo que debemos tener muy en cuenta, ya sea porque podemos ponernos enfermos o porque lo necesitamos debido a algún tipo de problema de salud que ya arrastramos, sea puntual o crónico.
Si vamos a viajar en nuestro propio vehículo no tenemos ningún problema en transportar toda la cantidad de medicina que queramos y de la forma de queramos, al igual que en tren, que no suele haber problemas en los controles de equipaje, pero a la hora de viajar en avión tenemos que tener en cuenta una serie de medidas a la hora de transportar medicamentos. Esto ha sido causado por los extremos cuidados que se tienen en los últimos años debido al aumento del tráfico de drogas a través de este medio, por lo que hay que tomar precauciones si no queremos crear sospechas de ningún tipo en los puntos de control de los aeropuertos.
Para comenzar debemos saber que hay algunos medicamentos que en determinados países pueden ser considerados drogas ilegales. Esto puede ocurrir en países como India, Pakistán, y en algunos de Oriente Medio. Para no tener problemas de ningún tipo en su lugar de destino, consulte con su médico de cabecera sobre ello antes de viajar al extranjero o, si es posible, con el consulado o embajada en el país. Si viaja a algún país occidental, no tiene por qué haber problemas con el transporte de medicamentos para el uso personal.
¿Cuánto llevar?
Lo ideal es llevar medicamentos para algo más de las dosis necesarias en los días de nuestro viaje. Esto se debe a que tenemos que tener en cuenta que puede haber retraso de algún tipo en el viaje de vuelta y que esto nos lleve a que tengamos que estar algún día más en el país extranjero, por lo que tendremos que prever algún día de más. No obstante, hay algunos países en los que puede tener problemas si lleva una carga excesiva sin medicamentos, o si no lleva consigo la receta médica que lo indica. Dentro de la Unión Europea, la ley marca que puede un pasajero puede llevar medicamentos hasta un máximo de para tres meses.
¿Dónde y cómo llevarlos?
Los medicamentos siempre irán colocados en el equipaje de mano, ya que están exentos de la norma del resto de líquidos o aerosoles. Además, esto se realiza por si es necesario tomarlo durante el viaje, o si el equipaje facturado llegara a perderse, que los medicamentos queden a salvo. Una razón más por la que los medicamentos no deben ir en el equipaje facturado es que las condiciones de temperatura y humedad de la bodega pueden no ser apropiadas para las condiciones de las medicinas, lo que podría llevar a deteriorarlas o que perdieran eficacia. Todos nuestros medicamentos deben ir transportados en sus envases originales y es mejor evitar utensilios como los pastilleros en los viajes de los aviones, ya que puede producir sospechas en los controles de seguridad. En la medida de lo posible, lo ideal es llevar siempre con nosotros la receta médica o la justificación de tener que transportar y/o tomar el medicamentos durante el viaje que vamos a realizar.
Si necesita transportar un material un poco más elaborado como pueden ser utensilios médicos de medición o jeringuillas, por ejemplo en el caso de los diabéticos, deberá informar con antelación a la compañía aérea que va a utilizar, y ellos mismos serán los que le indicaran las medidas a seguir según su política de seguridad.
Como caso concreto y especial están aquellas personas enfermas de VIH, tiene que estudiar bien la situación pues existen mucho países en los que no se permite la entrada de seropositivos ni de la mayoría de los medicamentos que tienen como función ayudar al tratamiento de esta infección.
¿Y si necesito comprar medicinas en el país de destino?
También puede ocurrir el momento en el que nos quedemos sin medicamentos o incluso no llevásemos previsto tener que tomar determinadas medicinas y tengamos que comprarlas en nuestro país de destino. Lo ideal es siempre llevar la receta de nuestro médico donde especialmente indique la composición de la medicina bajo la que tenemos el tratamiento, ya que si en la receta nos indica solo el nombre del medicamento, puede ocurrir que no exista en ese país que estamos visitando y no entiendan qué tipo necesitamos. Si en la receta lo que indican son los componentes, nos podrán administrar un medicamento para nuestra salud que aunque no sea el que estamos acostumbrados a tomar, realice la misma función. Dentro de la Unión Europea no hay ningún tipo de problema si llevamos una receta de nuestro país, lo que sí tenemos que tener en cuenta es que los sistemas sanitarios sí son diferentes y por lo tanto un medicamento que en nuestro país no nos cuesta dinero, en el extranjero no tiene por qué darse la misma situación.