Los niños con TDAH, igual que cualquier otro niño en edad de crecimiento, necesitan un montón de alimentos sanos, sin procesar con buenas cantidades de frutas y verduras diarias. Esta dieta es bueno para todos los niños, pero es especialmente importante para las personas con TDAH.
La mayoría de los niños pueden comer una dieta relativamente pobre y seguir funcionando bastante bien, al menos a corto plazo. Para un niño con TDAH, sin embargo, la nutrición puede ser crucial. Puede significar la diferencia entre un buen y un mal día. Es muy importante prestar atención a lo que los niños con TDAH comen y el efecto que tiene la comida sobre ellos. A continuación puedes encontrar algunas sugerencias específicas para el niño con TDAH.
Consejos para la alimentación en niños con TDAH
Evitar los colorantes artificiales, saborizantes y conservantes
Existen investigaciones que muestran que estas sustancias pueden hacer que los niños sin TDAH se muestren más nerviosos y menos concentrados, así que imagina cómo podría perjudicar a un niño con TDAH. E sta evidencia es tan fuerte que en Europa hay una etiqueta de advertencia en ciertos alimentos con colorantes artificiales donde se informa que pueden tener un efecto adverso en la actividad y atención de los niños.
Cuidado con el azúcar
Aunque no todos los niños con TDAH reaccionan al azúcar de una manera observable, lo mejor es (como para cualquier otra persona de cualquier edad) reducir el consumo de azúcar. Los refrescos por ejemplo, deben tomarse de forma puntual y muy ocasional. El zumo de frutas mejor si es natural y como mucho una taza al día. La fruta es saludable siempre y cuando no se tome en exceso y siempre sin azúcar.
Tomar productos orgánicos
Comed en casa orgánico tanto como sea posible. Los alimentos orgánicos tienen más nutrientes porque no tienen pesticidas, hormonas ni aditivos. En un estudio de 1.100 niños, las personas con niveles más altos de pesticidas en la orina tenían el doble de probabilidades de tener TDAH. El consumo de frutas y verduras orgánicas reduce esta carga de pesticidas en un 80%. Puede ser una opción bastante más cara pero merece la pena.
Tomar un suplemento de omega-3
Es necesario que te asegures de que tu hijo (con o sin TDAH) tiene una buena combinación de grasas saludables en su dieta. Parece que la grasa es mala para la salud pero si es saludable es necesaria, como por ejemplo, la grasa de los aguacates. Una gasa de calidad es buena para la salud, por ejemplo además del aguacate, el aceite de oliva también es un buen ejemplo de grasa saludable.
Las grasas saturadas, las que puedes encontrar en productos como en la carne y los productos lácteos puede que no sean tan perjudiciales como se pensaba anteriormente, siempre y cuando se consuman de forma moderada. Lo que resulta primordial es que los niños reciban suficientes ácidos grasos omega-3 que son cruciales para la función cerebral. Puedes encontrarlos en cualquier tipo de pescado, aceite de lino... Aunque lo ideal es acudir al médico y preguntar si es necesario que tu pequeño tome algún suplemento de omega-3.
Por supuesto, tanto si tu hijo tiene TDAH como si no lo tiene, debes recordar que todos somos lo que comemos y por eso, es necesario mantener una dieta equilibrada. Una dieta vegetariana o con un consumo de carne moderado es lo ideal para mantener una salud fuerte y saludable. Los niños necesitan aprender a comer bien para que cuando se conviertan en personas adultas puedan tener una buena relación con la comida y que además, sean capaces de escoger los alimentos más adecuados para su salud. Una dieta equilibrada en casa es necesaria desde que los niños son bebés para que vayan acostumbrándose a una buena alimentación.