La menopausia es una fase de la vida de la mujer en la que su cuerpo deja de producir las hormonas necesarias para poder tener la menstruación. Suele aparecer en mujeres maduras entre los 45 y 55 años aunque a veces aparece de forma prematura antes de los 40, dependiendo de la persona.
Esta nueva etapa de la vida es muy significativa para la mujer porque es un punto de corte que supone un cambio en su vida. Unas lo llevan mejor que otras pero en general todas pasan por síntomas depresivos, ansiedad e irritabilidad junto con los cambios fisiológicos que vienen asociados a ella como el debilitamiento de los huesos, aumento de peso y colesterol perjudicial, atrofiamiento del tono vaginal...
Esta nueva forma de comportarse puede chocar a los familiares cercanos que conviven a diario con la mujer. A menudo no comprenden que es lo que está pasando y pueden sacar conclusiones erróneas sobre su comportamiento. Por eso, a continuación os dejamos con los principales retos a los que se enfrenta la pareja en conjunto y lo que podemos hacer por solucionarlo.
1- No es una cuestión meramente femenina.
La pareja tiene que entender que el inicio de la menopausia es algo que afecta a los dos, no es algo que deba de llevar la mujer en silencio solo por el hecho de que ocurre en su cuerpo. Tiene que haber un apoyo mutuo porque es algo que va a afectar a los dos, a la vida de pareja.
El primer paso es utilizar la empatía e intentar entender como se siente ella con todos los cambios físicos y emocionales que está experimentando. En este sentido la comunicación es vital para brindar apoyo. La mujer tiene que proporcionar toda la información que su pareja necesite con el objetivo de poder facilitarle la vida diaria y apoyarle como es debido. Él por su parte también puede hacer un esfuerzo por buscar información con el fin de brindarle apoyo. La esposa nunca debe de dejar al margen al pareja y querer pasar por el problema ella sola.
2- Decaimiento de la vida sexual.
Debido a la reducción de la cantidad de hormonas que sufre la mujer, la vida sexual de la pareja seguramente se verá afectada. Al haber menos estrógenos en su corriente sanguíneos se produce una reducción del deseo sexual. Otros factores como la falta de lubricación y la falta de elasticidad y tono de los músculos pélvicos contribuyen a aumentar los problemas del coito y los complejos de la esposa.
Los hombres tienen que ser pacientes y no presionar, solo conseguirán que ellas estén más irritables y se sientan incomprendidas. Como alternativa proponle hacer actividades juntos de carácter no sexual para que sienta que aun tienes interés por ella y que quieres estar a su lado independientemente de lo demás. Que no tengan interés sexual no significa que no tengan esa necesidad de sentirse amadas.
3- Apóyala en su cambio de vida.
Con la menopausia la mujer seguramente tenga que empezar a cambiar su estilo de vida. Tiene que empezar a cuidarse más, comer saludablemente y hacer algo de ejercicio diario, esto la ayudará a reducir muchos de los síntomas diarios como el cansancio o los sofocos. Puedes ayudarla acompañándola en esos nuevos hábitos. Por ejemplo, puedes ir con ella a caminar y hacer ejercicio juntos. Si todavía tenéis hijos en casa podéis poneros de acuerdo y empezar a comer todos un poquito más saludable. No se trata de que tengáis que comer todos los días verdura pero si comer todos lo mismo y no preparar platos distintos. No queremos que ella se sienta diferente. Comer lo mismo que ella es demostrarle que compartes con ella parte de "su sufrimiento".
Hazle ver que en realidad esos cambios no son malos, es una excusa para que ambos empecéis a cuidaros un poco más. De hecho, los hombres también pasan en estas edades por una pequeña fase llamada "andropausia" en la que hay una bajada en los niveles de testosterona que reduce en cierta medida su potencia sexual (su deseo también suele verse afectado), lleva a un aumento del peso, debilitamiento del pelo, problemas en el sueño, etc. Es muy parecida a la menopausia femenina, la diferencia es que la mujer tiene cambios más bruscos en el ciclo hormonal y los efectos son más marcados. En el hombre el proceso es más lento y por eso no se le da tanta importancia pero la realidad es que la tiene.
4- Ayúdala en la búsqueda de nuevos hobbies.
Como su pareja puedes brindarle tu apoyo proponiéndole nuevas alternativas de ocio. Así demostrarás que piensas en ella y que te preocupas por su felicidad. Si la sorprendes con una lista de actividades a las que estarías dispuesto a apuntarte con ella la sorprenderás y te lo agradecerá. Si os lo podéis permitir es una buena idea hacer una escapada romántica los dos juntos con el objetivo de redescubriros de nuevo y que tanto la mujer como su pareja puedan desconectar de los quehaceres diarios.
Aliméntala a quedar con otras amigas que estén pasando por la misma experiencia. Le vendrá bien relacionarse con otras mujeres y también es una buena forma de retomar amistades y que desconecte de estar en casa.
5- No hagas preguntas.
Nos referimos a que hay momentos en los que es mejor no cuestionarse el por qué tu esposa hace lo que hace. Puede que estéis disfrutando de una agradable velada y de repente ella abandone la mesa enfadada, que se empiece a obsesionar con un tema sin venir a cuento, etc. hay veces que intentar sacar lógica a los comportamientos de ella no sirve de nada.
La mujer en fase de climaterio tiene prontos o cambios de humor que pueden descolocar a los demás miembros de la familia. Es debido a los cambios hormonales, pero tienes que comprender a tu esposa. ¿Cómo estarías tú si cada poco sufrieses sofocos, insomnio, falta de concentración, ataques de melancolía y problemas de memoria? Y eso solo a nivel psíquico...
6- No perdáis el humor.
Como pareja puedes trivializar las cosas dándole otro punto de vista. No se trata de que os riáis de ella o le quites importancia a sus emociones, si no de intentar que ella se ponga también en tu lugar. Hazle ver lo mucho que te descoloca sus comportamientos. Hay momentos que pueden incluso resultar graciosos, tal vez no en ese instante pero si dentro de medio año. Ella necesita alguien que le quite hierro al asunto y que esté dispuesta a hacerle sonreír.