Es posible que hayas escuchado a otras personas que hacen dieta o ejercicio decirte que pierden entre 1 y 2 kilos por semana... ¡es demasiado rápido! ¿Realmente es saludable perder peso tan rápido? En realidad, para perder peso de forma saludable se debe realizar de forma más lenta y progresiva, en este caso, la paciencia será la mejor estrategia para obtener buenos resultados.
La perdida de grasa
Si comienzas un programa de pérdida de peso saludable, podrías preguntarte dónde sucederá primero la pérdida de peso. ¿Se reducirá tu abdomen hacia abajo primero o se mostrará pérdida de peso en tu pecho o en tus muslos? La respuesta variará de persona a persona. Al comienzo de un programa, muchas personas que hacen dieta experimentan pérdida de peso únicamente de agua. Es probable que notes que tu vientre se vuelve un poco más pequeño. Pero la pérdida de agua es diferente a la pérdida de grasa.
La pérdida de grasa se producirá a un ritmo muy gradual en todo el cuerpo. Algunas personas lo notan primero en el pecho, y otras en sus caderas y muslos. Si bien puedes apretar y tonificar diferentes áreas de su cuerpo con ejercicio, no puedes detectar la reducción o elegir un área de su cuerpo donde desees que ocurra antes la pérdida de grasa.
Perder peso de forma rápida
Perder peso más o menos rápido también puede variar de persona a persona y depende también, de dónde quieras perder más peso. Cuando veas en algún sitio en televisión o escuchando a otras personas planes de pérdida de peso, demasiado rápidos... debes comprender que esos resultados no son realistas y si ocurren, no sean para nada saludables.
En algunas situaciones extremas, las personas que hacen dieta pueden perder hasta 4 kilos por semana. Pero extremo es la palabra clave aquí. La gente en muchos reality shows y quienes pierden peso por publicidad, toman medidas extraordinarias para perder mucho peso en un tiempo limitado. Y a veces se les paga por sus esfuerzos... Las circunstancias que ves en la televisión a menudo no son las mismas circunstancias con las que te enfrentas en la vida real.
Además, las personas que participan en algunos de esos programas de televisión son seguidos por médicos. Se ejercitan bajo la supervisión de entrenadores (hasta ocho horas por día) y siguen una dieta muy estricta y controlada por calorías. También viven con cámaras que los siguen para grabar cada bocado y tratamiento... para después ganar dinero con esas imágenes a través de la televisión.
Estos esfuerzos extremos para perder peso generalmente no son sostenibles durante un período prolongado de tiempo. Muchos concursantes del programa de pérdida de peso recuperan el peso después de regresar a casa y a sus vidas normales.
Las dietas para perder peso rápido no funcionan
No todo lo que ves en la televisión falla, de hecho, hay algunos programas comerciales que están aceptados y se adaptan a un plan de dieta saludable... en las primeras etapas. Después seguirlas no sería nada saludable y es mejor desistir de ellas.
Entonces, ¿estas dietas rápidas para perder peso funcionan? Muchas veces lo hacen. Pero a la rápida pérdida de peso a corto plazo le sigue una transición a un plan de mantenimiento a largo plazo para una pérdida de peso más lenta y más razonable. Entonces, después de las fases introductorias, la pérdida de peso se reduce a cerca de unos 400 gramos por semana (que esto sí es más razonables y normal).
Hay personas que siguen dietas muy bajas en calorías y debe estar supervisada por un médico. Los médicos ocasionalmente colocarán a un paciente en una dieta líquida de 800 calorías por día para preparar al paciente para la cirugía o por otras razones médicas. Pero estos programas de pérdida de peso no son seguros para todos y solo deben seguirse bajo supervisión médica.
Por último, los que se han sometido a una cirugía para perder peso , como una cirugía de bypass gástrico o de banda gástrica, a menudo experimentan una pérdida de peso a una tasa mucho mayor que un kilo por semana, pero eventualmente, su tasa de pérdida también disminuirá.
Lo recomendable
Lo recomendable es hacer ejercicio y seguir una dieta guiada por un nutricionista para que te oriente en lo que haces. Perder 400 gramos por semana es lo más recomendable. Es lo más realista y además cuando se pierde este peso por semana, no existe peligro de sufrir el temido efecto rebote. Perder peso más rápido no es saludable.