Las hemorroides son pequeñas varices que se ubican en la zona del ano. Son provocadas por una dilatación anormal de las venas situadas en la zona baja del recto o el ano. Normalmente, se produce una dilatación excesiva que da lugar a las hemorroides o almorranas. Existen dos tipos de hemorroides. Por un lado, están las externas que se encuentran debajo de la piel que rodea el ano. Por otro, las internas se localizan en la zona baja del recto sin llegar al ano.
Las causas que pueden provocar las hemorroides pueden ser varias. En primer lugar, afecta la genética, es decir, si hay antecedentes en la familia de hemorroides. También pueden ser debidas a otras razones como el estreñimiento, el sobrepeso o la falta de fibra por la alimentación que se tiene. En el caso de las mujeres, hay algunas causas que solo les repercuten a ellas. La menstruación y el embarazo pueden provocar la aparición de hemorroides en éstas.
¿Cuándo se realiza una operación de hemorroides?
Las hemorroides no siempre tienen que ser molestas para las personas, es más, lo más común es que sean asintomáticas y no hay que actuar sobre ellas. El problema viene cuando la persona que tiene hemorroides empieza a sentir dolores intensos por la inflamación de las venas dilatadas. Además, otro de los síntomas más frecuentes es el sangrado de las hemorroides.
Cuando comienzan a ser molestas es el momento de acudir al médico para que, a través de una exploración, escoja cuál es la forma de acabar con ese problema. La cirugía suele ser la última opción que se escoge, antes hay otros tratamientos con lo que se buscará poner remedio a las molestias. Alguna de estas opciones son la crioterapia, la coagulación o las bandas elásticas. Normalmente, suele escogerse la cirugía como solución para las hemorroides cuando éstas son internas y tienen un gran tamaño.
¿En qué consiste la operación de hemorroides?
Como acabamos de decir, el médico recurrirá a la cirugía siempre y cuando el resto de tratamientos no sean suficientes para poder terminar con esta dolencia. El tipo de operación que se realice dependerá, en gran medida, del tamaño de las hemorroides y de su ubicación. Otro aspecto que se tendrá en cuenta antes de la cirugía es la sintomatología que presente el paciente por la excesiva dilatación de las venas ubicadas en la zona baja del recto.
Antes de la operación, el paciente le deberá contar al médico qué tratamientos médicos está siguiendo en ese momento por si alguno influyera en la coagulación de la sangre. En este caso, será necesario interrumpirlo antes de someterse a la operación. También se solicitará que el paciente no coma en las horas previas a la intervención. Por lo demás, no será necesaria ninguna preparación previa al día de la cirugía, por lo que bastará con presentarse en el lugar y hora acordados.
Con el objetivo de que el paciente no padezca dolor alguno, el médico procederá a anestesiarle antes de la cirugía. Dependiendo de cómo sea y dónde se encuentre la hemorroide, éste podrá optar por una anestesia local o general. La elección dependerá de lo que más le convenga al paciente. Antes de la operación también se escogerá el método que se va a emplear. Por un lado, se puede optar por la tradicional cirugía con bisturí o, por otro, por el empleo del láser. Normalmente, la duración de la cirugía suele ser entre una y dos horas.
¿Cómo es el postoperatorio?
Una vez que el paciente ha sido operado, en el caso de que se haya empleado anestesia general, se le llevará a una habitación para que pueda despertarse poco a poco. Puede ser dado de alta el mismo día, aunque dependiendo el caso el médico puede solicitar que pase la noche en el hospital para ver cómo va evolucionando de la intervención.
Normalmente, no es una operación que requiera de grandes cuidados una vez realizada. Aunque sí que es verdad que será necesario que alguien acompañe al paciente el día de la intervención por los dolores que sienta ese día y en los siguientes, el médico le recetará medicamentos para que estos no sean tan intensos. Lo más importante radica en el cambio de hábitos que deberá imponerse el paciente. Ya hemos dicho al comienzo algunas de las causas de las hemorroides, por lo que deberá tener cuidado para que no vuelvan a reproducirse siempre que se puedan evitar.