El Tramadol es uno de los analgésicos más recetados y consumidos en nuestro país junto a otros fármacos populares como el ibuprofeno o el paracetamol. A pesar de ello, su uso no es aconsejable debido a la gran cantidad de efectos secundarios y a la adicción que puede provocar en la persona que lo toma.
Qué es el Tramadol
Se trata de un potente analgésico de la familia de los opioides que trata dolores de intensidad una intensidad moderada a severa. Si se administra por vía intravenosa el efecto es inmediato y el dolor desaparece de inmediato. En el caso de tomarlo por vía oral, el efecto se produce pasadas a las dos horas. El dolor suele desaparecer durante unas seis horas más o menos. El Tramadol está indicado para tratar dolores diversos como es el caso de los provocados a causa de una intervención quirúrgica o por fracturas de huesos.
Efectos secundarios del Tramadol
Los efectos secundarios más habituales suelen ser vómitos, náuseas o mareos. A parte de ellos, la persona que toma Tramadol puede sufrir otros efectos secundarios poco comunes:
- En algunos casos hay que personas que toman Tramadol y sufren una reacción alérgica dando lugar a la aparición de urticaria o a la inflamación de la cara o de la boca. En tal caso es importante el acudir al médico.
- Otro de los efectos secundarios de tomar Tramadol puede ser el sufrir algún tipo de anomalía cardíaca como taquicardia. Sin embargo si se toma la dosis recomendada no debería haber ningún tipo de problema relacionado con el corazón.
- Hay personas que al tomar Tramadol pueden sufrir ciertos problemas digestivos como es el caso de estreñimiento aunque con el tiempo y tomando la dosis adecuada desaparece.
Adicción del Tramadol
Una de las mayores preocupaciones de los médicos a la hora de prescribir un analgésico como el Tramadol es su posible poder adictivo. Ello suele ocurrir con la mayoría de los opioides y es un riesgo que hay que evitar. Si se sigue las pautas establecidas por el profesional y el paciente toma la dosis adecuada no debería de haber ningún tipo de problema. Sin embargo cada vez son más los pacientes que se hacen adictos a un fármaco como es el Tramadol. Está demostrado que si la persona toma Tramadol durante varias semanas seguidas y se exceden en su consumo van a desarrollar una adicción semejante a la de la cocaína. Es por ello que es importante el seguir el tratamiento indicado por el médico y no pasarse bajo ningún concepto en la dosis ni en el tiempo.
Es tan grave y serio el problema que hay personas que pueden gastarse grandes sumas de dinero para hacer frente al fuerte síndrome de abstinencia que les provoca el Tramadol y llegar a encerrarse en sus casas con el único fin de consumir dicho analgésico.
Para evitar caer en tal adicción es importante el seguir una serie de consejos como es el caso de seguir siempre la prescripción médica y respetar en todo momento las dosis establecidas por el profesional. Hay que evitar también una vez acabado el tratamiento, el dejar dicho fármaco en casa. En el caso de tener hijos adolescentes no debes tener dicho analgésico a la vista ya que es bastante frecuente que los jóvenes lo tomen con el fin de experimentar nuevas sensaciones.
El Tramadol es por tanto un analgésico que sólo se debe tomar bajo prescripción médica y siguiendo el tratamiento indicado por el propio médico. Se trata de un potente analgésico que puede causar adicción a la persona que lo toma por lo que hay que ser muy cuidadoso a la hora de tomarlo.