A lo largo de todo el embarazo, la mujer se debe de someter a una serie de pruebas y análisis médicos, que sirven para controlar el desarrollo del futuro bebé y la salud de la propia madre. En algunas ocasiones, la embarazada padece de alguna enfermedad previa al embarazo, algo que siempre debe de conocer el médico que controle la gestación para tenerlo controlado.
Pero es posible que en otros casos, la mujer embarazada desarrolle alguna enfermedad o patología provocada por los numerosos cambios que sufre el cuerpo durante el proceso del embarazo. El movimiento de los órganos que cambian de lugar para dejar paso al crecimiento del feto o los cambios hormonales sufridos desde la gestación, pueden causar algunos problemas de salud que hay que mantener bajo control.
Una de estas patologías que pueden ser previas o causadas por el embarazo, es el aumento de la presión arterial. La hipertensión puede ser muy peligrosa en general para todas las personas que la padecen, pero muy especialmente en el caso de las embarazadas.
Qué es la hipertensión
El cuerpo está lleno de vasos sanguíneos por donde circula la sangre, algo fundamental para que el organismo reciba el aporte de oxígeno y nutrientes que necesita para funcionar correctamente. La presión arterial, es la fuerza que aplica la sangre sobre la pared de las arterias del cuerpo. Este bombeo es imprescindible para que la sangre circule de forma correcta.
La hipertensión ocurre cuando de forma continuada, los vasos sanguíneos reciben una presión muy alta de forma constante. Con cada latido del corazón, la sangre se va bombeando hacia los vasos distribuyéndose así por todo el cuerpo. Si la presión arterial está alta, el corazón tiene que realizar un mayor esfuerzo para poder bombear.
Tener hipertensión puede ser muy peligroso, generalmente esta patología no presenta ningún síntoma, por eso es más complicado detectarla. La presión arterial elevada puede causar graves enfermedades en el corazón, los riñones o el cerebro. Pero para las mujeres embarazadas, la hipertensión supone un riesgo aún mayor.
Durante el embarazo pueden surgir diferentes tipos de hipertensión
- La preeclampsia
En este caso, la hipertensión aparece causada por los cambios sufridos en el sistema circulatorio a causa del embarazo. Este trastorno puede ser muy peligroso tanto para la madre como para el desarrollo del bebé. La preeclampsia aparece cuando se da una subida de la presión arterial y la aparición de proteínas en la orina.
La preeclampsia suele aparecer pasadas las 20 semanas de gestación y afecta aproximadamente a un 15% de las mujeres embarazadas. Si se detecta a tiempo es posible controlar los efectos de este tipo de hipertensión, que además generalmente desaparece después del parto.
Pero la preeclampsia puede derivar en un estado mucho más grave de la enfermedad, llamada en este caso eclampsia. Es muy importante vigilar este estado ya que la eclampsia puede estar acompañada de convulsiones y en casos graves, el coma.
-Hipertensión gestacional
La hipertensión está causada por el embarazo y aparece después de la semana 20, desapareciendo normalmente una vez finalizado el embarazo. Muchas mujeres con hipertensión gestacional pueden derivar en preeclampsia, por lo que es muy importante mantenerse bien controlada.
-La hipertensión crónica
Es cuando la embarazada padece de hipertensión desde antes del embarazo. En este caso, el problema de la presión elevada no desaparece cuando finaliza el embarazo.
-La hipertensión crónica con preeclampsia
Muchas mujeres que padecen hipertensión crónica, también desarrollarán preeclampsia durante su embarazo.
Ocurre en muchos casos de embarazo múltiple, y puede ser muy peligroso para la madre ya que además de las convulsiones, puede aparecer daño renal y hepático.
Peligros de la hipertensión durante el embarazo
Como has podido ver, la hipertensión puede ocasionarte problemas muy graves de salud, pero también es muy peligroso para el desarrollo de tu bebé, que puede sufrir graves problemas debido a la falta de oxigeno. En función del tipo de hipertensión, el médico que lleve tu embarazo te dará una serie de recomendaciones que deberás seguir al pie de la letra.
Para la embarazada, la hipertensión grave puede provocar:
- Inflamación del cerebro
- Hemorragia en el cerebro
- Insuficiencias renal y cardíaca
Incluso en los casos más graves, la alteración continuada de la presión arterial puede causar la muerte.
Para el feto, que la embarazada padezca de hipertensión puede causar un desprendimiento de la placenta. Si esto ocurre, el feto deja de recibir oxígeno y nutrientes, lo que podría causar la muerte del bebé o que naciese con un peso muy bajo. Además, la hipertensión puede provocar que la placenta no reciba flujo de sangre y causar daños en el desarrollo del feto.
También existe mayor riesgo de que el bebé nazca de forma prematura, antes de las 37 semanas, incluso si el caso es grave, el médico suele adelantar el parto para evitar otros problemas más graves.
Cuál es el tratamiento para la hipertensión en embarazadas
En el caso de que la hipertensión sea leve y aparezca durante el embarazo, el especialista generalmente realizará un seguimiento mensual, en el que se comprobará que el feto tiene un desarrollo normal. Es posible que el médico te recete algún fármaco para controlar la tensión arterial, algunos de estos medicamentos son peligrosos para el bebé, por este motivo debes tener cuidado y seguir las instrucciones que el médico te indique.
Además, el especialista te dará una serie de pautas físicas y nutricionales que te ayudarán a reducir la hipertensión si tu caso es leve. Si la hipertensión es grave, puede recomendarte el reposo para toda la segunda parte del embarazo.
Si estás embarazada y notas que te suben las pulsaciones o que te pones nerviosa y alterada muy a menudo, consulta lo antes posible con tu médico. Es fundamental que te revisen para comprobar si necesitas tratamiento. Recuerda que si la hipertensión se agrava y aparece la preeclampsia, puede tener unas consecuencias terribles, tanto para ti como para tu bebé.
Incluso si aún no estás embarazada pero estás buscando el positivo, es importante que te cuides lo máximo posible para evitar este tipo de situaciones. Adopta un estilo de vida saludable, realiza ejercicio moderado y pide una revisión a tu médico.