La alergia al sol es el nombre que se le da comúnmente a la erupción polimórfica lumínica. Se produce cuando la piel de una persona, al entrar en contacto con los rayos solares sufre una reacción que le provoca lesiones. Aunque en realidad no está catalogada como una alergia, sí que es verdad que se suele hablar de ella como tal porque sus efectos suelen ser parecidos a los que puede producir cualquier otra reacción alérgica que sí que lo está considerada como tal.
Aunque es posible que se den casos durante todo el año de manera excepcional, sí que es cierto que la mayor parte de estos se dan entre la primavera y los primeros meses de verano por ser los rayos de sol más intensos. Por otra parte, afecta a todo tipo de pieles. Aunque es verdad que la proporción puede variar entre razas, pero al final puede haber casos de todo tipo. Lo mismo puede decirse sobre si afecta más a hombres que a mujeres. Aunque las mujeres sí que son más propensas a padecer esta enfermedad de la piel, corren el mismo riesgo todas las personas que abusan de su exposición al sol.
La causa concreta de por qué se produce una reacción al sol en la piel de determinadas personas, no se sabe a ciencia ciertaCausas y síntomas de la alergia al sol
En verdad, la causa concreta de por qué se produce una reacción al sol en la piel de determinadas personas, no se sabe a ciencia cierta, aunque sí que se puede deducir. Se sabe que, cuando una persona se expone al sol más del tiempo recomendado, puede darse que aparezcan pequeñas lesiones en la piel. Esto se produce porque los rayos ultravioleta que salen del sol son perjudiciales para la piel humana si no se lleva a cabo una protección correcta. Como hemos dicho antes, los rayos que son más perjudiciales para nuestra piel, son aquellos que se dan en primavera y principio de verano por ser más intensos.
Por otro lado, tenemos los síntomas. Ya hemos explicado la alergia al sol que no se trata de una alergia, mejor dicho que no está catalogada como tal, pero que sus síntomas sí que tienen un parecido con los de una reacción alérgica. Estos no tienen por qué hacer aparición mientras se está en contacto con el sol. Es más, en la mayoría de los casos, tienen que pasar unas horas desde la exposición solar para que estos hagan aparición.
Los primeros síntomas de la alergia al sol que suelen hacer aparición son el enrojecimiento de la piel acompañado de picores y dolor. Normalmente, lo más común es que aparezca en aquellas zonas donde no es costumbre que nos dé el sol todo el año. Por ello, las partes del cuerpo más afectadas serían el cuello, el escote, los brazos, la espalda o las piernas. Por el contrario, zonas como las manos y la cara, al tener una exposición diaria, es más complicado que puedan tener algún tipo de lesión por la exposición al sol.
Los primeros síntomas de la alergia al sol que suelen hacer aparición son el enrojecimiento de la piel acompañado de picores y dolorLa lesión más común que puede aparecer en nuestra piel recibe el nombre de pápula. Éstas son pequeñas lesiones que aparecen como erupciones repartidas por la zona en la que se ha producido la reacción a los rayos ultravioletas. Esto sería lo que pasa en los casos más leves. Cuanto mayor es la exposición y menos cuidada y protegida tenemos nuestra piel, mayores serán los síntomas. Es posible que las pequeñas pápulas den lugar a unas más grandes que tenga aspecto de ampollas y que, además, estén rellenas de líquido. Por último, están los enrojecimientos de la piel que requieren de un tratamiento más complejo por tratarse de unos síntomas muchos más persistentes y que incluyen lesiones más graves como puede ser la aparición úlceras.
