La amoxicilina es un antibiótico que se puede encuadrar dentro del grupo de las penicilinas y que se usa por parte del especialista para impedir la proliferación de determinadas bacterias que pueden provocar una determinada infección en el organismo. Se puede adquirir en las farmacias y al tratarse de un antibiótico se compra bajo prescripción médica. A continuación te explico todo lo que debes saber sobre uno de los antibióticos más usados y populares en la sociedad.
Para qué se usa la amoxicilina
Es un antibiótico que se suele usar para tratar diferentes enfermedades y afecciones como es el caso de infecciones respiratorias, infecciones en la piel o infecciones de tipo urinario.
Cómo tomar la amoxicilina
La posología de la amoxicilina es tomarla dos veces al día cada doce horas o tres veces al día cada 8 horas. No hace falta acompañar la ingesta de este antibiótico con otros alimentos ya que no provoca ningún tipo de daño en el interior del estómago como si ocurre con otros tipos de medicamentos.
En el caso de tratarse de una solución líquida es conveniente el agitarla bien para mezclar el contenido de una forma homogénea. En el caso de ser tabletas masticables deben triturarse o masticarse antes de ser consumidas. Si por el contrario la amoxicilina viene en forma de cápsulas deben ser ingeridas enteras y con un poco de agua.
Como ya he comentado más arriba, se necesita de la prescripción médica para poder tomarlo. Una vez empezado el tratamiento hay que terminarlo aunque la infección haya desaparecido casi por completo. En caso contrario existe el riesgo de que la infección vuelva a aparecer de nuevo.
Contraindicaciones de la amoxicilina
Este medicamento no está recomendado para personas que sean alérgicas a la penicilina, que tengan sida o leucemia. Las mujeres embarazadas deben consultar a su médico antes de empezar a tomarla ya que su ingesta podría provocar algún que otro daño al feto. Las personas que padezcan de insuficiencia renal deben tener cuidado con la cantidad ingerida ya que en caso de tomar más cantidad de la deseada podrían provocar una reacción en el problema renal que padecen.
En cuanto a los efectos secundarios más habituales a la hora de tomar la amoxicilina están la fiebre, diarrea, vómitos o alguna reacción de tipo alérgica. Se trata de los efectos secundarios que suelen causar la mayoría de antibióticos. En el caso de sufrir otro tipo de efecto secundario totalmente diferente es esencial el acudir al hospital para saber lo que ocurre y las posibles complicaciones que pudieran darse.
Cómo guardar la Amoxicilina
Es importante el mantener dicho medicamento en su envase y bien cerrado y por supuesto alejado del alcance de los más pequeños de la casa. La solución oral debe mantenerse dentro de la nevera aunque tampoco hay problema en el caso de tenerlo a temperatura ambiente. Una vez no se vaya a usar nunca más no es conveniente tenerlo en casa y es aconsejable llevarlo a la farmacia para desecharlo sin problema alguno.
A partir de ahora sabes un poco más de un antibiótico tan usado como es la amoxicilina. Son muchas las personas que están en contra de este tipo de medicamentos sobretodo en el momento de ser ingeridos por los más pequeños ya que los antibióticos aunque son bastante efectivos frente a posibles infecciones, debilitan el sistema inmunológico de los menores provocando desde estados febriles altos hasta vómitos o diarreas. Sea como fuere la amoxicilina es sin lugar a dudas uno de los antibióticos más ingeridos y consumidos a la hora de tratar diferentes tipos de infecciones como las que afectan al sistema respiratorio.