La morfología de la auriculoterapia nos muestra que es una combinación de dos vocablos. El primero, aurícula que significa oreja y terapia, un sinónimo de cura. Por ello nu nombre nos indica que es un método de sanación que se basa en las orejas.
Es una rama de la acupuntura por lo que se practica con agujas chinas. No puede considerarse una ciencia debida a su efectividad, que no está científicamente comprobada. Hay quienes dudan de su eficacia y quienes, sin embargo, la practican y defienden que es una buena solución para ciertas enfermedades.
Esta pseudociencia se basa en la idea de que la oreja humana es un reflejo del resto del cuerpo. Por lo tanto todas nuestras partes del cuerpo (órganos, músculos e incluso partes cerebrales) están representadas en ella. Aquellos que creen en esta técnica, defienden que sirve para intentar solucionar ciertos problemas de nuestro sistema a través de la oreja.
La auriculoterapia es una rama de la acupuntura que se practica con agujas chinasComo funciona
La base de este tratamiento es el equilibrio de la energía vital. Nuestro cuerpo dispone de una energía que debe estar equilibrada. Al existir una enfermedad ese equilibrio no se encuentra en nuestro organismo por lo que para solucionarlo debemos volver a él. Al igual que la sangre fluye por nuestro cuerpo, esta técnica defiende que la energía fluye por unos canales llamados meridianos.
La medicina china defiende que en las orejas se sitúan esos meridianos y que en ella se encuentran más de 200 puntos en los que conectar con ellos y tratar así las diversas enfermedades. Por ello la auriculoterapia se realiza con diversas agujas, al igual que en la acupuntura.
Enfermedades en las que se recomienda
Esta técnica no se debe utilizar para todo tipo de transtornos. Entre los que se recomiendan están:
- Problemas endocrinos: Es una de las principales razones de las personas que acuden a sesiones de auriculoterapia, perder peso. Ciertos expertos que la practican defienden que es una gran técnica para perder líquidos, eliminar toxinas y sobre todo para controlar la ansiedad que nos llevan a los excesos alimenticios. Además consigue disminuir nuestro apetito al liberar endorfinas.
-Problemas ginecólogos: Aquellos que defienden esta pseudociencia explican como es capaz de controlar las hormonas por lo tanto regular la menstruación. Además muchas mujeres acuden a consultas de auriculoterapia a intentar quedarse embarazadas ya que regula el ciclo menstrual y libera el estrés que puede ser uno de los principales motivos por los que no quedarse embarazada.
La auriculoterapia cada vez tiene más aceptación popular -Problemas de dolor: Para ciertos dolores como las neuralgias o las ciáticas la auriculoterapia es un perfecto aliado. Ese dolor es posible de controlar activando ciertas zonas en nuestras orejas.
-Problemas psicológicos: Muchos expertos defienden que todo el psicológico, y aquellos se que dedican a tratar las enfermedades en nuestras orejas defienden que el celebro se refleja en ellas. Esta es la razón de que transtornos como el vértigo o el insomnio sean de los principales problemas que se buscan erradicar en las sesiones de auriculoterapia. Así mismo ocurre con el estrés, la ansiedad o incluso la depresión. Esta técnica es capaz de liberar endorfinas que hacen que el paciente se encuentre mejor.
Enfermedades para las que no se recomienda
Lo primero que debemos saber sobre esta técnica es que no es un método probado, como hemos explicado, por lo tanto no debe ser una solución para graves enfermedades.
Además se desaconseja para cierto tipos de personas como por ejemplo las mujeres embarazadas. Ya hemos explicado que al estimular ciertos puntos en las orejas se pueden producir algunas hormonas que sean perjudiciales para el feto.
En problemas hereditarios o degenerativos tampoco se recomienda debido a que no se ha probado su eficacia. Ocurre lo mismo con las enfermedades contagiosas o de índole sexual.
Por todo ello recomendamos tener precaución con la auriculoterapia, informarse correctamente de como afectaría a su enfermedad y sobre todo no dejarse en manos de cualquier persona. Lo suyo es acudir a profesionales acreditados que sepan como actuar.
