La cocina es un lugar que se encuentra en continuo movimiento y renovación, y más en los últimos años en los que se ha puesto de moda un mayor conocimiento en el terreno culinario, provocado sobre todo por la cantidad de programas de televisión sobre el tema. También es cada vez mayor el conocimiento en la cocina vegetariana y/o vegana, es decir, aquella que no cocina alimentos procedentes de carne animal o incluso derivados. Todo esto ha provocado que alimentos como el seitán, cada vez sean más conocidos en la actualidad pese a tener más de 600 años y provenir de países tan lejanos como China y Japón.
El seitán, también conocido popularmente como "carne vegetal" por su similitud en forma, color, textura y sabor, y en la fuerte dosis de proteínas que supone para el cuerpo tras su ingesta, es una receta moderna propia de la cocina macrobiótica. Este tipo de cocina nos trae las más tradicionales creaciones de Oriente, unidas a la medicina e incluso a la espiritualidad para formar en nuestro cuerpo y mente un equilibrio, tan propio como el Ying y el Yang. Si quieres conocer un buen sustitutivo de la carne para una dieta vegetariana o solo por gusto, pero que nos aporte las mismas proteínas y algunos beneficios más, en Bekia te contamos más sobre su elaboración, conservación y propiedades.
Elaboración
La elaboración del seitán es muy fácil de realizar en casa. Lo primero que tenemos que hacer en introducir gluten de trigo en un cazo al fuego junto con un poco de agua. Esto hará que con el calor se vaya fundiendo hasta conseguir una pasta muy homogénea. Esta pasta se hace bolas como si fueran albóndigas y se pueden dejar así o partirlo en pequeños trozos.
En otra olla debemos poner un diente de ajo entero, pelado pero sin trocear, junto a un litro de agua fría, salsa de soja y alga kombu, un vegetal deshidratado con muchas propiedades antioxidantes. Cuando el agua esté hirviendo, introducimos los trozos o bolas de gluten realizadas anteriormente y lo dejamos a fuego medio durante unos 45 o 50 minutos. Lo retiramos del fuego y lo dejamos enfriar.
Conservación
Una vez enfriado todo lo que hemos realizado, que pueden ser pequeñas o grandes cantidades, decidimos cuánto vamos a consumir. El seitán es un alimento que al ser realizado a través de gluten de trigo mantiene bien su conservación. En el frigorífico podremos tenerlo unos 3 o 4 días sin problema, solo tenemos que tener en cuenta que siempre esté acompañado de algún tipo de salsa, por ejemplo de soja, para que no se reseque a la hora de consumirlo. Otra opción es hacer abundantes cantidades de seitán para una continua dieta por ejemplo, y congelarlo. De esta forma no será necesario elaborarlo cada vez que queramos consumirlo y siempre tendremos una porción a mano.
A la hora de consumirlo tenemos que tener en cuenta que podemos cocinarlo de muchas formas distintas. Al igual que la carne, el seitán puede empanarse, freírse o usarse en estofados, por lo que no es un alimento limitado dentro de una dieta vegetariana, donde se tiene la falsa creencia de que es una dieta muy aburrida y con poca variedad.
Propiedades
El seitán es una proteína vegetal derivado del gluten de trigo, por lo que sus aportaciones son muy sanas, no solo si tenemos una dieta vegetariana, sino simplemente si queremos tener una dieta equilibrada y sana, o tenemos algún problema de colesterol y queremos cuidarnos un poco más, sin dejar de perder sabor y diversión en una cocina moderna.
No contiene grasas saturadas, por lo que es un buen aliado para prevenir enfermedades cardiovasculares, además de ser una gran fuente de proteínas para nuestro cuerpo, ya que se conoce que es equivalente la cantidad de proteínas al 24% del peso total. También es un alimento rico en vitamina B2 y en hierro, por lo que son numerosas las ventajas con respecto a la carne si queremos usarlo como sustitutivo.
Pero no todo son ventajas a la hora de incluir el seitán en nuestra dieta, sino que tenemos que tener en cuenta algunos aspectos:
Para comenzar, hay que tener precaución si somos celíacos o vamos a cocinarlo en casa para una comida donde alguno de los invitados padezca de intolerancia al gluten, ya que el seitán es un alimento creado a partir de gluten de trigo fundamentalmente.
También tenemos que tener en cuenta que toda dieta que llevemos a cabo debe ser equilibrada y que prácticamente ningún abuso de ningún tipo de alimento es bueno a largo plazo. No es recomendable comer en exceso el seitán como fuente única de proteínas, ya que a la larga nos puede producir desmineralización, lo que puede conllevar a contraer anemia con el tiempo.
Después de todo lo que acabamos de conocer sobre el seitán podemos concluir que es un alimento desconocido pero que puede suponer un buen aliado a la hora de sustituir las grasas de las carnes o si estamos empezando a llevar una dieta vegetariana o vegana