Alguna vez hemos escuchado casos o tenido cerca a personas que han pasado por un trastorno depresivo. Para remediar esta enfermedad, recurrimos a medicamentos en los que se encuentra la paroxetina . La paroxetina es un medicamento que se utilizar para paliar la depresión y/o el trastorno de ansiedad en adultos. Pertenece al grupo de medicamentos denominado inhibidores selectivos de la recaptación de una sustancia que tenemos en el cerebro llamada serotonina que ayuda a mantener el equilibrio mental, que se encuentra en niveles bajos en las personas que se encuentran deprimidas o tienen ansiedad. Es decir, la paroxetina se encarga de aumentar estos niveles de serotonina en el cerebro.
Para qué sirve la paroxetina
La paroxetina podemos encontrarla en forma de comprimido redondo de 20 mg, casi blanco, en el que se puede ver inscrito en una de sus caras un "20". Este medicamento se presenta en envases conteniendo 14, 28 o 56 comprimidos. Los trastornos para lo que la paroxetina se utiliza son:
- Trastorno obsesivo compulsivo. Pensamientos obsesivos, repetitivos con comportamiento no controlado, es decir, cuando no dejamos de encontrarnos con pensamientos molestos y sentimos la necesidad de realizar acciones una y otra vez.
- Trastorno de angustia. Crisis de página incluyendo los causados por el miedo a los espacios abiertos (agorafobia).
- Fobia social. Cuando nos encontramos ante el miedo causado por tener contacto social que hace que evitemos dicho contacto.
- Trastorno de estrés post-traumático. Estos trastornos se desarrollan después de una experiencia atemorizante. Los síntomas que puede presentar una persona con trastorno de estrés post-traumático son pesadillas recurrentes, evitar personas, lugares o situaciones que le hagan recordar el trauma, sentirse extremadamente nervioso, ataques de ira...
- Trastorno de ansiedad generalizada. Cuando no encontramos en un estado de ansiedad y angustia constante, preocupación excesiva difícil de controlar.
La paroxetina también suele medicarse para ayudar en algunos casos a mujeres que tienen trastornos dispóricos premenstruales, es decir, mujeres que se encuentran en un estado depresivo en el período comprendido entre la ovulación y la menstruación. También ayuda a tratar los bochornos en mujeres que están pasando por el periodo menopáusico.
Cómo tomar paroxetina
La paroxetina puede venir presentada como tableta, suspensión (líquido), una tableta de liberación prolongada (tableta en la que el efecto dura aproximadamente hasta la siguiente toma debido a su lenta absorción) y cápsula por vía oral. Las tabletas, suspensión y tableta de liberación prolongada suelen tomarse una vez al día por la mañana o por la tarde. Por otro lado, las cápsulas suelen ser ingeridas por la noche antes de dormir . Aunque en cualquiera de sus formas la paroxetina se puede tomar sin necesidad de ingerir ningún tipo de alimento, siempre es recomendable hacerlo para evitar posibles molestias estomacales.
Si debes tomar paroxetina, tu médico será el encargado de ajustar la dosis de tu tratamiento. Normalmente, las personas suelen notar mejoría al cabo de las dos semanas de tratamiento, pero debe de saber que la paroxetina puede ayudar a controlar tus síntomas, pero no a curar tu condición. Se deberá seguir tu tratamiento aunque la persona tratada note mejoría sin dejar de tomarla sin consultarlo antes con tu médico ya que podrían producirse efectos adversos y experimentar síntomas de abstinencias tales como depresión, cambios de humor, estado de ánimo normalmente alterado, mareos, dolores de cabeza, etc.
Para dejar de tomar la paroxetina, tu médico le indicará cómo ir disminuyendo progresivamente tu toma al igual que, si nota que después de un tiempo sigue sin sentirse mejor, consúltelo con tu médico y este hará aumentar tu toma gradualmente, en incrementos de 10 mg, hasta llegar a la dosis máxima diaria (60 mg).
Cualquier persona podrá tomar la paroxetina pero se deberá tener un especial cuidado en personas que:
- Estén tomando otro medicamente incompatible con la paroxetina.
- Si la persona tratada padece algún problema de riñón, hígado o corazón.
- Si padece o presenta crisis epilépticas.
- Posee episodios maniáticos.
- Padecen diabetes.
- Toma una dieta bajo en sodio.
- Padece tensión ocular elevada.
- Está embaraza o piensa quedarse embarazada.
- Tienen menos de 18 años de edad.
Como habrá podido observar, la paroxetina es un medicamento complicado en el que debe tomarse bajo supervisión médica debido a que podemos sufrir numerosos efectos secundarios que deben ser controlado por nuestro facultativo.