El virus del Zika es una nueva enfermedad que ha empezado a aparecer en América Latina en febrero del 2015, hace un año aproximadamente. Aunque se era consciente de la gravedad de la enfermedad ha sido este pasado lunes cuando la Organización Mundial de la Salud (OMS) lo ha definido como una emergencia internacional, debido a que esta afectando no solo a países de América Latina si no a Europa y Estados Unidos, que se han descubierto otros casos.
¿Qué es exactamente el virus del Zika?
El virus del Zika es una enfermedad cuyo contagio se produce por la picadura del mosquito del género Aedes aegypti en seres humanos. Es un virus perteneciente a la familia del flavivirus y l os síntomas que produce son parecidos a otras enfermedades ya conocidas como la fiebre amarilla o el dengue.
La transmisión es principalmente por sangre. Una persona afectada del virus puede transmitirla cuando es picada por el mosquito de la variedad Aedes aegypti y este a su vez pica a otra persona, convirtiéndola en transmisor del virus. Hay dos variedades del virus del Zika, la variedad africana y la asiática, parecida ambas a la fiebre amarilla.
Actualmente solo en América ya hay 24 países donde se han presentado casos de contagio : Brasil, Paraguay, Bolivia, Guyana y Guyana Francesa, Ecuador, Colombia, Panamá, Surinam, Venezuela, Haití, Barbados, Puerto Rico, Guadalupe, República Dominicana, Honduras, El Salvador, Guatemala, México y recientemente en Estados Unidos. En Europa se han visto casos aislados en España, Dinamarca y Austria.
¿Qué síntomas produce?
De momento solo se han registrado 3 muertes debido al virus, un bebé, un hombre que sufría lupus y una joven de 16 años. En realidad, los síntomas en si mismos no son muy graves pues gran parte de los enfermos se recuperan. Presenta entre 3 y 12 días de incubación aunque no se sabe con precisión porque muchas veces la enfermedad aparece asintomáticamente, es decir, sin síntomas visibles. En adultos cuando aparecen signos se puede observar manchas rojizas en la piel y ojos, dolores en músculos y articulaciones, vómitos, fiebre, dolor de garganta y cabeza... Al cabo de un par de semanas a lo sumo los síntomas desaparecen de la misma manera de la que vinieron.
¿Hay un tratamiento específico?
No lo hay. Lo único que podremos hacer si enfermamos es reposar, beber líquido para evitar deshidratarnos y tomar medicamentos para aliviar los síntomas, como paracetamol para bajar la fiebre y antihistamínicos para reducir las rojeces de la piel. No se receta ácido acetilsalicílico por el riesgo a hemorragias.
Si se sospecha de padecer el virus las recomendaciones son acudir al centro médico más cercano y seguir las instrucciones del médico, también se recomienda el aislamiento para evitar contagios a otras personas porque aunque la principal forma de transmisión es debida a la acción del mosquit o también se han registrado casos por transmisión sexual, sanguínea y perinatal, es decir, a través de la placenta de la madre al feto.
¿Se relaciona la enfermedad con la microcefalia en los bebés?
Se ha cuestionado mucho esta pregunta y es que todavía no hay una respuesta clara al 100%, aunque se sospecha que hay una asociación porque el aumento del número de casos coincide con la incidencia de la enfermedad.
Durante el 2014 que fue un año antes de la aparición del virus del Zika en Brasil se contaron aproximadamente 145 casos de microcefalia en los bebés. El martes 3 de febrero el ministerio de Salud de Brasil reportó 4783 casos sospechosos en los últimos cuatro meses. De ese total se han estudiado de momento 1113 dando lugar a 404 casos confirmados y 709 descartados. Los responsables de las investigaciones afirman que es la única explicación que tienen para la aparición de tantos nacimientos de bebés con daños cerebrales, pues el virus contagiado por el mosquito puede transmitirse perinatalmente a través de la placenta materna.
Como consecuencia de esta sospecha la OMS dio la alarma de emergencia internacional de salud pública como medida preventiva y con el fin de promover internacionalmente la investigación entre el virus y la microcefalia en bebés, pues aunque la sospecha es más que evidente todavía hay lagunas como por ejemplo la cantidad de personas que tuvieron el virus.
¿Se relaciona la enfermedad con el Síndrome de Guillain-Barré?
Es otra enfermedad de la cual se sospecha que podría tener una asociación. El Síndrome de síndrome de Guillain-Barré es una enfermedad autoinmune que da lugar a la parálisis progresiva del cuerpo y desensibilización a las señales externas como el calor, texturas, dolor... Es debido a que el propio sistema inmunitario ataca al sistema nervioso, exactamente a la mielina que rodea los axones de las neuronas y que permite que se transmita el mensaje eléctrico. Sin mielina es imposible. Como consecuencia, las neuronas son incapaces de captar y enviar las señales eléctricas de unas a otras por los que los músculos quedan "paralizados".
En el mes de julio del 2015 se detectaron en América Latina, más concretamente en Brasil, 76 personas con daños neurológicos y de ellas 42 confirmaron haber tenido el virus del Zika . Más adelante otros países registraron un aumento de casos. En Panamá por ejemplo se ha registrado 169 casos en el último año. Finalmente, desde el 1 diciembre hasta principios de enero (solamente un mes) se registraron 46 pacientes con el trastorno. Cabe decir que la incidencia del síndrome era en el pasado infrecuente, solo 0,4 y 4 casos por 100.000 habitantes por año según la OMS.
¿Cómo podemos prevenir el contagio del virus del Zika ?
Actualmente no existe una vacuna para el virus y la mejor prevención para los europeos es evitar los países donde está extendido el virus. Hay algunas compañías que devuelven el dinero a los viajeros que han comprado a estas regiones el billete, pregunta directamente a tu compañía si es el caso. Otras recomendaciones en el caso de que no tengamos elección de viajar a América Latina son:
- Utilizar prendas que nos obliguen a tapar las piernas y brazos.
- Poner mosquiteras alrededor de la cama. Si tienes bebés se tratará de evitar lo máximo posible la exposición de los miembros, así como poner una mosquitera en el carricoche.
- Quedarnos en lugares que tengan mosquiteras en las puertas y ventanas. Evite también lugares públicos donde pueda haber agua estancada.
- Comprar ropa que esté tratada con permetrina, desgraciadamente es cara y muchas personas no pueden acceder a este recurso.
- Aplicarnos repelentes en la piel pero nunca a bebés menores de 2 meses. En los bebés más mayores primero debemos aplicarnos directamente el repelente a nosotros y después aplicárselo a él a través de nuestras manos, evitando echarle en las manos, boca o zonas cercanas a los ojos.