Las relaciones que son poco saludables te quitarán salud e incluso te pueden hacer enfermar. Es necesario que seas consciente que ese tipo e relaciones con los demás deben estar fuera de tu vida y que, incluso, deberás mejora la relación que tienes contigo mismo. Solo de esta manera mejorarás tu salud más de lo que te imaginas.
Sal de las relaciones poco saludables
Este puede ser un paso realmente difícil de tomar, pero si tienes un amigo que te llena de ansiedad y estrés constantemente en lugar de ayudarte a aliviar esos sentimientos, puede ser hora de cuestionar esa relación. Tendrá que ser progresivo pero puedes conseguirlo.
Durante ese período de liberación, también puedes determinar tus sentimientos sobre la relación con mayor precisión debido a que no estás cerca de ellos con tanta frecuencia. Centrar más la atención en las personas que son positivas, que tienen intereses y pasatiempos similares a los tuyos y que te inspiran marcará una gran diferencia.
Aceptación
Aceptarte a ti es fundamental para sentirte bien. Si no te aceptas, sentirás ansiedad y mucho estrés tanto a corto como a largo plazo. Aceptarte por lo que eres, tu aspecto, tu pasado, de dónde vienes y todo lo demás es un increíble acto de amor propio. Si no puedes aceptarte a ti mismo y las cosas que no puedes cambiar, ¿cómo puede esperar que otras personas lo hagan o esperar que te sientas satisfecho? Esto simplemente te mantendrá en una etapa constante de ansiedad.
Otra gran parte de la aceptación es aceptar a otras personas y sus acciones y que no tienes control sobre las cosas que hacen o dicen. Puedes hacer sugerencias y dejar que se conozcan tus sentimientos, pero la gente hará lo que quiera y dirá lo que quiera de todos modos.
A veces las personas dicen cosas que no quieren decir cuando están molestas y eso está bien hasta cierto punto porque eso es algo que la mayoría de nosotros tendemos a hacer. Aceptar que solo puedes controlarte a ti mismo, tus propias palabras y tus propias acciones te ayudarán a sentir más en control de tu propia vida, aliviando el estrés que otros pueden poner en ti.
Comprende de dónde vienen tus sentimientos de estrés y ansiedad
Trata de comprender la causa de tus sentimientos de estrés y ansiedad. ¿Es trabajo? ¿Es dinero? ¿Es deuda? ¿Es falta de amor? ¿Son relaciones tóxicas? Hay un millón de razones diferentes, grandes y pequeñas, pero debes llegar a la raíz del problema y solucionarlo. Algunas situaciones toman más tiempo que otras, como grandes cantidades de deuda, que no se pueden borrar de la noche a la mañana. Sin embargo, pequeños pasos para abordar los problemas es clave.
Si se trata de deudas de tarjetas de crédito, observa tus hábitos de gasto. Trata de ver dónde puedes presupuestar y ahorrar, y pon algo de dinero extra para pagar tu deuda en lugar de solo hacer los pagos mínimos mensuales.
Cuando estás estresado, una de las últimas cosas que debes hacer es reprimir esos sentimientos, como cubrirlos con adicción a las drogas y al alcohol, buscar atención innecesaria o autolesionarte. Puedes sentir que te estás ayudando y que no es gran cosa, pero este tipo de cosas se convierten en hábitos muy rápidamente, y luego se convierten en problemas aún mayores.
Cuando te vuelves dependiente de una sustancia u otras perspectivas negativas, solo te estás dañando a ti mismo, incluso si parece que las cosas están mejor por el momento. En realidad, todo lo que estás haciendo es lastimar tu mente y cuerpo y crear más estrés para ti mismo. Buscar soluciones rápidas para tratar de distraerte del problema real no es la respuesta. Tómate el tiempo y piensa de dónde vienen tus problemas y quién o qué los está causando. Empieza poco a poco a solucionar tus problemas pero no dejes de hacerlo.
Ríete
La risa es la mejor medicina y debe incorporarse a tu vida todos los días. La risa y los sentimientos de felicidad genuina son las emociones más grandes para combatir el estrés y la ansiedad. Además, se ha demostrado que reírse solo quince minutos al día puede quemar de 10 a 40 calorías diarias o hasta 2 kilos al año. Entonces, ya sea que te estés riendo con su ser querido, amigos, compañeros de trabajo o simplemente viendo una película divertida, asegúrate de incorporar algo de diversión y risas a tu vida.
Escríbelo todo
Si te sientes estresado y ansioso, una buena forma de tratar de atravesarlo todo y encontrar algo de claridad es escribiéndolo todo. Anotar las tareas que necesitas realizar, una lista de lo que te ha estado estresando, o incluso hacer una lista de tus sueños y aspiraciones puede ayudar a quitarle algo de peso a tus hombros.
A veces es una buena idea dejar que tu mente se suelte en una hoja de papel: escribe todos los pensamientos ansiosos y confusos dentro de tu cabeza, y no te detengas hasta que te sientas aliviado, ligero y tranquilo. Cuando ves todo en papel, es mucho más fácil clasificar y decidir qué debe abordarse de inmediato, qué puedes esperar y qué problemas puedes haber creado en tu propia mente.
Practica la gratitud
Es posible que estés estresado por las cosas que no tienes o las cosas que aún no has hecho, pero hay tantas cosas buenas que sí tienes y cosas que has hecho. Ser agradecido, reconocer a todas las personas maravillosas en tu vida, tener un techo sobre tu cabeza y comida en tu estómago y en la nevera es una bendición.
Lo que damos por sentado, otras personas están rezando por tenerlo, y a veces puede ser difícil llegar a esta conclusión porque tendemos a vivir en un mundo materialista muy impulsado por el dinero. Cuando miras lo que te estresa desde otro punto de vista, puedes cambiar las cosas. No borrarás esos sentimientos por completo, pero en lugar de sentirte estresado, sentirás agradecimiento por lo que sí tienes hoy.
La vida puede ser mucho más fácil para ti si cambias tu perspectiva, te aceptas y mejoras tus relaciones interpersonales.